PILAR BESADA
La directora del Liceo Bauzá cerrará el centro educativo el mediodía del lunes si no recibe una respuesta al problema de inseguridad. Según las autoridades de Secundaria, el Ministerio del Interior no responde a los pedidos para vigilar el liceo.
Reunidos en sala docente, los profesores del Bauzá consideraron ayer "insostenible" la situación de inseguridad en el centro educativo, según manifestaron en un comunicado. "Yo reafirmo que es insostenible y que el plazo que se le ha dado al Consejo está agotado", señaló la directora del liceo, Graciela Bianchi. Si al mediodía del lunes no recibe respuestas de las autoridades, Bianchi cerrará el liceo al que acuden 3.000 estudiantes y 400 docentes.
En abril, el sindicato docente había firmado un acuerdo con el Consejo de Secundaria y el Codicen donde se estableció la presencia de un policía en servicio 222 en la entrada del liceo. Sin embargo, el policía acudió una semana y luego dejó de asistir.
Bianchi indicó que "permanentemente" puso al tanto de las diferentes situaciones al consejero de Secundaria, Daniel Guasco, representante de los docentes. "La contestación que nos daba es que no tenía respuesta del Ministerio del Interior", indicó Bianchi. Según la directora, el miércoles pasado, cuando se dio una situación "complicada" de inseguridad, la contestación de Guasco fue que llamó al Ministerio del Interior "pero no pasó de la secretaría".
El profesor de Física del liceo Bauzá, Enrique Viera, comentó que "todos los días aparece una situación nueva vinculada con la violencia, y violencia en su más alta expresión, ya sea un robo, una agresión, alcoholismo o drogas".
Según el docente, al no haber control en la entrada, "ingresan personas que no son del liceo, entonces hay grupos que fuman o toman vino en los jardines del liceo". También señaló que hubo robos de celulares adentro del centro educativo.
Esta semana, dos estudiantes iniciaron una pelea dentro del liceo, "enfrentados por Peñarol y Nacional", según el docente, y fuera del centro se comenzó a congregar un grupo de jóvenes que esperaba a los alumnos para continuar la pelea. "Ellos se comunican por celular y empieza a aparecer gente desconocida, sobre quienes nosotros no podíamos tener ningún control más que cerrar la reja", contó el docente.
Según Viera, este tipo de situaciones "bastante complejas" son comunes, y "el plantel docente no está capacitado para desarmar a un alumno".
En el comunicado que emitieron los profesores ayer, señalan que "no existen mínimas condiciones de seguridad en los ambientes del entorno liceal, en una zona especialmente vulnerable (...), donde corre riesgo la integridad física de todos los integrantes de la comunidad educativa".
Afirman en tanto que "la situación se ha vuelto insostenible" y que exigen "la respuesta inmediata de las autoridades pertinentes, manteniendo el estado de alerta para tomar las medidas que el cuerpo docente decida oportunamente".
Bianchi señaló que cuando dirigió el Bauzá entre 1994 y 2005 había cuatro policías cumpliendo tareas de vigilancia las 24 horas del día de lunes a lunes. "Necesitamos alguien que esté de forma permanente, que se incorpore a la comunidad educativa", indicó Bianchi, y recordó que uno de los policías trabajó 11 años en el liceo.
"Tengo la responsabilidad de una comunidad enorme y no puedo ser policía", comentó Bianchi. "Hasta el mediodía del lunes puedo hacerme cargo, pero en la tarde el ambiente se pone muy pesado y no estoy dispuesta a seguir tolerando esta situación", remarcó.
Evitan los liceos
A partir del recorte de horas de los policías en servicio 222, y de la mayor remuneración que reciben en lugares como los bancos, cada vez menos efectivos policiales eligen los liceos para hacer vigilancia. Según un jerarca, "muchas veces hay roces" entre los policías y los alumnos y docentes. Ante esta situación "a veces el policía reacciona de forma inconveniente", dijo.