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MARCELA DOBAL

Los egresos del gobierno central sumaron unos US$ 8.810 millones en 2010, lo que representa un aumento interanual de 6,6% en términos reales. El 38% fue a pagos de seguridad social y el 21% a salarios. Solo 8% fue destinado a inversiones.

El gobierno central, que comprende a ministerios, Presidencia y los organismos del artículo 220 de la Constitución, tuvo egresos por $ 176.653 millones (según datos preliminares), que al dólar promedio de 2010 supuso un desembolso de unos US$ 8.810 millones. Si se excluye lo destinado al pago de intereses de la deuda, el monto desciende a cerca de US$ 7.853 millones.

Eso supuso un incremento de 6,6% real en los egresos que es mayor al que se había registrado en 2009, cuando fue de 5,4%. La estructura fue similar a la de 2009 y cada concepto tuvo un peso similar en el total de egresos. Un dato no menor es que las partidas estuvieron determinadas por la ley de presupuesto aprobada por el gobierno de Tabaré Vázquez.

El alza interanual de 2010 se explicó en buena medida por los incrementos de dinero destinados a previsión social (pago de jubilaciones, pensiones, etc.), transferencias y gastos, de acuerdo al boletín de información financiera de la Contaduría General de la Nación.

En el caso de la seguridad social, los egresos aumentaron 8,7% a valores constantes y sumaron unos US$ 3.309 millones, de los que el 83% se destinó al Banco de Previsión Social, mientras que el resto se repartió entre policiales (6%) y militares (11%).

En cuanto al aumento real de 25,3% en las transferencias, que en 2010 sumaron US$ 656 millones, se destaca que el 86% fue para "otros organismos" y solo el 11% para entes públicos. En este concepto está incluido el aporte de UTE al Fondo de Estabilización energética en diciembre por unos US$ 150 millones (aunque al estar contabilizado también en los ingresos no incide en el resultado).

En tanto, el incremento del rubro "gastos" fue de 8,3% interanual en términos reales hasta totalizar cerca de US$ 1.388 millones, de los que el 79% correspondieron a la administración central.

Esos tres conceptos de egreso representan el 61% del total de egresos en 2010. Aunque con menor peso en la expansión total de los egresos, también se registraron aumentos en otros rubros. Es el caso del pago de remuneraciones, que sumó unos US$ 1.831 millones, lo que en términos reales supuso un aumento de 2,5% frente a 2009 y representó 21% del egreso en 2010. La administración central y los organismos docentes representaron 60% y 36% del gasto, respectivamente.

Por otra parte, las inversiones aumentaron 12% a valores constantes y sumaron aproximadamente US$ 668 millones. La distribución fue bastante pareja. El 29% correspondió al Ministerio de Transporte y Obras Públicas, otro 27% al Ministerio de Vivienda y un 23% se destinó a una categoría residual titulada "resto". Otro 16% se destinó a organismos docentes y un 6% a Presidencia.

El único concepto de egreso que disminuyó fue el pago de intereses de deuda pública, que fue 7,5% inferior al año anterior en términos reales y totalizó US$ 957 millones.

El aumento que tuvieron los gastos en 2010 fue superado por el incremento que tuvieron los ingresos. Aun así, las cuentas del gobierno central cerraron en rojo en 2010, con un déficit global acumulado a diciembre del año pasado de $ 9.370 millones, según los datos preliminares de la CGN en términos corrientes. Expresado en dólares, el monto sería de US$ 467 millones. De todos modos, la mejora en los ingresos permitió que ese déficit se redujera, ya que en 2009 fue de $ 10.481 millones. De los 12 meses del año, hubo ocho en los que se registró un saldo negativo. Solo en enero, abril, agosto y noviembre los ingresos superaron los egresos.

ENTRADA. El año pasado, los ingresos al gobierno central sumaron $ 167.284 millones, lo que al dólar promedio de 2010 equivale a unos US$ 8.343 millones. Esto significó un crecimiento interanual de 8,2% en términos reales.

Lo que explicó en mayor medida ese incremento fue el aumento en la recaudación de la Dirección General Impositiva (DGI), cuya contribución al gobierno central es de 82%. Su aporte fue cercano a los US$ 6.848 millones. Ese capítulo presentó un aumento de 6,4% real.

"El crecimiento de la recaudación total se basa en resultados positivos de los principales impuestos administrados, tanto los impuestos al consumo (IVA e Imesi) como los principales impuestos a la renta (IRAE; IRPF e IASS) mostraron crecimientos significativos", dice el informe. El Impuesto al Valor Agregado, el tributo con mayor peso, aumentó la recaudación 4,8% a valores constantes y el que le sigue en importancia, el Impuesto a la Renta de las Actividades Económicas, exhibió un alza de 10,5% real.

El incremento de la recaudación de DGI permitió compensar el escaso aporte de otros capítulos de ingresos. Los recursos de libre disponibilidad aumentaron 9,8% y mantuvieron su participación de 6% en el total de fondos que percibe el gobierno central. El comercio exterior, que representa el 5% del total, aumentó 12,8% frente a 2009. Los aportes de las empresas públicas (4% del total de ingresos) fueron el único capítulo que registró un descenso el año pasado. La baja fue de 2,2% en términos reales. En tanto, la venta de energía no registró variaciones en los ingresos que vertió al gobierno central.

Por su parte, los ingresos que se reportan por Loterías registraron una suba de 10,3% real en 2010, aunque su participación siguió siendo nula.