Inversores uruguayos crean marca para Medio Oriente

Estrategia. Arriendan una planta para la faena de ovinos

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PABLO ANTÚNEZ

Un grupo de brokers arrendó la planta del frigorífico Caltes S.A., en Paso de los Toros, para industrializar carne ovina con el cometido de exportar con la marca Savor Foods a los mercados de Medio Oriente y a las grandes superficies de Brasil.

La firma conformada por estos operadores de mercado es Bamidal S.A. y por el momento apunta al ovino. "Encaramos el desafío porque el plan de negocios que presentaban era ambicioso, atractivo y otorgaba un incentivo adicional, porque está concebido para darle valor a la producción, a través de la calidad y brindándole cristalinidad al negocio", explicó a El País Gustavo Basso, responsable de compra y del área financiera de la flamante empresa de capitales uruguayos.

Según Basso, la idea es "exportar un artículo de altísima calidad para intentar capturar un mejor precio al comercializar la carne" y por eso se impulsa la marca Savor Foods en los mercados de Medio Oriente que Uruguay tiene habilitados sanitariamente para la carne ovina. En muchos de esos nichos, los operadores de mercado ya mantienen contactos comerciales y hacen negocios.

Pero más allá de los mercados de Medio Oriente que Uruguay ya tiene habilitados y operativos, como Arabia Saudita, Argelia o Jordania, entre otros, hay un mercado más cercano que paga mejores precios y que precisa volumen: Brasil.

Es por eso que el grupo de brokers uruguayos pretende explotar las ventajas comparativas y llegar a las góndolas de San Pablo y otras ciudades con carne ovina de alta calidad envasada al vacío.

El mercado interno brasileño y las importaciones de carne ovina insumen alrededor de 13.300 toneladas (según datos del Ministerio de Agricultura de Brasil) mostrando un crecimiento significativo a lo largo de los últimos años y la carne ovina uruguaya compone cerca del 54,4% del producto consumido en las grandes capitales y centros poblados.

Tras la aftosa del 2001, la producción ovina uruguaya retomó el crecimiento a partir del 2005, con un promedio de 120.000 toneladas peso vivo, que equivale a 53,4 toneladas peso carcasa. El gran desafío que hoy tiene este rubro es capturar más nichos para los cortes con hueso y en Brasil el ingreso de ese tipo de productos está permitido.

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