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ANA PAIS

A dos semanas del Día del Patrimonio, el gobierno pretende que la comisión deje de ser honoraria y se convierta en un instituto. El proyecto incluye mejorar los controles para evitar la fuga y falsificación de piezas arqueológicas, obras y documentos.

"Existe un comercio internacional de piezas de carácter falso que creemos tiene una importante expansión en el contexto local, y que a esta altura es preocupante", dice William Rey, presidente de la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación.

Trazabilidad y catalogación: dos formas de controlar la autenticidad y evitar la salida del país de objetos valiosos. Ninguna se aplica hoy en Uruguay, pero el proyecto de ley que elaboran cinco especialistas designados por la ministra de Educación y Cultura (MEC), María Simon, busca cambiarlo.

"Los objetos históricos, documentales y artísticos hoy salen del país o no en función de lo que diga la Comisión -explica Rey, uno de los redactores del proyecto-. Sin embargo, no tenemos la potestad de hacer la trazabilidad de esos objetos. Por eso, hay que generar un registro de dominio para asignar responsabilidades en caso de que el objeto aparezca efectivamente fuera del país".

Por otra parte, el proyecto prevé el cierre de colecciones nacionales de gran importancia histórica y cultural, como el archivo fotográfico Caruso de El País, recientemente declarado Monumento Histórico (ver nota aparte). El objetivo final del relevamiento es obligar a que se informe a Patrimonio cada vez que se incorpore una pieza nueva.

El reciente juicio por difamación e injurias de los directores del Museo Torres García y la galerista Cecilia Buzio de Torres, entre otros, contra el coleccionista Rony Almeida es "sólo una muestra del problema que hay", dice Rey. El ecuatoriano fue procesado sin prisión a mediados de este año por atribuirle a Buzio de Torres la certificación de obras falsificadas de Torres García y la reproducción fraudulenta de obras del maestro.

Rey aclara que prefiere mantenerse en reserva porque las denuncias se encuentran en los juzgados. Pero explica: "Hay una preocupación real porque el tema afectaría enormemente al patrimonio si se viera contaminado por un descontrol en materia de autenticidad. Se devaluaría el valor de nuestros museos y el valor económico del arte, entre otros impactos múltiples. Por eso tenemos que asumir con responsabilidad este tema y trabajar para minimizar el efecto negativo o erradicarlo directamente".

INSTITUTO. El patrimonio es demasiado extenso y representa un capital económico muy grande como para estar a cargo de una comisión directiva de siete personas con funciones honorarias, dice Rey.

Él estima que en este momento, cuando faltan 15 días para el Día del Patrimonio, la Comisión le insume unas 30 horas semanales. Por eso el equipo que elabora la ley pretende que se convierta en un instituto técnico. "Estamos de acuerdo en que la Comisión se tiene que profesionalizar. Lo que todavía no hemos terminado de definir es si el instituto estará en el marco del MEC o si se constituirá en una agencia paraestatal, es decir en una institución pública de derecho privado. Yo veo esta figura como mucho más interesante, porque permite una acción más rápida y eficiente", opina Rey. Un ejemplo de la segunda opción es el Latu.

Junto con la nueva institucionalidad, deberían cambiar los fines. Investigar, documentar, difundir y educar en todo lo relativo al patrimonio, son algunas de las funciones que según el presidente de la Comisión debería incorporar.

Para Rey, el equipo actual de 50 funcionarios tendría que aumentar sólo para incorporar personas a aquellos departamentos técnicos que hoy es necesario crear. Por ejemplo, de historia del arte, patrimonio inmaterial y patrimonio tecnológico e industrial.

Esto, a su vez, obligaría a crear nuevas figuras de protección. Hoy sólo existe la categoría Monumento Histórico, "muy dura y objetualista", dice Rey, ya que "afecta a algo en su individualidad. Hoy el patrimonio ha ganado mucho en una mirada sistémica, una comprensión del objeto en su contexto. Por eso tenemos que ir hacia nuevas categorías, más abiertas, e incluso en distinto nivel de permisividad y control". En Europa, por ejemplo, se maneja el concepto de "paisaje cultural", que abarcan territorios característicos por sus elementos naturales, culturales y por sus bienes patrimoniales tangibles e intangibles. Pero también se precisarían figuras intermedias que permitan operar sobre objetos y los contextos más inmediatos. Tal es el caso del jardín de la quinta de Carlos Vaz Ferreira: si se podara ese paisaje semi selvático de casi 4.000 metros cuadrados o si se lo convirtiera en Versalles, su sentido cambiaría. Y en caso de que alguien decidiera modificar a tal punto el jardín o cualquier otro bien patrimonial, el proyecto de ley prevé nuevos marcos sancionatorios. Con la normativa vigente, la Comisión puede controlar "pero es extremadamente dependiente de la acción de los municipios, que se transforman en el brazo operativo al sancionar una obra o por cualquier recomendación específica que haga la Comisión".

