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FEDERICO CASTILLO

El hipermercado Géant fue ocupado ayer por los trabajadores de supermercados que están en conflicto hace días por mejoras salariales. En la noche desocuparon, pero definen más acciones en otros centros comerciales para los próximos días.

En la medianoche del viernes, los trabajadores agrupados en Fuecys (Federación de Empleados de Comercios y Servicios) resolvieron ocupar el hipermercado Géant, en Avenida Giannattasio, y así se mantuvo durante toda la jornada de ayer.

Se trancó el ingreso de los clientes y de los proveedores. Sólo pudieron ingresar los funcionarios que quisieran hacerlo para realizar tareas de mantenimiento y el personal que trabaja en las oficinas de la Dirección Nacional de Identificación Civil (donde se expide la cédula de identidad).

La medida fue llevada adelante por unos 800 trabajadores, muchos de ellos empleados de otros supermercados, por lo cual varios comercios de otras partes del país también se vieron afectados. Ismael Fuentes, presidente de Fuecys, señaló que había funcionarios del Macro Mercado de Punta de Rieles, y de supermercados Piriápolis, Maldonado y La Paloma.

Según el sindicato, el hipermercado Géant fue elegido para la movilización como forma de repudiar "la represión y persecución sindicales que esta empresas realizan a sus trabajadores". Sobre la noche una asamblea resolvería cómo continúa el conflicto. El dirigente de Fuecys, Flavio Rivero, adelantó a El País que la ocupación del Géant se desactivaba -hoy funcionará normalmente- pero que seguramente se discuta alguna nueva acción en otros supermercados. Incluso no descartaron la posibilidad de ocupar algunos de los shopping center de la capital.

Negociación. Mañana y el martes, el sindicato participará en nuevas reuniones con las empresas en el Consejo de Salarios, por eso los trabajadores buscan otra vez impactar con nuevas medidas de presión. La semana pasada lo hicieron ocupando locales del supermercado Ta-Ta.

En concreto, lo que el gremio reclama para los trabajadores de los supermercados es un salario mínimo de $ 9.600 retroactivo al 1° de enero.

Según Rivero, la última fórmula manejada por los empleadores incluye el sueldo pretendido por el gremio ($ 9.600) pero a pagar a partir de julio. Sin retroactividad. Además ofrecen complementarlo con el pago de $ 1.000 por presentismo. La contrapropuesta del gremio es fijar el presentismo en $ 600 y que el resto pase al salario. Eso se negociará en el Consejo de Salarios.

Para los dirigentes sindicales la reivindicación salarial no es nada desubicada y por eso, dicen, tienen el "apoyo del público". Rivero señaló que lejos de molestarse, muchos clientes que llegaron hasta el Géant y se encontraron que estaba trancado el ingreso, les brindaron apoyo y los saludaron.

"Es un poco reflejo del salario que estamos planteando, tampoco estamos pidiendo $ 25 mil", argumentó.

SuperHéroes. Algo que sí ya está definido por el gremio Fuecys es que el lunes realizará un paro general que afectará a las tiendas y afines.

Ese día también se concentrarán en la puerta de el Ministerio de Trabajo desde las diez de la mañana.

Y como una forma novedosa y atractiva de protesta, los sindicatos de tiendas están convocando a sus afiliados a que concurran a la movilización con máscaras de superhéroes.

La consigna de los funcionarios es que "para vivir con estos sueldos, hay que ser un super- héroe".

La semana que viene se pueden definir varios de los conflictos que en los últimos días han afectado a diferentes sectores comerciales. Es que los conflictos sindicales se están extendiendo a sectores clave de la economía, ante la falta de acuerdo entre trabajadores y empresarios en los Consejos de Salarios. El viernes, por ejemplo, la actividad portuaria estuvo paralizada durante seis horas. Esto se sumó al paro de los trabajadores de los molinos de arroz, y también a los problemas reportados en el abastecimiento de garrafas de supergás al interior del país. La actividad portuaria estuvo afectada el viernes por un paro nacional entre las 10 y las 16 horas en reclamo de mejoras salariales. En el marco del paro, los manifestantes se concentraron en la Administración Nacional de Puertos (ANP) y marcharon hacia el Parlamento, pasando además por el Ministerio de Trabajo (MTSS). No hubo acuerdo en las negociaciones con los empresarios, lo que activó esta primera medida del sindicato. En tanto, el otro foco de conflicto está puesto en el sector arrocero. Los trabajadores de los molinos están de paro desde hace varios días. Esto derivó en la paralización de la cosecha en varios puntos. Empresarios y trabajadores coinciden en que la negociación está estancada razón por la cual el MTSS presentará la próxima semana una fórmula salarial para que puedan votarla.