Tras algunos avances en la investigación de los detalles del ataque de marinos uruguayos a un joven haitiano en la ciudad de Port Salut, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ordenaría la liberación de los acusados.
Cuando esto ocurra, los efectivos serán inmediatamente enviados a Montevideo, donde el Ministerio de Defensa Nacional y la Armada Nacional están investigando el caso por su lado.
Por más que Naciones Unidas abrió un expediente sobre el caso, quedó claro que los militares deben enfrentar la causa en su país de origen, según explicó el ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, en el Parlamento la semana pasada.
Precisamente hoy, el ministro concurrirá a reunirse con la comisión de Defensa del Senado para continuar explicando el alcance de la investigación y hacer un relato de los hechos lo más preciso posible de acuerdo con los datos recogidos hasta el momento.
La semana pasada, el ministro indicó que la denuncia se había radicado en la justicia militar y luego se haría lo propio con la justicia civil, por lo cual los acusados deberán enfrentar diversas instancias simultáneas de investigación y proceso por su acción.
Cuando Fernández Huidobro se reunió con la comisión de Defensa de Diputados, presentó el resultado de tres investigaciones preliminares hechas por la ONU, por el Ministerio y por la Armada. Las tres concluyen no hay indicios de que el joven haya sido sometido a un abuso sexual aunque también las tres coinciden en que se trata de un hecho gravísimo, que contraviene diversas normas de la ONU sobre las misiones de paz y la relación de los soldados con la población local, y que el hecho debe ser investigado a fondo y los responsables castigados por las leyes vigentes.
Además, Defensa está indagando otra denuncia sobre participación de efectivos en casos de prostitución infantil y en el consumo de marihuana en presencia de menores.