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COLONIA | PEDRO R. CLAVIJO

El caso de las licencias truchas sigue sumando detenidos e indagados. Ayer declararon seis funcionarios municipales, dos quedaron detenidos y uno fue emplazado. Llegaban a cobrar hasta $ 7.000 por una licencia. Hay jerarcas bajo sospecha.

Ayer declararon seis personas ante la jueza letrada de Colonia, Beatriz Larrieu, que ya procesó a cinco personas por el delito continuado de cohecho simple. Desde el viernes pasado en que se iniciaron las actuaciones en la sede ya fueron detenidas 13 personas, la mayoría de ellas funcionarios municipales de la Dirección de Tránsito de Colonia. Dos gestores que operaban en Montevideo, piezas clave del entramado de corrupción, son parte de los cinco procesados.

Entre los indagados que interrogó ayer la magistrada se encontraba el médico que certificaba la "aptitud" de quienes compraban licencias. El profesional, indicaron fuentes de la investigación, si bien recuperó la libertad no se descarta que sea citado nuevamente a la luz de las pruebas que continúan llegando a la sede judicial.

En la órbita policial la investigación está en manos del Departamento de Automotores de Montevideo, con apoyo de la Sección de Delitos Informáticos del Departamento de Delitos Complejos de la Dirección de Investigaciones capitalina. Los investigadores de ciberdelitos analizan varias computadoras, notebooks y pendrive incautados en las oficinas de la Dirección de Tránsito coloniense, de donde siguen la pista a numerosas transacciones ilegales.

De todos modos, según indicaron las fuentes consultadas, la jueza ya dispone de una gran cantidad de pruebas contundentes, incluidas intercepciones telefónicas y filmaciones realizadas por agentes que seguían los pasos de los integrantes de la red delictiva.

El caso, que se inició con una denuncia formulada por el propio intendente Walter Zimmer ante la Jefatura de Policía de Montevideo para evitar "filtraciones", tendrá derivaciones mayores, aseguraron fuentes consultadas. De hecho, el cúmulo de indicios apunta hacia jerarquías de la comuna coloniense y a personas residentes en Montevideo que utilizaron estos procedimientos para hacerse con una licencia.

LA OPERATIVA. Ayer se conocieron los autos de procesamiento de las cinco personas hasta ahora procesadas.

Una pieza aparte la forma el procesamiento del gestor de 50 años L.A.B., que se comprobó que desde diciembre pasado acudía periódicamente a la comuna coloniense para cerrar transacciones ilegales.

"El indagado aseguraba a dichas personas (personas residentes en la ciudad de Montevideo) la obtención de licencia de conducir en forma más rápida y sencilla que en la capital. A tal efecto, los interesados debían abonar a L.A.B. la suma de $ 7.000, de los cuales éste entregaba $ 2.000 a los funcionarios municipales involucrados en la maniobra", indica el fallo judicial en sus considerandos. Añade que el gestor obtenía por este medio una ganancia de $ 1.500 por "cliente". El dinero restante se redistribuía entre el pago a la oficina, el arrendamiento de un vehículo para el viaje a Colonia y el combustible utilizado en el viaje.

El fallo agrega que el gestor se encargaba de contactar a los funcionarios municipales, así como al médico "quien realizaba los controles médicos correspondientes a los interesados", y que también recibía su parte del pago.

Este era el esquema básico que operaba desde hacía posiblemente más de un año. Cabe recordar que el propio intendente Zimmer reconoció sus sospechas de que estas actuaciones vinieran ocurriendo desde el año 2008.

En relación al proceder de los funcionarios municipales, dos inspectores de la Dirección de Tránsito, procesados el fallo expresa: "Desde hace por lo menos ocho meses, ambos funcionarios han recibido pagos de dinero a cambio de la expedición de dichas licencias de parte de personas residentes en la ciudad de Montevideo". En este caso se menciona al otro gestor que terminó procesado, M.A.L. de 53 años, quien se probó que pagaba entre $ 2.000 y $ 3.000 a los funcionarios para que expidieran el documento. Todo ello fue registrado por la Policía. (Producción: Renzo Rossello)

La última operación se hizo el viernes 10 de junio, ya bajo la vigilancia policial. El gestor M.A.L. fue a Colonia con tres interesados en obtener licencias. Uno de ellos, un hombre de 36 años, declaró que había prometido "el pago de dinero por la obtención de dicho documento". La Justicia resolvió dejar en libertad a este último.