La maniobra no se ha cuantificado, pero podría ser multimillonaria. Lo que se investiga como una megaestafa comenzó con la denuncia de decenas de damnificados que detectaron ayer retiros ilegales de sus cuentas. No obstante, según confirmaron ayer fuentes policiales a El País, hasta ahora el Departamento de Delitos Económicos sólo recibió cuatro denuncias.
Debido a las similitudes de modus operandi la Policía estima que se trata de una organización brasileña de estafadores. El mes pasado investigadores de la unidad especializada de la Dirección de Investigaciones lograron atrapar a dos ciudadanos de esta nacionalidad que fueron enviados a prisión.
El primer rastro de la maniobra se detectó, según versiones conocidas ayer, en un cajero de Redbrou ubicado en Carrasco. Sin embargo, la misma maniobra se constató luego en varios cajeros de Banred, concretamente los ubicados en Rivera y Soca, Benito Blanco y Bulevar España, y Avenida Italia y Bolivia. En todos los casos se afectaron depósitos tanto en moneda nacional como extranjera, en cuentas que fueron literalmente vaciadas.
"Hemos recibido muchas denuncias, pero no puedo precisar cuántas, nosotros tenemos que hacer el análisis caso a caso y todavía estamos trabajando y procesando información", reconoció por su parte Edgardo Cortaza, gerente general de la red Banred de cajeros.
La Policía cree que se utilizaron dispositivos para "robar" PIN de los usuarios.