Tokio | El impopular primer ministro japonés, Yasuo Fukuda, informó ayer que renunciará a su cargo a menos de un año de haberlo tomado, llevando a la segunda economía más importante del mundo a la confusión política.
En una conferencia de prensa, Fukuda afirmó que renunciaba para evitar un "vacío político`` en tanto que el atribulado gobierno se acerca a una sesión parlamentaria especial para este mes.
El primer ministro de 72 años hizo este anuncio a días de develar 18.000 millones de dólares en efectivo para reforzar a la economía debilitada. En Japón la inflación ha alcanzado su punto más alto en 11 años, castigando el gasto del consumidor.
Fukuda ha sufrido de niveles de apoyo crónicamente bajos al presidir un parlamento dividido entre el partido en el poder y la oposición.
La renuncia de Fukuda extiende la racha de inestabilidad política que Japón ha experimentado en años recientes. Su predecesor, Shinzo Abe, también tuvo un año en el cargo y renunció en el 2007 por razones de salud. AP