LORELEY NICROSI
El general retirado Víctor Licandro acusó a la conducción del Frente Amplio de hacer caer "en el agujero negro de la burocracia" las resoluciones del Tribunal de Conducta Política.
Además, afirmó que el gobierno no cumple con sus "principios históricos" en materia de Defensa.
Licandro, cofundador del Frente Amplio, aseguró ayer en el Plenario Nacional que la dirección de la coalición de izquierda no dejó que saliera "ni un rayo de luz" respecto a las resoluciones del Tribunal de Conducta Política y consideró que ese órgano de disciplina debe juzgar la actuación tanto de los militantes de base como la de quienes ocupan cargos en el gobierno nacional.
En respuesta, el presidente interino del Frente Amplio, Jorge Brovetto, le dijo que el Tribunal de Conducta Política no estaba para juzgar a los integrantes del gobierno de izquierda.
Según Licandro, que pidió en el Plenario exponer las razones que lo llevaron a renunciar a la presidencia del Tribunal de Conducta Política, el gobierno dejó por el camino su visión histórica "antiimperialista y americanista" en materia de Defensa y advirtió que se apartó de las definiciones programáticas sobre Fuerzas Armadas. "Estamos en abierta distancia con la política de Defensa", dijo en alusión a los lineamientos dispuestos por la ministra Azucena Berrutti.
El veterano dirigente, de 89 años, recalcó en su breve intervención en la sesión del Plenario Nacional que pertenece "a la fuerza política" que está en el gobierno, pero no integra "el equipo de gobierno" que toma las decisiones, y subrayó que con su alejamiento de la estructura orgánica del conglomerado, tiene las manos libres para opinar sobre las acciones de la administración Vázquez.
Tras dejar en claro que su renuncia a la presidencia del Tribunal de Conducta del Frente Amplio -que ejercía desde 1994- responde a discrepancias políticas con la dirección de la coalición y con algunas acciones del gobierno, Licandro marcó distancia con el acercamiento hacia Estados Unidos. "Ahora somos aliados", dijo.
Reprochó el hecho de que los distintos aportes que elaboró y entregó al presidente interino de la coalición de izquierda, Jorge Brovetto, no fueron debatidos y consideró que el Frente Amplio se transformó en una organización que se limita a difundir "los logros" del gobierno.
Visiblemente emocionado, pero con paso firme, Licandro se retiró sobre el mediodía del local del Centro de Viajantes en medio del aplauso y la ovación de la gran parte de los integrantes del Plenario Nacional del Frente Amplio.
Sin éxito, los delegados de base de Montevideo trataron de impedir que Licandro se fuera mientras abordaba un taxi.
Los radicales respaldaron a Licandro, mientras Brovetto y los sectores moderados discreparon con él.
Los siete nuevos nombres
Con los votos negativos de los grupos radicales, el Plenario Nacional del Frente Amplio aprobó los nombres de los nuevos integrantes del Tribunal de Conducta Política, mientras se intenta que Licandro retire su renuncia.
El ex diputado socialista Guillermo Chifflet, José Pedro Montero (Asamblea Uruguay), Germán Lezama (Vertiente Artiguista), Juan Carlos Ferreira (Partido Socialista), Uberfil Monzón (MPP), Enio Martínez (Fidel) y la veterana dirigente sindical Jorgelina Martínez (próxima al MPP), son los siete nombres propuestos para integrar el Tribunal.