RAÚL MERNIES
Al regreso de su visita por Chile y Bolivia, el presidente José Mujica afirmó que la reconstrucción del país trasandino generará una corriente económica millonaria que la industria uruguaya debería aprovechar.
"Es probable que Chile puede vivir ahora un proceso para el que habría que inventar un término: `keynesianismo sísmico` podría ser", afirmó el presidente luego de volver a asumir el cargo que había usufructuado Danilo Astori la última semana.
"Eso va a elevar rápidamente la marcha de la economía chilena. Están dispuestos a pagar un costo importante porque se proponen reconstruir el país en cuatro o cinco años y reconocen que las fuerzas internas que tienen no les alcanzan. Eso quiere decir que se va a desarrollar una corriente comercial interesante y quiero llamar la atención a las industrias de la madera y de la madera calificada de Uruguay", expresó.
"No es que Chile no tenga. Por el contrario, tiene mucho de eso, pero la magnitud de la demanda está muy por encima de lo que tiene. Ese fenómeno económico que va generar la reconstrucción impondrá una corriente económica importante y en alguna medida algunos intereses económicos de Uruguay podrían colaborar", afirmó Mujica en la conferencia de prensa que brindó en la sala VIP de la Base Aérea, apenas descendió del Hércules que lo trajo de regreso a "tierra firme".
Lucía Topolansky y Astori esperaron más de una hora la llegada del mandatario (estaba prevista para las 15.30 y el avión que lo trajo de Buenos Aires tocó tierra a las 16.26). Al bajar, Mujica saludó a su esposa y se dirigió directamente hacia la mesa en la que lo esperaba el micrófono. Sin más vueltas el escribano público leyó el acta que le devolvió el ejercicio de la presidencia a "Pepe", firmaron y Mujica comenzó a dar el mensaje para el que había convocado a los medios.
"Hemos tenido un conjunto de contactos en Chile y en Bolivia que revisten cierta importancia hacia al futuro".
Con los temas bien estructurados y en carácter de reporte de lo que había hecho en sus visitas diplomáticas agregó: "Las cancillerías de Bolivia y Uruguay quedaron comprometidas para hacer gestiones rápidas ante el gobierno argentino para que Bolivia le puede vender gas directamente a Uruguay".
Mujica había hablado de la importancia del gas en los medios extranjeros (ver nota aparte) y a su llegada a Uruguay explicó que "hay dos maneras" de que el gas boliviano llegue a tierra uruguaya: "Hay dos caminos para hacer viable la llegada del gas boliviano, pero la que tiene más viabilidad para concretarse en el corto plazo es utilizar la red de gas que tiene Argentina".
Para esto, el gobierno deberá hacer gestiones con Argentina, que actualmente cobra un alto arancel por venderle a Uruguay el gas que le compra a Bolivia.
En este sentido el presidente resaltó: "De lograrse sería muy positivo para el costo energético que tiene el Uruguay".
AFTOSA. En otro orden, Mujica resaltó la importancia de erradicar la aftosa del continente y aseguró que para esto "quedaron planteados futuros encuentros en Bolivia de personal técnico. Nos comprometimos a monitorear la región", expresó, agregando que Uruguay puede jugar un rol fundamental en esta misión regional.
Para el presidente la presencia de focos de aftosa en Bolivia "es una amenaza constante que perjudica a todo el Mercosur" y aseguró que erradicarla sería "jugar en otra categoría, vender a otros precios y en otros mercados", aseguró.
"Ante esa amenaza presente el Uruguay no tiene otra opción que seguir vacunando y seguir vacunando, y seguir vacunando... Esta lección ya la aprendimos dolorosamente", agregó.
Finalmente puntualizó que "Uruguay puede aportar tecnología y tiene gente capaz de conducir un operativo de erradicación de la aftosa" para eliminarla de América Latina.
