Un funcionario del INAU fue enviado ayer a prisión por cometer una rapiña contra una panadería de La Teja utilizando un arma de fuego robada. Trató de huir en una moto pero se le descompuso el motor a 50 metros del comercio asaltado.
El hecho vuelve a poner en cuestión a trabajadores del organismo público responsable de los menores, en momentos en que la Justicia investiga la denuncia contra un funcionario por haber facilitado la fuga de tres internos -"Ricky" entre ellos-, además de eventuales fallas de procedimiento que permitieron el rescate del "Talibán" cuando era trasladado en un vehículo del INAU.
La evasión del "Ricky", el "Prandon" y otro menor, el 13 de abril pasado, fue la primera que se produjo en el Centro de Medidas Cautelares, que acababa de ser inaugurado. Una investigación administrativa concluyó que un coordinador de turno de ese centro había entregado a los menores, a cambio de 400 dólares, una lima para que cortaran los barrotes para huir al exterior.
Un mes después, el 13 de mayo, una segunda fuga de varios internos se produjo en ese establecimiento de reclusión de menores. La Justicia investiga actualmente la posible complicidad desde el interior en esa evasión.
Según fuentes policiales, el funcionario que asaltó la panadería no cumple tareas en los hogares de infractores sino que trabaja en un centro de amparo situado sobre la avenida Luis Alberto de Herrera. Era adicto a la pasta base.
A las 9.05 de la víspera, el trabajador encañonó a una empleada de la confitería y reclamó el dinero.
En momento en que salía del comercio, situado en las calles Benito Riquet y Carlos María Ramírez, se cruzó con otra empleada.
"¡Ladrón, ladrón!", gritó la mujer.
El funcionario echó a correr. En ese momento por el lugar pasó un móvil de Radio Patrulla. La empleada que salió a la calle alertó que se había cometido un atraco en el lugar.
El rapiñero fue atrapado con el dinero de la recaudación. Fue derivado a la Brigada de Asaltos y la Policía Técnica constató que el arma de fuego, de calibre 22, era robada.
Anoche, el juez Penal Luis Charles decidió el procesamiento con prisión del funcionario del INAU por un delito de rapiña y un delito de receptación, porque se probó que el arma de fuego era robada.