Velero narco fue comprado en Punta

Narcotráfico. La embarcación a bordo de la que incautaron 444 kilos de cocaína fue comprada por US$ 145.000 en Punta del Este Toda la Policía y Prefectura busca a dos españoles en Uruguay

Compartir esta noticia
 20110620 602x480

M. GALLARDO / R. ROSSELLO

Prefectura Naval, Policía Antidrogas, Interpol y Migración siguen la pista en Uruguay de dos narcos españoles que abandonaron un velero con 444 kilos de cocaína en Puerto Madero. El barco fue comprado en Punta del Este por los españoles.

Uno de los dos españoles ahora prófugos compró el velero de bandera estadounidense por US$ 145.000 a la viuda de su antiguo propietario. Ello, señalaron fuentes de la investigación en Uruguay, ha dado la pauta de que lo que se presume es una poderosa red de narcotraficantes venía operando desde hacía algunos meses en ambas márgenes del Plata.

De momento no hay rastros de los tripulantes prófugos. El alerta mantiene movilizados a agentes de la Policía Antidrogas, de la División Investigaciones y Narcotráfico (Divin) de la Prefectura Nacional Naval; de la Dirección Nacional de Migración y de Interpol.

Los investigadores navales rastrean los movimientos de las embarcaciones deportivas en Punta del Este y Piriápolis, en tanto que los agentes antidrogas y de Interpol buscan a los traficantes en todo el territorio nacional.

El velero "Traful" ahora detenido en Puerto Maderos, Buenos Aires, había tocado el puerto puntaesteño por primera vez en 2003. Lo trajo su antiguo propietario, un empresario uruguayo que lo compró en Estados Unidos y lo trajo al país al amparo de las normas aduaneras que habilitan a residentes a ingresar con otro pabellón, siempre y cuando arriben navegando a costas uruguayas.

Se trata de una embarcación de 13 metros de eslora (longitud) que en más de una ocasión había sido derivado a Piriápolis, para aprovechar el diferencial de costos de amarra respecto del puerto puntaesteño.

Según pudo establecer El País el "Traful" fue vendido por la viuda de su último propietario, que lo había adquirió para hacerse a la mar en los últimos meses de su vida. La transacción, indicaron las fuentes consultadas, fue hecha directamente por uno de los dos españoles que ahora son buscados, e intervino un escribano de la zona. De acuerdo con estas fuentes el comprador lo adquirió por US$ 145.000 y al cabo de algunas semanas el buque fue aprovisionado de víveres, combustible y otros enseres poco antes de que su patrón pidiera autorización para zarpar rumbo al puerto de La Plata, lo que ocurrió el pasado 2 de junio.

El velero arribó el 3 de junio a puerto y luego volvió a zarpar con destino a Piriápolis, según informaron sus tripulantes a la autoridad marítima argentina.

Una emergencia obligó a los tripulantes, dos españoles de 40 y 51 años respectivamente, a emitir un pedido de auxilio cuando navegaban hacia la localidad de Olivos, al Norte de la capital porteña.

Un fallo eléctrico dejó sin motor a la embarcación, por lo que un guardacostas argentino debió salir en su ayuda.

El "Traful" fue remolcado desde allí hasta el Yacht Club de Puerto Madero. Pero apenas pisaron tierra los españoles dijeron que iban "a comprar unos repuestos". Nunca más los volvieron a ver. En los compartimentos del velero los efectivos navales hallaron los 444 kilos de cocaína.

CONJETURAS. El matutino La Nación de Buenos Aires, en base a información manejada por las autoridades argentinas, establece la posibilidad de que el cargamento perteneciera al poderoso Cartel del Norte del Valle, de Colombia. Un indicio de ello son los envoltorios de colores con que se acondicionó la droga.

"No es tanto el envoltorio, como las marcas que llevan, incluso la Policía colombiana tiene un catálogo de marcas con las que se identifican los narcotraficantes", explicaron a El País fuentes de la Policía Antidrogas. Esas marcas no son otra cosa que la "trazabilidad" de los embarques, guías que utilizan los traficantes para seguir un alijo por todo el mundo.

Los investigadores hallan diversas semejanzas con la modalidad empleada por la mafia serbia y desarticulada en la Operación Guerrero de los Balcanes, que permitió incautar más de dos toneladas de cocaína en un yate que amarró en Santiago Vázquez.

"Creemos que, igual que lo que iba a pasar con el Maui (el yate de los serbios), la entrega se iba a hacer en altamar, porque con un velero como ese no podrían haber recorrido grandes distancias", apuntaron los informantes.

Al igual que en este caso, el cargamento del Maui estaba envuelto en papel de colores y en aquel entonces la información del operativo internacional coordinado con la DEA estadounidense había permitido confirmar que, efectivamente, provenía del poderoso cartel colombiano.

Las cuatro agencias policiales uruguayas están en alerta, particularmente en los pasos de frontera ante la eventualidad de que intentaran continuar su huida.

Casi una tonelada en salta

Apenas 48 horas después de la captura del cargamento a bordo del velero "Traful", la Gendarmería argentina incautó más del doble de cocaína en un alijo que llevaban dos jóvenes gendarmes en una camioneta. Esto ocurrió el domingo en una ruta de la provincia de Salta, próximo a la localidad de Aguaray. El vehículo en el que viajaban los dos gendarmes provenía desde la frontera con Bolivia, desde donde se cree que procedía la droga, y llevaba 980 kilos de cocaína. "Los gendarmes detenidos son dos jóvenes de 25 años, con un rango muy inferior, quienes han sido pasados a disponibilidad de inmediato para luego ser dados de baja en forma urgente", declaró ayer la ministra de Seguridad, Nilda Garré, que se congratuló de la actitud de Gendarmería.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar