La secretaria de Estado estadounidense Hillary Rodham Clinton arribó el lunes a Buenos Aires para entrevistarse con la presidenta Cristina Fernández, poco después de ofrecer su colaboración en la disputa entre Argentina y Gran Bretaña por la soberanía de las Islas Malvinas.

Clinton arribó procedente de Montevideo, donde asistió a la asunción del presidente electo uruguayo José Mujica, al inicio de una gira por América latina en la que también hará una breve parada en Chile luego del devastador terremoto del sábado.

La funcionaria dijo en Montevideo que argentinos y británicos deberían arreglar sus diferencias sobre la soberanía de las islas Malvinas, que el país sudamericano reclama desde hace 167 años y que Estados Unidos podría colaborar para que eso suceda.

"Nuestra posición es que ésta es una cuestión que se debe resolver entre el Reino Unido y Argentina. Si podemos ayudar de cualquier manera para facilitar esa tarea, estamos listos para hacerlo", dijo Clinton.

La visita de Clinton a Buenos Aires no estaba prevista en la gira, ya que en un principio se había anunciado que se reuniría con Fernández en la capital uruguaya. El canciller argentino Jorge Taiana dijo el lunes a radio Diez que fueron funcionarios de Estados Unidos los que se comunicaron con sus pares argentinos para transmitirles "el interés de ellos de hacer un encuentro más largo en Buenos Aires".

La gira por cinco países se enfocaba en el terremoto en Chile, aunque Clinton está interesada en generar apoyo internacional para nuevas sanciones contra Irán por su programa nuclear.

La funcionaria visitará Santiago brevemente la mañana del martes. En Uruguay, dijo que Estados Unidos está listo para proveer asistencia humanitaria y que ella misma entregaría equipos de comunicación que las autoridades chilenas habían solicitado.

"Una de las razones por las que me pidieron que siguiera mi viaje (hacia Chile) es para determinar qué otras cosas podrían necesitar y comenzar de inmediato el proceso de proveerlas", dijo.

El Departamento de Estado pidió a los estadounidenses que eviten viajes a Chile si no son absolutamente necesarios.

Antes de dejar Uruguay, Clinton esperaba lograr el compromiso de Mujica de continuar aportando militares a las misiones de paz de Naciones Unidas, de las que los efectivos uruguayos suelen participar en todo el mundo.

Funcionarios estadounidenses dijeron que Clinton no tenía planes de reunirse con los presidentes invitados a la asunción de Mujica, entre quienes estaban el venezolano Hugo Chávez, el ecuatoriano Rafael Correa y el boliviano Evo Morales.

Pese a ello, la agencia oficial de noticias de Ecuador, Andes, dijo el lunes que "no se descarta que el jefe de Estado ecuatoriano, quien es además presidente pro témpore de la Unasur, pueda mantener un breve encuentro" con Clinton, sin dar detalles sobre la hora ni el lugar de la posible reunión.

El martes, luego de Santiago, Clinton partirá a Brasilia para dialogar con el presidente Luiz Inacio Lula da Silva, de quien Estados Unidos espera apoyo a una nueva ronda de sanciones del Consejo de Seguridad de l

El jueves, en Costa Rica, Clinton asistirá a una reunión de cancilleres de la región que buscará mejorar las condiciones económicas del hemisferio occidental. Allí se encontrará con el saliente presidente Oscar Arias, quien medió en un acuerdo para resolver la crisis política hondureña el año pasado.

También se reunirá con la presidenta electa costarricense Laura Chinchilla, para luego culminar su gira en Guatemala el viernes.

Allí, se verá con un grupo de líderes centroamericanos, incluido el presidente hondureño Porfirio Lobo, quien asumió a fines de enero en reemplazo del gobierno interino que derrocó a Manuel Zelaya en un golpe de estado en junio pasado.