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RAÚL MERNIES

El nuevo proyecto de ley del FA para despenalizar el autocultivo de marihuana no termina de satisfacer a todos los involucrados. Colorados e independientes lo apoyan, y Luis Lacalle Pou se queja de que su propuesta no fue tenida en cuenta.

La propuesta elaborada por el MPP, el Partido Socialista y el Nuevo Espacio, que también cuenta con el apoyo del diputado colorado Fernando Amado y de Daniel Radío, del Partido Independiente, es considerada "un buen primer paso", por las agrupaciones pro-legalización de la marihuana, aunque no termina de satisfacerlos.

"Es un primer paso importante. Estamos de acuerdo con que hay una necesidad de solucionar un vacío legal. Pero también creemos que el tema no puede agotarse acá", dijo a El País Martín Collazo, de Prolegal, una organización que trabaja para el cambio en la normativa sobre drogas en Uruguay. Collazo agregó que "toda aquella persona que no desea plantar en su casa tiene derecho a comprar en el mercado legal, como se compra hoy alcohol o tabaco". En ese sentido, dijo, "es necesario trabajar en procura de la legalización de la producción y la comercialización" de la marihuana.

El proyecto de ley autoriza, como máximo, el autocultivo de ocho plantas de cannabis por hogar, y establece en 25 gramos la cantidad destinada al consumo personal (ver aparte).

Collazo afirmó que "ocho plantas es más que suficiente, incluso para los que más consumen".

A pesar de las diferencias con el proyecto del FA, la organización Prolegal no pondrá objeciones ni se manifestará en contra porque "hay una cantidad de gente que hoy planta en sus casas, y corre el riesgo de ser penada por eso, que va a ver solucionada su situación", indicó Collazo.

Ante la inminente aprobación de este proyecto de ley, el próximo martes 26 por la bancada del FA y posteriormente en el Parlamento, el diputado nacionalista Luis Lacalle Pou, quien puso el tema de la legalización de la marihuana en la agenda pública, no escondió su molestia. "Estuve hablando con diputados del FA y me dijeron que no tuvieron en cuenta mi proyecto porque jamás van a votar un proyecto de ley firmado por Luis Lacalle Pou. Cosa que me parece bastante penosa para la democracia uruguaya", dijo el legislador blanco.

Consultado sobre su opinión respecto del proyecto del FA, él respondió: "No sé de que proyecto hablan. Yo lo pedí varias veces y nunca me lo dieron. El único proyecto de ley que hay hasta ahora es el que presenté yo el 13 de noviembre del año 2010 a las 11.30 de la mañana".

Estrictamente sobre la propuesta oficialista, expresó que le parece "algo muy conservador porque habla de cantidades y no de actitudes o actividades". A su entender, lo importante es la actitud de comercializar, más allá de las cantidades.

"Esto no soluciona nada. Si se transforma en ley, la gente que está presa seguiría presa. Uno tenía como 17 plantas y el otro más de ocho", afirmó.

En enero pasado dos personas fueron procesadas por cultivo de marihuana. Alicia Castilla, una mujer de 62 años conocida como la "señora cannabis", tenía 15 plantas. Un artesano de 39 años también fue a prisión; cultivaba cuatro plantas en su propio domicilio.

Sobre el proyecto de Lacalle Pou, Collazo (de Prolegal) opinó: "Nos pareció muy bueno lo que él hizo al meter el tema en la agenda, pero su proyecto tiene algunos problemas, como que aumenta las penas sin diferenciar a los grandes traficantes de los que venden una planta".

El diputado Fernando Amado, del Partido Colorado, se definió como "un defensor" del proyecto del FA, y agregó que además se siente "responsable directo", ya que participó de la comisión multisectorial que afinó la propuesta.

"Me siento parte porque lo trabajamos en conjunto con el FA y también con Daniel Radío, del Partido Independiente. Nos reunimos y fuimos ajustando cosas. Todos propusimos modificaciones que en su mayoría fueron tenidas en cuenta", dijo el representante del sector colorado Vamos Uruguay.

"Una de las cosas que yo propuse y que fue incluida en el proyecto es el seguimiento. Por eso se formó una comisión para evaluar si la realidad se ajusta a lo que pensamos cuando hicimos la ley", explicó.

Amado se refirió directamente a Lacalle Pou y expresó que "él fue invitado a trabajar en esa comisión para la elaboración del proyecto de ley pero se abrió por un tema de derechos de autor. Fue intransigente, exigía que se trabajara sobre su proyecto, por haber sido el primero en poner el tema sobre la mesa y llevarse los créditos. Los demás entendimos que era bueno trabajar en un proyecto más general, que nos contemplara a todos".

El diputado colorado agregó: "La verdad que a mí poco me importa quiénes firman los proyectos, lo que me importa es que salgan las cosas que uno cree que son buenas", y soltó: "el que se autoexcluyó fue él", en referencia a Lacalle Pou.

Fuentes cercanas al diputado nacionalista expresaron a El País que en esa reunión, en la que hubo "falta de honestidad intelectual", se le propuso a Lacalle Pou que retirara su proyecto de ley y se uniera al que elaboraría el Frente Amplio.

El nuevo proyecto de ley establece que quedan prohibidos la plantación, el cultivo, la cosecha y la comercialización de cualquier planta de la que puedan extraerse estupefacientes, pero con las siguientes excepciones: cuando se realicen con fines de investigación científica, para la industrialización y el comercio de plantas de cannabis de uso no psicotrópico, pero con previa autorización del MGAP y bajo su control directo.

Tampoco estará prohibida la plantación, el cultivo y la cosecha domésticos de plantas de cannabis destinadas para consumo personal o compartido en el hogar. Se entiende que es para consumo personal o compartido en el hogar la plantación, el cultivo y la cosecha domésticos de hasta ocho plantas. Además, la marihuana resultante de este autocultivo no deberá estar prensada.

Además se establece que el que, sin autorización legal, "produjere de cualquier manera las materias primas o las sustancias capaces de producir dependencia psíquica o física (...) será castigado con pena de veinte meses de prisión a diez años de penitenciaría".

El que sin autorización legal importe, exporte, introduzca en tránsito, distribuya, transporte, tenga en su poder, almacene, posea u "ofreciere en venta o negociare de cualquier modo" alguna de estas sustancias, será castigado con la misma pena.

Quedará exento de responsabilidad el que tenga una cantidad destinada a su consumo personal, la cual fue establecida con un tope de hasta 25 gramos de marihuana.

El proyecto también crea en el ámbito del Ministerio de Salud Pública, una Comisión que en 18 meses, a partir de la vigencia de la ley, deberá presentar un informe evaluando la aplicación de la misma, así como todos aquellos cambios que considere pertinentes en la normativa que rige esta temática.