Cisjordania - Mexicanos, uruguayos, chilenos y brasileños forman parte del equipo de observadores internacionales que se repartirán el miércoles por Gaza y Cisjordania para intentar que las elecciones palestinas sean lo más democráticas y transparentes posible.
"La Humanidad tiene una deuda histórica que saldar con los palestinos y para ello hace falta un esfuerzo global. Por eso estamos aquí", resume el observador chileno Mikhael Marzuqa, en Ramala, Cisjordania.
Enviado especial de un país donde viven 350.000 personas de origen árabe, la mayoría de ellos palestinos, este político perteneciente al Partido por la Democracia asegura que es admirable el esfuerzo de los palestinos por votar en su propia tierra pese a las limitaciones materiales.
"Los palestinos están empeñados en que estas elecciones asienten las bases de su democracia y creo que nos van a dar una lección", afirma.
El representante diplomático de México ante la Autoridad Palestina, Francisco Alonso, intenta describir, conmovido, el "deseo de democracia" que late en el pueblo palestino.
"Creo que vamos a asistir a un magnífico proceso electoral con una nutrida participación, de cerca del 80%, pese a la ocupación y el muro que Israel construye en Cisjordania. Es difícil votar así, pero esta gente desea hacerlo", subraya.
Alonso, destinado en Ramala desde hace algunos meses, sólo pide a Israel que permita la libertad de movimientos durante 24 horas para dejar al pueblo palestino vivir este "momento histórico".
"Los palestinos tienen una oportunidad de oro de demostrar al mundo que pueden decidir su futuro", explica.
La misma opinión comparte Alfonso Ouro Preto, uno de los ocho observadores enviados por el gobierno brasileño, un país donde hay 14 millones de ciudadanos de origen árabe que conviven con una amplia comunidad judía.
"Es un gran número, pero éstas no son unas elecciones como las demás. Son un paso esencial en la historia de este pueblo y una base indispensable para la paz entre israelíes y palestinos y la estabilidad de la región", explica este funcionario del ministerio de Relaciones Exteriores de Brasilia.
Los observadores coinciden en que no se dan todas las condiciones para el total ejercicio del derecho a votar libremente.
A pocas horas de la apertura de los colegios electorales, se multiplican los rumores sobre sanciones que Israel podría aplicar a los palestinos que voten en Jerusalén-este o sobre las horas que habrá que esperar en los retenes, antes de depositar la papeleta en una urna.
"El ejército israelí debe permitir que un palestino salga de su casa, acceda sin problemas a una de las oficinas electorales y deposite su voto libremente después de rellenarlo con sus propias manos", señala Marzuqa.
Alonso recuerda que habrá varios puntos álgidos el miércoles, sobre todo Naplusa, al norte, donde hay numerosos grupos violentos enfrentados entre sí, Gaza, y el voto limitado de los palestinos en Jerusalén-este.
Sin embargo, relativiza las consecuencias de la entrada del movimiento islámico radical Hamas en el Parlamento, como prevén todos los sondeos.
"Creo que se está exagerando. Hay que ver por qué Hamas está donde está. El lobo sólo se ve cuando uno lo tiene encima, pero nadie se pregunta por qué se ha producido esta situación, que es el resultado de 45 años de opresión", explica.
En su opinión, los gobernantes palestinos deben aceptar los mecanismos de la democracia, "aunque ello suponga la entrada de Hamas en el gobierno".
"Habrá que hacer balance cuando lleguen al poder. Es verdad que Hamas ha demostrado una capacidad organizativa extraordinaria en esta Intifada, prestando ayuda social a la gente que se quedó sin nada y eso les va a ayudar en estas elecciones", recordó.
AFP