El gobierno y el Frente Amplio reconocen que hay "fallas" en la gestión para solucionar los problemas edilicios de los centros educativos. La oposición convocó al ministro Ricardo Ehrlich a comisión general.
El vicepresidente Danilo Astori fue el primero en referirse a los "problemas de gestión" dentro de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP). Según dijo, las dificultades no están asociadas a "los corporativismos", sino que tienen que ver con "la actuación humana".
En la entrevista que concedió a radio Sarandí, el vicepresidente agregó que las dificultades edilicias son "una enorme consecuencia en lo que refiere a toda una estructura burocrática basada en un derecho público muy pesado que jugó en contra".
El ministro de Educación, Ricardo Ehrlich, dijo a El País que lo que Astori calificó como "errores humanos de gestión" se pueden corresponder a "fallas" en las prioridades edilicias.
"Yo diría que son fallas lo que hay, porque esto uno podría haberlo visto con mucha anticipación y de pronto no lo vio. Lo que pasa es que estamos en un período de cambio y aquellos liceos que hace unos años tenían problemas que eran tolerables, hoy aparecen como situaciones de emergencia donde es inadmisible que no se pueda resolver", explicó.
En tanto, ayer el Senado aprobó a pedido del líder de Vamos Uruguay, Pedro Bordaberry, la convocatoria a sala (en régimen de comisión general) del ministro Ehrlich.
Bordaberry dijo que pedirá explicaciones sobre "las ineptitudes y omisiones humanas" que incidieron sobre la falta de respuestas de la administración en materia edilicia. "Pediremos que informe si las investigó y si va a sustituir a los responsables de ellas o va a avalar tanta ineptocracia", sostuvo.
En ese sentido, recordó que el llamado a sala fue apoyado por las bancadas del Partido Nacional y el Frente Amplio, y que para la convocatoria se contó con el voto de Astori, en su calidad de presidente de la Cámara Alta.
GESTIÓN. A partir de las declaraciones de Astori, los sectores que integran la coalición de izquierda reconocieron las deficiencias en la gestión. Sin embargo negaron la existencia de una crisis edilicia.
El diputado José Carlos Mahía (Asamblea Uruguay) coincidió plenamente con Astori y consideró que "no se puede responsabilizar a los actores de la educación, que son los que padecen los déficit de gestión".
Por su parte, el diputado Aníbal Pereyra (MPP) dijo a El País que "siempre van a haber problemas de gestión en un tema como la educación". Sin embargo, agregó que las dificultades son producto de las nuevas exigencias que se plantean de parte de los docentes y la población en general.
"Los reclamos aparecen con mayor fuerza de forma pública y queda la sensación como que estamos en crisis y yo creo que estamos muy lejos de eso. Estamos en una dinámica donde se exigen otros tipos de acciones, pero acá lo que subió fue el techo de las demandas", opinó Pereyra.
El diputado empepista añadió que en el año 2005 habían "decenas y decenas de liceos con problemas cien veces peores que estos". Según dijo, lo mismo sucedió en gobiernos previos al Frente Amplio.
En tanto, el diputado Roque Arregui (Partido Socialista) indicó que la principal causa del deterioro edilicio actual, es la escasa inversión de infraestructura que se hizo durante los gobiernos blancos y colorados.
Más allá de eso, Arregui reconoció demoras en la ejecución de obras debidas a diferencias con la Corporación Nacional para el Desarrollo. "Ahora se hacen todos los esfuerzos para reparar esto, pero errores siempre hay como en cualquier actividad humana".
El diputado socialista negó la posibilidad de una "crisis edilicia" y añadió que hay "necesidades acumuladas que se van solucionando".
MEDIDAS. Para agilizar la realización de 50 nuevas obras en liceos, Ehrlich anunció que se pedirá colaboración a varios ministerios y a las Fuerzas Armadas.
Por su parte, Astori también reconoció que estaba el dinero para las refacciones edilicias y que se sabía desde hace meses qué liceos tenían problemas pero no se evitó que se llegara fuera de fecha con las obras.
"Acepto que se me diga que ya se sabía que el derecho público debe ser agilizado y modernizado, pero acá llamar a licitación para reciclar, construir o refaccionar implica meses de trabajo, con una demora insoportable en cuanto a la llegada de resultados", enfatizó el vicepresidente.
Comentarios de Mujica y Astori hicieron tensar los ánimos de dirigentes radicales
El vicepresidente Danilo Astori ya había salido a manifestar su posición con respecto al atraso en el inicio de cursos. El 27 de marzo en declaraciones a Subrayado, Astori se sumó a los dichos del presidente José Mujica: "si hay que dar clases debajo de un árbol, se da clase debajo de un árbol, pero clases tiene que haber".
Los comentarios del presidente y del vicepresidente, realizados en el momento de mayor virulencia del conflicto de la enseñanza, fueron como "nafta para la hoguera de los radicales", según admitió a El País un importante dirigente sindical de la enseñanza que forma parte de la corriente Articulación, la más afín a Astori.
Tres días después de los dichos de Astori los dirigentes radicales de ADES Montevideo encabezaron la ocupación del liceo 70 junto a los padres de los alumnos. En la noche lo que comenzó como un desalojo pacífico se transformó en el primer choque entre manifestantes y la Policía en lo que va del gobierno de Mujica. Hubo balazos de goma y varios detenidos.
Cuando se menciona la idea de dar clases bajo los árboles los docentes sindicalizados en ADES (Secundaria) o Ademu (Primaria) estallan. El lunes el consejero de Secundaria electo por los docentes, Daniel Guasco, intentó hacer un chiste cuando padres y docentes del liceo reclamaban, entre otras cosas, podar los árboles del patio del centro educativo. "Traten de no cortar todos los árboles, tal vez los necesiten para dar clases", dijo Guasco según profesores y padres de alumnos del liceo de Colón.
La frase la dijo frente a varios delegados del centro educativo que se presentaron sorpresivamente en la sede del Consejo de Secundaria (CES) para buscar una salida a sus reclamos. Esa noche no tuvieron suerte y debieron volver al barrio a anunciar que no había soluciones para los problemas de electricidad y falta de funcionarios. Ayer una arquitecta del CES se presentó en el liceo con una cuadrilla de electricistas. Hicieron algunas reparaciones. Para los padres el trabajo no fue suficiente y no enviarán a clases a sus hijos hasta que se terminen los arreglos.
El sábado se desarrollará la asamblea general de la Federación de Profesores (Fenapes). Allí se discutirá la posibilidad de ir a la huelga. Fuentes sindicales señalaron que habrá acuerdo para aplicar la medida tras las vacaciones de julio. En tanto, ADES Montevideo, la filial que se ha mostrado más combativa hasta el momento, reunirá su asamblea el martes 17. Ayer ADES dio a conocer el orden del día; allí figura como primer tema la evaluación del conflicto y la eventualidad de ir a la huelga en el sector.