LAVALLEJA FERNANDO BONHOMME

Después de 10 días vuelven a la caza del puma que vieron unos niños en el fondo de una escuela rural en Lavalleja. Instalaron una jaula del zoológico para capturarlo; quieren evitar que algún cazador lo mate y que el felino cace ganado para comer.

Hace 10 días corrió la noticia de que un puma en estado salvaje había sido visto en los límites de Lavalleja y Maldonado. Ahora la cacería puede complicarse aún más ya que al parecer son dos pumas y no uno.

El jueves pasado, un peón vio a dos de estos animales mientras estaba alambrando en un establecimiento del paraje 5 Esquinas sobre la ruta 12, cercana a Puntas de Pan de Azúcar.

No es común que los pumas vivan en pareja, pero puede tratarse de un adulto con su cría o de un casal en época de apareamiento.

El primer avistamiento había sido realizado por un pequeño grupo de niños, alumnos de la escuela rural N° 90 de Puntas de Pan de Azúcar, en el fondo del predio escolar.

Luego de certificar lo que habían visto con varios testimonios, las autoridades departamentales decidieron capturar al animal con vida y trasladarlo a una reserva para evitar dos cosas: las muertes que el puma pueda ocasionar en el ganado, y que posibles cazadores furtivos quieran alzarse con él como trofeo. Para la cacería fue acondicionado un cepo de hierro, que posee el zoológico municipal de Lavalleja y que usa para contener a algunas de las especies grandes cuando requieren de algún examen o tratamiento.

El cepo fue reacondicionado por funcionarios municipales y ayer lo colocaron en la zona donde fue visto el animal - cerca de una cachimba - donde se presume llega a beber.

Amalia Villalba, experta en esta especie, informó que cuando los pumas cazan animales grandes comen hasta quedar llenos y luego, durante la digestión, toman grandes cantidades de agua, por lo que buscan habitar lugares cercanos a corrientes de agua.

La trampa tiene en su interior una jaula pequeña donde se coloca una gallina como cebo vivo, para llamar la atención del puma, y se acciona cuando la víctima pisa un dispositivo que baja la puerta. La cacería no será rápida, dijeron las fuentes, y como se trata de un trabajo de paciencia y atención dos mujeres que viven en el lugar serán las encargadas de alimentar a la gallina y avisar cualquier cambio que ocurra.

Es posible que haya una falsa alarma porque las gallinas también son presas de animales como zorros, manos peladas hurones o comadrejas. En tal caso, se repone la gallina.