Un automovilista chino fue condenado a cadena perpetua por haber evadido durante ocho meses el pago de un peaje, lo que derivó en una cuenta astronómica, de medio millón de dólares.
La historia de Shi Jianfeng, publicada hoy por el Beijing News, es poco clara porque, entre otras cosas, los 550 mil dólares que supuestamente debería pagar es una cifra desmesurada para las tarifas de peajes en el país.
Se trata de la primera vez que por una infracción de este tipo se condena a cadena perpetua y a una multa de esta envergadura.
La noticia causó sorpresa y generó un debate entre los lectores de diarios que comentan on line las noticias.
El juez del caso convocó a una conferencia de prensa en la que explicará las razones de la condena.
El magistrado acusó al hombre también porque supuestamente compró en el mercado ilegal dos tarjetas militares falsas, que lo absolvían de pagar el peaje.
Durante el juicio el conductor se declaró culpable y no fue asistido por ningún abogado. (ANSA)