Dos asambleas ambientalistas de Buenos Aires ya afirmaron que alertarán a la población sobre los problemas que traerá la construcción de la nueva planta de celulosa de Montes del Plata, según informó ayer El Espectador.
La asamblea Delta y Río de la Plata y la Asociación del Medio Ambiente Bonaerense (Asambo) realizarán charlas con los vecinos para comunicarles los perjuicios que traerá la nueva planta que se instalará frente a Buenos Aires.
Uno de los integrantes de la asamblea Delta y Río de la Plata, Esteban Maitenú, afirmó a El Espectador que no descartan medidas en caso de que los gobiernos no escuchen sus advertencias. "Nos vamos a reunir pero sabemos que las conquistas y avances se logran cuando salimos a la calle. Lo tenemos claro. Nos cuesta pero la movilización es la clave para frenar esto, que nos enfrenta a intereses poderosísimos", afirmó.
El 7 de enero, el canciller Luis Almagro se reunió en Buenos Aires con su par Héctor Timerman para presentar el proyecto de inversión de la papelera Montes del Plata.
Tras la reunión, el canciller argentino afirmó que "no hubo reparos" al proyecto. Timerman agregó que Argentina "no tiene que dar la autorización" para el nuevo emprendimiento, y afirmó que "serán respetados el tratado del Río de la Plata y su frente marítimo".
La nueva planta estará emplazada en el mismo lugar que se iba a levantar el complejo de la empresa española ENCE, al que Argentina ya le había dado el visto bueno en 2006. Timerman dijo que "hay muchas diferencias" entre los proyectos de Montes del Plata y Botnia.
Almagro afirmó que Uruguay brindará información a Argentina sobre la construcción de la planta.
Tras introducir cambios en el plan inicial presentado por Montes del Plata, el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (Mvotma) de Uruguay otorgó el 4 de enero la autorización ambiental para la instalación de la segunda pastera.
El ministerio introdujo algunas modificaciones técnicas; por ejemplo, estableció que la madera llegará a la planta sin la corteza, por lo que se producirán menos desechos, y que se modificará la cantidad de chimeneas en la planta.