"La Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación entiende que la preservación del archivo fotográfico emanado del Equipo Caruso como un bien patrimonial, asegurará su indivisibilidad futura, y permitirá trasmitir a las futuras generaciones a través de la fotografía de reconocidos profesionales como lo fueron sus integrantes, importantes y trascendentes momentos de la vida política, social y cultural de la sociedad uruguaya del siglo XX", dice la declaratoria de Monumento Histórico, firmada por la ministra de Educación y Cultura, María Simon, el 5 de septiembre.

Se estima que la colección de fotografías tomadas por el Equipo Caruso, integrado por los hermanos Juan y Rafael Caruso, reporteros gráficos del diario El Día, comenzó de forma oficial en 1921. La última foto fue capturada en 1991.

Entre sus históricas imágenes figuran el Campeonato Mundial de Fútbol de 1930, el hundimiento del acorazado Graf Spee en 1939 y los retratos de personalidades como José Batlle y Ordóñez, Juana de Ibarbourou, Domingo Arena, Carlos Vaz Ferreira, Rosa Luna, Ernesto "Che" Guevara, Franklin Delano Roosevelt, Neil Armstrong y Richard Gordon.

Según la declaratoria, la colección de los hermanos "fue varias veces reconocida a través de premios a nivel nacional e internacional".

En 1995, El País adquirió de El Día el archivo Caruso compuesto por 5 millones de negativos, de los cuales el 20% son placas de vidrio. El 70% del total se encuentra indexado.

Esta declaración de Patrimonio es la primera etapa de un proceso que abarca la incorporación de otras colecciones de fotografías de El País e incluso el propio archivo de imágenes del diario. En el texto de la declaración de Monumento Histórico se especifica que dicha categoría obliga a que "el material fotográfico que compone el archivo no podrá ser separado en forma temporal o definitiva, sin autorización del Poder Ejecutivo, previo informe de la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación, a fin de evitar que se ponga en riesgo su conservación como unidad documental y patrimonial".

230 mil Es la cantidad en pesos asignados este año a la Comisión de Patrimonio, para obras en todo el país, públicas y privadas.

Dado que el lema del Día del Patrimonio es "Uruguay país de pensamiento" y Carlos Vaz Ferreira el principal homenajeado, su quinta en el barrio Atahualpa (Vaz Ferreira 3610) será el núcleo del festejo. Este año abrirá por primera vez luego de la restauración en la que la Comisión invirtió $ 1 millón.

Entre los numerosos ciclos de charlas que habrá en todo el país sobre Vaz Ferreira, en el Café de la Pausa (Parvadomus) se harán lecturas de textos del filósofo y escuchas de grabaciones que pertenecen al Museo de la Palabra. Por el fin de semana estará habilitado el predio ubicado en Piedras 668, donde se podrán ver 60 metros de la muralla del Montevideo colonial.

Una feria vecinal, pero de imágenes: el Centro Municipal de Fotografía va a instalar puestos en Peatonal Sarandí de 11 a 19 horas para que los fotógrafos puedan mostrar su trabajo y venderlo. El cierre de inscripciones es el viernes 26 y el costo de $ 150 por media mesa y $ 300 una entera.

Después de 7 años, abrirá sus puertas la Embajada de Francia (Uruguay 853), que funciona en un edificio proyectado por el arquitecto ítalo-uruguayo Luigi Andreoni.

El Centro de Protección de Choferes inaugurará una exposición de maquetas de medios de transporte colectivos que circulaban en Uruguay.

Se podrá ingresar a las oficinas en Ciudad Vieja de la empresa que opera la terminal de contenedores del puerto de Montevideo, Katoen Natie, donde era la casa Arteaga.

La vieja casa Lecoq, construida entre fines del siglo XVIII y principios del XIX, fue reciclada por una cooperativa de viviendas y podrá ser visitada durante el fin de semana. Habrá una exposición de fotografía sobre Alfredo Zitarrosa.