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Casi una hora después de la amenaza de bomba recibida en el Parlamento se decidió votar un cuarto intermedio hasta mañana a las 10:00 am para continuar votando la ley de Salud Sexual y Reproductiva que incluye la despenalización del aborto.

A las 20:20 horas la sesión del Parlamento se suspendió y se desalojaron las barras debido a una amenaza de bomba que llegó a la Presidencia de la Cámara Alta.

Acto seguido la Brigada de Explosivos del Ejército revisó dentro de la Cámara de Senadores en búsqueda del artefacto denunciado. Al no encontrar nada anormal se decidió retomar la sesión que, minutos después, fue postergada hasta mañana.

Se espera una votación ajustada en el Senado. Un relevamiento de EL PAÍS da que algunos factores inclinarán la balanza hacia una votación negativa.

En el Frente Amplio dos senadores votarán en contra de la iniciativa: Carlos Baráibar y Alberto Cid. Son los únicos que se alinearán a la posición del presidente Tabaré Vázquez, quien vetará el proyecto si el Parlamento lo sanciona.

En el Partido Nacional todos votarán en contra. Julio Lara sería el único dispuesto a acompañar la despenalización del aborto, pero está de viaje. Su suplente, el diputado Jorge Romero, dijo a El País que optará por la negativa.

En el Partido Colorado, Washington Abdala ingresará al Senado en lugar de Julio María Sanguinetti. Abdala abandonará la sala tras insistir con su propuesta de que se realice un referéndum consultivo.

En base a estas posiciones, la votación saldría 15 a 15. El empate implica que el proyecto no prosperará. Sin embargo, algún otro legislador puede retirarse de sala y modificar las mayorías necesarias para darle la media sanción al texto. Para que sea aprobado, se necesita mayoría simple.

En caso de que un legislador que está en contra se retire de sala, los equilibrios cambian y el texto sería aprobado. Si se retira de sala alguno que está a favor, la balanza se inclinaría por la postura negativa.

El proyecto establece que la despenalización del aborto sería por la sola voluntad de la mujer y durante las primeras 12 semanas de gravidez. Bastaría que la mujer alegue ante un médico "circunstancias derivadas de las condiciones en que ha devenido la concepción, situaciones de penuria económica, sociales, familiares o etáreas" para que se le habilite.

También podría realizarse cuando "la gravidez implique un grave riesgo para la salud de la mujer, o cuando se verifique un proceso patológico que provoque malformaciones congénitas" que puedan llegar a afectar la vida de la persona por nacer.

SIN CAMBIO. El presidente Tabaré Vázquez dijo hoy a los medios que su posición sobre este tema "es conocida" y que la misma "no ha variado". Vázquez ya había advertido que si el Parlamento aprueba una ley con un artículo sobre la legalización del aborto, vetaría tal decisión.

En ocasiones anteriores, el primer mandatario sobre este tema que "no debemos temer a la discusión, a la presentación de ideas, por opuestas que sean. Sí debemos temer al oscurantismo, al tratar de no discutir los temas, o imponer por la fuerza a otros lo que nosotros creemos que es correcto".

En ocasión del Día Internacional de la Mujer celebrado el 8 de marzo de 2006, Vázquez recordó que se deben "reconocer todos que la igualdad ante la ley y ante la vida es un derecho de todos y todas las ciudadanas del mundo. Y ese derecho a la igualdad se consagra con políticas de igualdad", sostuvo el mandatario.

EL PAÍS