"Ahí está apareciendo el bit, es la emoción más grande que se pueda sentir", exclamó uno de los 33 mineros atrapados en la mina San José al romper hoy la perforadora T130 en el taller, aledaño al refugio donde se encuentran desde el cinco de agosto.
Mientras se ve el registro de 1,57 minutos de la perforación que ellos mismos hicieron, uno de ellos expresa: "Son las 10.35 de la mañana. Estamos extremadamente muy emocionados con lo que se ha hecho hoy día. Queremos que el mundo sepa de que no estamos solos, estamos los gobiernos con nuestros trabajadores con nuestros compañeros sacrificando sus días, sus horas, sus momentos que pueden estar disfrutando con sus familias".
"Que sepa todo Chile, todo el mundo y nuestra familias que estamos super contentos por lo que hoy día una vez más se ha logrado. Gracias señor gobierno, gracias señor empresarios, gracias queridos compañeros que se han sacado la ´cresta´ trabajando por nosotros", se escucha en la grabación donde aparecen los mineros y el bit de la T-130.
"Nosotros aquí, compadres, estamos super emocionados por todo lo que se ha logrado y por eso le agradecemos compañeros, tenemos toda la esperanza de que nos encontremos con nuestras familias", a lo que siguió un fuerte grito:"ceacheí, chi-chi-chi, le-le-le…"
HÉROES. El fundador de la unidad de rescate de la Pompa Italia y actual superintendente de bomberos de Copiapó, Enrique Bordoli, consideró que los 33 mineros que llevan 44 días atrapados en la mina San José deberían ser "los héroes del bicentenario".
"Hace 50 años que soy industrial minero. He estado a 450 metros de profundidad y, a pesar de ser jefe de los bomberos, de haber estado en muchos rescates, en muchos incendios en los que he visto a morir a muchas personas, el hecho de que esos mineros estén vivos, me emociona porque así como les ocurrió a ellos me pudo haber ocurrido a mí", expresó en diálogo con ANSA.
"Yo les saco el sombrero, los mineros somos especiales. Yo he trabajado en minas de plata, de fierro, oro y uno lucha contra la naturaleza porque tú te estás jugando un albur, no sabes si efectivamente la veta va a estar ahí cuando llegues a donde pretender llegar", afirmó este nieto de italianos de Como que llegaron a Copiapó atraídos por la riqueza del mineral de plata de Chañarcillo, a fines del siglo XIX.
Se define como un "cateador", "una raza en extinción porque ahora la tecnología detecta un yacimiento incluso a profundidades. Pero los mineros antiguos vamos a catear, a buscar una veta, un filón que nos dé una riqueza".
Respecto del accidente en la mina San José, de propiedad de la compañía San Esteban, respondió que "habemos mineros y gente con plata que viene a trabajar minas. Los Kemeny (dueños de San Esteban) nunca fueron mineros".