El clima actual de conflictividad laboral fue el tema central de la audición del presidente José Mujica.
Durante la misma, el mandatario afirmó que es natural que en épocas de Presupuesto haya conflictos porque "hay que reconocerle a la gente que lucha por lo que considera suyo", pero agregó que cuando se presentó la ley el gobierno anunció que era el más generoso que existió en la historia del país y que lo único que se podía hacer es redistribuir los rubros, pero no agregar.
Mujica destacó que la posición de su gobierno es siempre negociar pero con límites. "Hay muchos consejos de salarios que están en discusión y se nos reprocha porque no los cortamos antes. Consideramos que es mucho mejor que las partes acuerden porque es garantía de menos conflictos para mañana, y es una mejora de las relaciones laborales", afirmó.
De todas maneras, aceptó que con la conflictividad actual no se logra "más que pérdidas".
"Este clima de conflicto afecta el trabajo, afecta el clima de viabilidad del país, afecta el clima de inversión. Le estamos haciendo mal a esa imagen que hemos logrado construir entre todos de un país serio, previsible y viable. No estamos favoreciendo al país y corremos el riesgo de contribuir a obturar un formidable proceso de crecimiento que puede ser una de las antesalas del desarrollo", resaltó.
En respuesta a las críticas de la oposición y fustigando la cobertura de los medios de prensa, el presidente afirmó que no saben "en el fondo de estas concepciones está el confundir el gobernar con mandar. El país no es un cuartel, no es una estancia. Es una sociedad democrática llena de intereses contradictorios, de gente que se equivoca, y hay que empezar por respetar a todos pero el primero tiene que ser el gobierno. Y tiene que decidir, pero convenciendo, y sino logra convencer a todos, tiene que convencer y persuadir a la mayoría. Tiene que agotar a todos los recursos posibles y no caer en el camino fácil del desplante de poder", afirmó.
PRESUPUESTO Y COFE. Con respecto a la Ley de Presupuesto que se vota estos días en el Senado, Mujica dijo que "fue la primera vez en los presupuestos del Uruguay que se dijo de entrada toda la realidad total. Contra viento y marea hemos aguantado toda la presión. Se nos acusó de machetes y por otro lado de gastadores. Nos hemos mantenido con firmeza, incluso con discrepancias internas soportándolas a veces hasta más de lo racional".
Al referirse al conflicto con COFE por el decreto que establece como mínimo las 6 horas de trabajo, el mandatario expresó que "las resistencias al cambio son enormes en este país y no queremos que se nos vayan los 5 años y estemos anunciando que hay que cambiar el Estado y no podemos hacer nada".
"Es un contrasentido que los trabajadores públicos no le trabajen al país ni siquiera 6 horas. Tenemos que ser más equitativos en nuestra sociedad. Tenemos que acordarnos de los miles e orientales que no pueden manifestar su penuria y las injusticias", prosiguió y reiteró que el gobierno se mantendrá "en ese rumbo, a pesar de todos los reclamos, porque creemos que es justo. Pero no lo hacemos para ofender a nadie, tampoco planteamos desplantes. Que nadie nos pida que salgamos a reprimir inútilmente a la gente, porque ese no es nuestro modelo".
PIQUETES. El presidente realizó además un llamado a no realizar manifestaciones como las sufridas por Uruguay con el piquete de Arroyo Verde, destacando el daño que ese corte de ruta le causó al país.
"El derecho de manifestar hacia el costado en el paso de la gente es inobjetable. No hay derecho a cortarle el paso porque Uruguay ha tenido una dolorosa experiencia en la materia y sería enormemente contradictorio con nosotros mismos", dijo, y finalizó realizando un llamado al "consenso nacional para no incurrir en esta herramienta".