FEDERICO CASTILLO
Solo 40 segundos le bastaron a Luis Alberto Lacalle para anunciar su renuncia al directorio del Partido Nacional y a su candidatura en las internas. La Convención aprobó ayer documentos que deberán plasmar los "compañeros más jóvenes", dijo.
Toda la expectativa que había ayer en la Convención del Partido Nacional en el Platense Patín Club estaba centrada en el último orador de la tarde, el senador y expresidente Luis Alberto Lacalle, que sin embargo habló muy poco y se fue rápido.
"Se pensaban que iba a hacer un discurso", le comentó a su esposa Julia Pou, al subirse al auto en el que abandonó la Convención tras anunciar, en menos de un minuto, dos hechos significativos para los blancos. Primero dijo que no se iba a presentar a las elecciones internas buscando la candidatura presidencial en el año 2014. Y después anunció su renuncia a la presidencia del Directorio del Partido Nacional.
Lacalle, que el 13 de julio cumplirá 70 años, ocupó ese cargo en dos ocasiones, la primera de ellas entre 1999 y 2004 y la segunda desde agosto de 2009 hasta ahora.
El lunes 13 el nuevo presidente del Directorio será el senador Luis Alberto Heber.
Con un pañuelo blanco al cuello, Lacalle estuvo presente durante casi toda la jornada de trabajo de la Convención y escuchó la discusión de las comisiones que elaboraron documentos e informes con propuestas sobre diversos temas.
"Todas estas reformas, su realización y su concreción, tienen que estar en manos de los compañeros más jóvenes que van a darle su final y las van a ver plasmadas en la realidad", dijo Lacalle cuando le tocó el turno de hablar.
Fuentes allegadas al expresidente señalaron a El País que su intención no era transformar la jornada de ayer en una "nota necrológica". Por eso lo escueto de sus palabras, que culminaron tratando que lo de ayer tampoco sonara a despedida.
"Esto no quiere decir que yo deje las tareas partidarias. Por el contrario, las voy a hacer desde el Senado y desde las filas del Partido Nacional. Muchas gracias", remató y se fue raudo del Platense mientras todavía resonaban los aplausos de los convencionales, algunos de ellos asombrados por lo corto del mensaje más esperado de la tarde.
sin retorno. Al salir no quiso hacer declaraciones. Consultado luego por El País, Lacalle descartó que se haya retirado enojado, sino que simplemente dijo lo que tenía para decir. Y agregó que esta vez la decisión de no volver a postularse está tomada y es "sin retorno".
Antes que el expresidente anunciara oficialmente que dejaba al presidencia del Directorio, se presentó una moción con más de 100 firmas para evitarlo. Tampoco eso movió la voluntad del senador.
Unidad. "Dicen por ahí que nuestro presidente del directorio hoy renunciaría", dijo el senador y líder de Alianza Nacional, Jorge Larrañaga, que habló minutos antes que Lacalle.
"Seguramente le corresponde a él expresarlo, pero a mí me corresponde la tarea de decirle que más allá de las ulterioridades, más allá de los sí y de los no, más allá de los cruces, de las diferencias, de las confrontaciones electorales -más allá de los más allá-, decirle: gracias compañero Lacalle por lo que hizo y por lo que genera y dejará para el Partido Nacional", agregó su ex compañero de fórmula en las elecciones de 2009.
Larrañaga, y muchos de los diputados y senadores que hablaron ayer, priorizaron marcar la "unidad" del Partido Nacional por sobre todas las cosas y en contraposición al Frente Amplio.
"Este partido tiene unidad por encima de la diversidad y de la discrepancia", enfatizó el líder de Alianza Nacional.
Admitió que en la agrupación "todos hemos tenido diferencias con todos" y también reconoció los "enfrentamientos" con Lacalle, para lo cual usó una figura particular. "Podemos ser como dos especies de piedras que cuando chocan saltan las lascas. Pero el partido sabe que siempre que nos precisó nos tuvo y nos tiene para construir el presente y el futuro", subrayó.
Lacalle saludó afectuosamente a Larrañaga cuando éste terminó su discurso, que estuvo plagado de críticas al gobierno y dejó un mensaje de "esperanza" para ganar las próximas elecciones de 2014.
Juego abierto. Las distintas figuras políticas del Partido Nacional están convencidas que la decisión de Lacalle de no presentarse a las elecciones internas, es en esta oportunidad algo contundente, indeclinable.
"No va a hacer lo mismo dos veces", agregaron fuentes de su entorno en relación a las internas pasadas, cuando sorprendió a todos con su candidatura luego de haberse bajado dos años antes, en mayo de 2007. En esa oportunidad se había expresado mediante una carta a sus compañeros del Herrerismo.
Con estas certezas, entonces, se abre ahora el juego en la interna del Partido Nacional. En eso coincide la mayoría de los dirigentes blancos, que además ven como positiva la hora del recambio. Tanto desde filas de la UNA como de Alianza Nacional son varias las voces que destacan el carácter "dinamizador" que le da al partido el paso dado por Lacalle.
"Tienen que aparecer los candidatos. Va a mover el partido, y eso repercute positivamente. Rompe el status vigente y abre posibilidades. Veremos luego quién está a la altura, pero ahora todo UNA queda sin candidato, y esto abre el juego y genera oportunidades", comentó a El País una fuente de Alianza Nacional.
También hay quienes prevén que esto ocasione "rebotes" a favor de la propia Alianza Nacional, dirigentes que liberados de los compromisos con Laca-lle puedan sumarse a la propuesta de Larrañaga. Otros consideran que la falta de contrapeso obligará al líder de Alianza Nacional a adoptar una nueva estrategia, un perfil que logre conquistar a lacallistas poco convencidos.
Luis Alberto Heber, Juan Chiruchi y Ana Lía Piñeyrúa, son nombres que ya empezaron a sonar para tomar la posta que deja Lacalle.
Fuentes de UNA dijeron que se van a tener que crear candidaturas que puedan "reemplazar la fortaleza del liderazgo de Lacalle", y destacaron la "actitud generosa" del expresidente hacia su sector, "generando los espacios para las nuevas generaciones".
No son pocos quienes hablan de que es tiempo que su hijo, el diputado Luis Lacalle Pou, adquiera más protagonismo, y que este paso al costado es un primer síntoma de esto. Otras fuentes, más vinculadas con el entorno de Lacalle, descartaron que este sea el momento del actual presidente de la Cámara de Diputados. "Sería un tremendo error", señalaron los informantes bajo el argumento de que le restaría antes cumplir un período como senador y luego lanzar su candidatura en 2019.
Directorio. Tras la renuncia de Lacalle a la presidencia del Directorio del Partido Nacional, asumirá inmediatamente en su lugar el actual senador y ex intendente de San José, Juan Chiruchi. Esto no significa que pase a presidir el colegiado. El nombramiento del nuevo presidente se resolverá en una votación de los miembros del cuerpo, pero ya está definido que será Luis Alberto Heber.
En una entrevista con El País el 12 de diciembre de 2010, Lacalle reflexionó sobre su triple rol como senador, presidente del Directorio y líder de la UNA, una posición que definió como "difícil". "Tengo la responsabilidad de ser muy prudente a la hora de marcar una posición, porque el propio partido tiene más de una. Yo quiero que este período mío como presidente del Directorio cuando termine encuentre un partido más adecuado a los tiempos modernos y mejor posicionado para las próximas convocatorias electorales", dijo en su momento.