TEMBLORES. En sus días en Chile, adonde acudió para presenciar el cambio de mando, Mujica fue testigo de uno de los numerosos sismos que sacudió la ciudad.
Sobre este punto contó: "No me pregunten si me asusté o no. Lo que les puedo decir es que nunca vi a tanto presidente que le movieran el piso".
Mientras Mujica contaba esto, Astori le explicaba que habían circulado imágenes de varios presidentes mirando hacia arriba en el momento del temblor. Mujica agregó: "Se dividieron en dos categorías: los que miraban para arriba y los que mirábamos para la puerta".
José Mujica
El siguiente es un extracto de la entrevista que el diario "Los Tiempos de Cochabamba" realizó a José Mujica.
"Es urgente el acceso al gas"
-Usted y el presidente Evo (Morales) firmaron una "Declaración Conjunta" (venta de gas a Uruguay, uso de puertos uruguayos, impulso al mecanismo de integración Urupabol y otros) ¿Cuál de los temas tocados considera de mayor urgencia?
-Lo más urgente es tener acceso al gas boliviano. Esto significa la participación de Argentina en esta política. Que Argentina deje pasar gas y nos facture según los precios bolivianos. Ese gas malo que tenemos que pagar actualmente por el uso de un peaje del sistema de cañería ya está atrasado. Esa sería la vía más corta que a nosotros nos podría aliviar el costo de energía.
-¿Y qué le ofrece Uruguay a Bolivia?
-Nosotros le hemos ofrecido a Bolivia la salida al Atlántico. Yo no me quiero vestir con un mérito ajeno. En Uruguay prácticamente existe consenso, porque un gobierno de otro signo ya le dio a Bolivia en la década del 90 una franja en el puerto Nueva Palmira y está allí el galpón que no se usa y que está a la orden. Eso pertenece al gobierno boliviano, para que tenga un puerto a partir del cual embarcar sus productos.
- ¿Qué piensa del presidente Evo Morales?
- Ustedes tienen un fenómeno. Evo tiene un prestigio que corre y trasciende por la Cordillera de Los Andes. Primera vez que los indígenas de Bolivia y Latinoamérica se sienten representados. Si existe, que Dios ilumine a Evo.
-¿Cómo está el Mercosur?
-Está trancado. El mejor síntoma es este: el día en que el resto de los latinoamericanos discutan si se entra de cabeza al Mercosur, es porque anda bien; pero si nadie quiere entrar es porque anda mal. Nos falta liderazgo.
- ¿Y qué pasa con el ALBA y el ALCA?
- Son intentos de lo mismo. Sólo intentos de acercarse.
-¿Firmaría un Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos?
-Nosotros tenemos un tratado (se refiere al Tifa, firmado por Tabaré Vázquez) que nos da cierto margen. Los países ideales para hacer tratados son Corea y Japón.
- Usted ha vivido etapas fuertes políticamente hablando. Ahora sus sentimientos parecen diferentes. ¿Qué pasó con ese hombre que antes era tan radical?
-Los hombres son prisioneros de su época y de su tiempo. Pero hay cosas que no cambian, como mi enorme preocupación por la justicia social, para que haya sentido básico de que los que vayan quedando tengan las mismas oportunidades que los otros. Si antes pensábamos que íbamos a tocar el cielo con las manos y que al llegar al gobierno el proceso de tendencia igualitaria y justa con la gente se consolidaría, los hechos fueron demostrando que no, que no teníamos que acudir a métodos que envenenaban la propia sociedad.
-Usted dijo que va a continuar viviendo en su chacra. ¿Cómo va a combinar con su rol de presidente?
-Es que mi chacra está a 12 kilómetros de la Plaza de la Independencia. No tengo problemas.
-¿Cómo se las arregla con su equipo de seguridad para ir a su chacra?
-Son unos locos de mierda. Unos antipáticos.
Al final, si alguien quiere atentar contra cualquier persona, lo hace y ya.