"Operación Blanca" empezó con una denuncia anónima en 2010. Desde entonces el caso era investigado por agentes de la Dirección General de Crimen Organizado e Interpol. Ayer, por fin, los cuatro principales involucrados pudieron ser detenidos y derivados a la jueza especializada en Crimen Organizado, Graciela Gatti.

Fuentes de la investigación señalaron a El País que en la cima de esta red de proxenetas se encontraba un relacionista público residente en Montevideo, pero con una amplia agenda de contactos en Punta del Este, donde tenía su ámbito de acción en temporada.

El relacionista, junto a otro hombre y dos mujeres que forman por ahora la lista de detenidos, reclutaba a hermosas jóvenes a las que ofrecía colocación como modelos. Sin embargo, en poco tiempo las jóvenes eran presionadas para salir con empresarios locales y extranjeros. Los clientes podían seleccionar jóvenes a través de fotografías. Este método se utilizaba tanto para los clientes en la península, como en Montevideo donde la organización operaba en la zona de Buceo, en los alrededores del Shopping.

En Punta del Este los clientes pagaban unos US$ 1.000 por salir con una chica, en tanto que en Montevideo la "tarifa" oscilaba entre los US$ 300 y los US$ 400. La mitad del dinero se la quedaban los proxenetas y la otra la recibía la joven en pago.

Los agentes del Departamento de Vigilancia de la Dirección de Crimen Organizado -una agencia policial recientemente creada con jurisdicción nacional y similar a la Policía Antidrogas- comenzaron a seguir los pasos de los principales involucrados y a reunir inteligencia sobre sus actividades.

De hecho, ayer cuando los investigadores detuvieron al primer involucrado lo hicieron en Montevideo y en el momento en que captaba a una chica a la que ofrecía la posibilidad de modelar. Otro equipo de agentes, en tanto siguió a una de las chicas hasta un hotel de alta rotatividad y lo detuvo junto a un cliente.

Las fuentes consultadas señalaron que, además de las cuatro personas directamente vinculadas a la red, los agentes de Crimen Organizado llevaron a la magistrada especializada a siete chicas que fueron indagadas en calidad de testigos o víctimas de esta organización. Entre las indagadas se halla una ex Miss Uruguay y una ex reina de la vendimia reclutadas con la promesa de modelar.