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PABLO ANTÚNEZ

Aprovechando toda la experiencia acumulada a lo largo de los dos últimos focos de fiebre aftosa, la Dirección General de Servicios Ganaderos está desarrollando un entrenamiento técnico en la materia, tanto para los nuevos profesionales incorporados a la lucha sanitaria, como para técnicos de los países que integran el Comité Veterinario Permanente (CVP).

Las acciones se están desarrollando en el departamento de Rocha, manejándose como epicentro un hipotético foco de aftosa ubicado cerca de la frontera con Brasil. El primer día de trabajo abarcó varias charlas técnicas de los epidemiólogos uruguayos y del Centro Panamericano de Fiebre Aftosa. Hoy comienzan las acciones de campo.

Los técnicos, incluidos los de Bolivia y Brasil que participan junto a los uruguayos, estarán divididos en grupos. "Hay grupos de atención de focos, de desinfección y de sacrificio, que deberán aplicar el manual de procedimiento como si se tra-tara de un caso real", explicó Edgardo Vitale, asesor de la Dirección General de Servicios Ganaderos a El País. Al final de su trabajo, cada equipo presentará, mañana, un informe final que será analizado en el cierre de la actividad. Cada veterinario nuevo irá con un tutor, un técnico de mayor experiencia, que irá evaluando su accionar y corrigiendo las fallas, porque se trata de un entrenamiento, según explicó Vitale.

El hipotético foco estará ubicado muy próximo a la frontera con Brasil, lo que obligará a los equipos de técnicos brasileños a realizar un seguimiento de todos los movimientos de animales en la frontera, para rastrear los posibles bovinos, hipotéticamente enfermos. Según explicó Vitale a El País, el productor cuyo establecimiento será el centro del supuesto foco, ya está entrenado y sabe qué información deberá otorgarle a los veterinarios, para que éstos determinen las acciones a emprender.

Entre los grupos, también habrá un equipo técnico que tendrá que atender una sospecha de fiebre aftosa, la que, finalmente estará "desestimada" (es decir no se tratará de la temida enfermedad). La instrucción, organizada sólo por Uruguay, cuenta con el financiamiento del Proyecto Salud Animal del Banco Mundial.