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EDUARDO BARRENECHE

El Ministerio del Interior planifica cerrar a corto plazo las cárceles de Rocha y Lavalleja, por tratarse de edificios vetustos y antiguos. Aplicará un plan de regionalización de penales. También edificará cárceles con empresas privadas.

La futura clausura de ambos penales se enmarca en una reingeniería del sistema tras el anuncio del ministro del Interior, Eduardo Bonomi realizado el jueves 14 sobre que el país vivía un estado de "emergencia carcelaria".

"La situación es cada vez peor. Las cárceles están pensadas para 5.000 reclusos y alojan a 9.000", dijo Bonomi durante el acto de inauguración del centro "El Molino", destinado a reclusas con hijos pequeños.

Tras una visita de los centros carcelarios del país, los asesores de Bonomi en materia penitenciaria concluyeron que los centros que padecen una mayor emergencia son los de Rocha y Lavalleja.

La cárcel rochense se ubica en el centro de la ciudad y aloja a unos 180 reclusos. Fue inaugurada en 1897.

Desde esa fecha no se le ha hecho reformas estructurales, diagnosticó el comisionado parlamentario Álvaro Garcé. Se trata de la cárcel con mayor hacinamiento del país: 300%, agregó.

La asesora del Ministerio del Interior en temas carcelarios, Gabriela Fulco coincidió con Garcé sobre que esta cárcel tiene condiciones de reclusión "infrahumanas" y que se trataba de un establecimiento "vetusto".

Indicó que, como en el Ministerio del Interior hay un proyecto de regionalización de las cárceles y una de las ideas es cerrar la cárcel de Rocha. "Eso debe hacerse en un lapso no muy largo de tiempo", explicó Fulco.

En este momento, se realiza obras de ampliación de la cárcel de Las Rosas (Maldonado). Cuando estas se terminen, habrán allí 250 plazas más.

Fulco señaló que ello permitirá "solucionar" el actual hacinamiento de Maldonado y, eventualmente, el de Rocha. "Ahí tendríamos una regionalización de la zona Oeste", dijo.

La cárcel de Lavalleja también fue construida en el siglo XIX. Fue inaugurada en 1878 en el centro de la ciudad y aloja a unos 175 internos.

Para el Ministerio del Interior ese establecimiento también alberga presos en condiciones infrahumanas. "Constituye una vergüenza nacional tener este tipo de cárcel. La única solución es su cierre inmediato y la relocalización de los internos", dijo Fulco.

A iniciativa de la Jefatura de Lavalleja, ya se realizan obras de ampliación en la chacra policial de Campanero -ubicada a cinco kilómetros de Minas- para alojar a los presos de la cárcel departamental.

Con respecto a la regionalización de las cárceles, Fulco dijo que este plan ya está definido aunque advirtió que falta ajustar algunos detalles. "Hay cárceles que tienen poco volumen de internos y no justifican el gasto en funcionarios, comida, salud e infraestructura. El sentido común dice que hay que juntarlas con otros lugares y luego fortalecer esos centros de reclusión", dijo.

HORMIGÓN. El lunes 19, una delegación del Ministerio del Interior visitó una cárcel levantada por la empresa argentina Astori en la ciudad de Córdoba, Argentina, que fue construida con las técnicas de hormigón premoldeado.

El ministro Bonomi planea construir, en un plazo de un año, dos cárceles de máxima seguridad. Para ello cuenta con unos US$ 12 millones generados por ahorros en la Dirección Nacional de Impresiones y Publicaciones Oficiales (IMPO) en la administración anterior.

La firma cordobesa utiliza una tecnología desarrollada por la empresa brasileña BOC Constructora, la misma que edificó la papelera Botnia, según la página web de la fábrica norteña.

Se trata de un sistema de paneles, vigas y pilares que se arman en el sitio y posteriormente se montan en el terreno elegido. El sistema de paneles tienen incorporados marcos, aberturas y los sistemas de electricidad y sanitaria. Este tipo de cárceles, pensada para unos 1.000 reclusos, puede ser de media o de alta seguridad. También se le puede incorporar tecnología como cámaras de video y diversos mecanismos automáticos de seguridad.

Según Fulco, en estos días el Ministerio del Interior recibirá documentación de la empresa argentina sobre los costos de construcción de un establecimiento bajo el sistema de hormigón premoldeado.

La empresa señaló a las autoridades de la cartera que las ventajas de este sistema de construcción son dos: la reducción del tiempo de construcción y la adaptación de los moldes a cualquier diseño.

A los sistemas constructivos, se le agrega tecnología como cámaras de video y controles de puertas y portones por control remoto, dijo Fulco.

Además, este tipo de construcciones permite una caminería para que el personal y las visiten circulen en forma segura.

Este tipo de proyectos es "llave en mano". Es decir, se entregan las celdas con las camas y la sanitaria. Y los sistemas eléctricos no quedan al alcance de los reclusos. Este tipo de construcciones también permite la inclusión de talleres para los presos.

Además del sistema de la cárcel de Córdoba, los asesores de Bonomi estudian propuestas de los modelos inglés, norteamericano, chileno y mexicano.

El martes 20, el oficialismo presentó un proyecto de ley en la Comisión Especial para la Emergencia Carcelaria del Parlamento que autoriza al gobierno disponer de US$ 12 millones antes de que se vote el presupuesto. Esos recursos serán destinados a la construcción de nuevas cárceles, que se efectuarán sin un llamado a licitación. Estas obras se harán "a través de modalidades de contrataciones extraordinarias que resulten más adecuadas a la situación de urgencia y habilitando la asignación especial de recursos del Estado a tales fines edificación de cárceles), los que serán regularizados en la próxima instancia presupuestal", dice el proyecto. La iniciativa, que fue redactada por el diputado Jorge Orrico (Asamblea Uruguay) y la asesora del Ministerio del Interior, Silvia Izquierdo, también habilita al gobierno a disponer el alojamiento provisional de presos en unidades militares.