Los gobernantes asistentes a la XIII Cumbre Iberoamericana firmaron hoy la Declaración de Santa Cruz de la Sierra, el documento básico de la reunión sobre la inclusión social, que fue clausurada a continuación.
El acto solemne de firma del documento -que contiene 45 puntos, un anexo sobre programas de cooperación y catorce comunicados especiales-, se registró en el salón Gardenia del hotel Los Tajibos, sede de la reunión.
Además, los gobernantes de los 21 países iberoamericanos aprobaron el Acuerdo de Santa Cruz de la Sierra, una vez analizado el informe presentado por el ex presidente brasileño Fernando Henrique Cardoso sobre reformas del sistema de Cumbres.
Por este acuerdo, se crea una Secretaría General Iberoamericana, y deja la aprobación del estatuto de ese órgano a la XIV Cumbre de 2004 de Costa Rica.
Al acto de firma asistieron todos los gobernantes que acudieron a Santa Cruz, excepto el presidente argentino Néstor Kirchner, que viajó horas antes de terminar la cumbre a su país, y el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
La superación de la pobreza, la reforma del sistema del Consejo de Seguridad de la ONU y el reconocimiento de que los subsidios distorsionan el comercio son algunas de las principales recomendaciones incluidas en la Declaración de Santa Cruz.
Reconocen los gobernantes que las reformas estructurales "en muchos casos" no han sido suficientes para disminuir las desigualdades y la exclusión social, por lo que la lucha contra la pobreza es esencial para consolidar la democracia y evitar la desestabilización
Se comprometen a avanzar en la adopción de políticas solidarias para erradicar la extrema pobreza, y exhortan a países desarrollados, a organismos de cooperación e instituciones financieras a reforzar la ayuda a ese tipo de programas.
El documento aprobado se pronuncia por un eficaz fortalecimiento del multilateralismo y del papel de la ONU, y en favor de una amplia reforma del Consejo de Seguridad y del Sistema de Naciones Unidas.
La Declaración de Santa Cruz señala que la disminución del financiamiento para el desarrollo y la cooperación multilateral afectan a las sociedades, lo que se "agrava" por la volatilidad de los flujos financieros y de capitales, el descenso de los precios de los productos básicos de exportación y barreras comerciales que, como los subsidios, distorsionan el comercio.
Para contribuir, además, a superar las crisis financieras de la región, los países latinoamericanos, España y Portugal ratifican el deber de resolver de manera efectiva, justa y duradera el problema de la deuda exterior.
La Declaración expresa su compromiso con la lucha contra el terrorismo en todas sus formas de acuerdo con el derecho internacional.
Reiteran su compromiso con la consolidación de la democracia, el mantenimiento del Estado de Derecho y la protección y promoción de los derechos humanos.
Además de expresar su decisión de fortalecer la lucha contra las drogas, considerado como un problema mundial, se comprometen a fomentar la concesión de microcréditos para favorecer el desarrollo teniendo en cuenta la equidad de géneros.
La Declaración declara necesario que se amplíen el acceso equitativo, universal y permanente de la población a los sistemas de salud y seguridad social, así como el acceso a los medicamentos esenciales.
EFE