MATÍAS CASTRO
La Ciudad Vieja está patas arriba. Hoy empieza la filmación de la parte uruguaya de la película "Blindness" y hasta el último de los vecinos parece estar enterado de que unas 450 personas se están movilizando en torno a este rodaje.
Ayer, a las 16 horas, la chica que atendía un carrito de chorizos en la esquina de Colón y Washington, señalaba contenta: "La película es dos cuadras para abajo, te vas a dar cuenta". No había hecho falta terminar la pregunta para que se diera cuenta de que se buscaba el lugar de rodaje. Muchos le habían preguntado lo mismo a lo largo del día.
La escena se repetía en varios negocios, incluso detrás del hospital Maciel, a varias cuadras de allí. "Una cuadra para allá, y otra a la izquierda", decía una vecina. El trayecto que marcaba conducía hacia el set de filmación con más despliegue que ha visto Uruguay. Y se ubicaba en Colón, entre Piedras y Cerrito, muy cerca de donde dos años atrás se rodó la falsa Habana de Vicio en Miami.
De hecho la exigencia de trabajo es tan grande, que fuentes del ambiente publicitario afirmaron que escaseaban utileros disponibles para otros rodajes. Ayer la actividad era febril y ocupaba a decenas de personas coordinadas por la productora El Camino Films.
Un grupo de unos diez extras uruguayos ensayaban desde las tres de la tarde en un local de la productora Cinecien, en la rambla 25 de Agosto y Colón. Este grupo de extras era una parte de los casi 300 contratados para figurar en el rodaje. Todos interpretan papeles de ciegos que recorren las calles, ya que la historia de la película trata sobre una inexplicable epidemia de ceguera. El vestuario que usarán es ropa desgastada y aparentarán ser personas hambrientas que están sobreviviendo como pueden en las calles de una ciudad sin nombre.
El pequeño grupo de extras fue seleccionado para integrar una escena que se filmará presumiblemente el miércoles. En esa escena, los "ciegos uruguayos" asaltarían a Julianne Moore cuando ella entra a un supermercado. La locación para ese supermercado se armó en la sede de la Asociación de Despachantes de Aduana.
Ese local no es el único que se ha visto revolucionado con este rodaje. También se filmará en el interior del local de La Opera, frente a la sucursal 19 de Junio del Banco República, en el interior de una casa en Carrasco y en la calle Colón. Esta última, en su tramo entre Piedras y Cerrito, será el epicentro para la filmación.
A pocas cuadras de allí se había instalado una gran carpa para los actores. Camiones, ómnibus para los equipos y generadores eléctricos estaban estacionados a varias cuadras. Hoy ya estarán más cerca del set, de modo de facilitar el acceso a los actores.
La cuadra ha sufrido un cambio radical en su aspecto. Que hayan pintado fachadas, como se hizo durante el rodaje de Vicio en Miami, es lo de menos. Con marquesinas falsas, veredas ensanchadas, plantas, cartelería en distintas casas y hasta iluminación nueva, la cuadra, que hasta ayer no tenía negocios abiertos al público, ahora los tiene. En la ficción, claro. Un local de venta de maquinarias, por ejemplo, se convirtió en una librería y sus dueños estaban ayer por la tarde muy contentos mirando el despliegue de personas, utilería y equipo técnico.
Uno de los momentos más llamativos llegará el lunes, cuando se filmen una serie de escenas bajo una lluvia artificial en el set de Colón. Para eso se dispondrá de una serie de aparatos que funcionan a modo de regaderas, que harán llover a lo largo de todo el lugar. Ayer por la tarde se estaban probando. Las escenas bajo la lluvia se filmarán también el martes.
A las 13 horas aproximadamente, llegó ayer Julianne Moore al aeropuerto de Carrasco y se alojó en el hotel Sheraton. Salió de la sala Vip de la terminal con guardaespaldas, cosa que Danny Glover, el día anterior, no había precisado. Los dos actores, junto a Mark Ruffalo y los japoneses Yoshino Kimura y Yusuke Iseya están alojados también en el Sheraton.
La presencia de Moore ha contrastado con la de Glover, por la sencillez de éste. El jueves por la noche, ya instalado en el hotel, rechazó una botella de vino que se le ofreció como gentileza. Prefirió, amablemente, ensalada de frutas y sopa. Se mostró gentil a su llegada al aeropuerto, aunque profesional a la hora de dar un solo discurso a la prensa. Si se lo interrumpe a las corridas, cede unas palabras, pero no improvisa y no permite que se lo desvíe demasiado en su discurso.
Además de los actores y del director Fernando Meirelles, han llegado a Uruguay algunos equipos. Entre ellos una cámara especial, de un modelo que no hay en el país. Los productores han alquilado igualmente los equipos a Mussitelli, empresa local especializada en la materia. Algunas de las escenas serán filmadas incluso con cuatro cámaras, según adelantaron de la producción. Y a diferencia de otras películas, se filmará en película de cine, de 35 milímetros, y no en video digital.
Mientras tanto se habla de la posibilidad de otro rodaje, esta vez de una película completa, también a cargo de El Camino. Se trataría de Romp, basada en un comic y producida por Marvel Comics.
La procesión que va por dentro del director
El director Fernando Meirelles ha querido dejar escritas pequeñas historias emocionales que va viviendo con el rodaje de Blindness. Optó por el formato "blog" para hacerlo. Aunque los primeros escritos corresponden al viernes 24 de agosto, no son muchos los apuntes que allí figuran. Pero son muy ilustrativos de la forma en que encara la filmación y, sobre todo, son muy disfrutables.
El jueves pasado fue su última incursión en el blog. Sus apuntes se titulan "sobre carisma" y se pregunta de dónde viene la fuerte atracción que ciertas personas ejercen. Lo ejemplifica con la actriz Sandra Oh, a la que conoció después que ella filmara Entrecopas. Meirelles quedó tan atraído por la actriz que decidió abrirle paso en Blindness, en una intervención que se filmó en el día libre que los productores de Grey`s Anatomy le dieron a ella.
Esa reflexión va unida a una anterior en la que compara la filmación con la elaboración de ciertos platos de cocina, que necesariamente deben ser preparados en el momento de comer. Por ahí desliza su deseo de no ensayar demasiado, de tratar de captar de primera esa frescura que se corre el riesgo de perder cuando la comina debe recalentarse.
Las claves de un film diferente
El presupuesto final, de acuerdo a los productores, es de 25 millones de dólares.
El director, Fernando Meirelles, es a su vez productor asociado del exitoso film uruguayo "El baño del Papa".
El codirector de "El baño del Papa", el uruguayo César Charlone, es el director de fotografía de esta película e hizo lo mismo en la prestigiosa "Ciudad de Dios".
La película es fruto de una coproducción entre empresas de Canadá, Brasil y Japón. La mayor parte de la financiación provendría de Japón.
La empresa uruguaya, El Camino Films, que está a cargo de la producción local, produjo también la película canadiense de ciencia ficción "The speed of thought", que el año pasado se filmó casi por completo en Uruguay.
La película se estrenará en el segundo semestre del próximo año, y, según adelanta la producción, ya está vendida en todo el mundo.
El actor y guionista Don McKellar fue quien se encargó de convencer a José Saramago para que cediera los derechos de su novela "Ensayo sobre la ceguera". McKellar no participa de las escenas que se filman en Uruguay.
Tampoco vendrán Gael García Bernal y Sandra Oh.