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En el Museo Nacional de Artes Visuales se exhibe material producido por la Facultad de Arquitectura de la Udelar, con ejemplos de proyectos y edificios diseñados por el multifacético arquitecto Luis García Pardo.

La exposición y el catálogo correspondiente son parte del ciclo de exposiciones itinerantes, organizado para divulgar el acervo del Centro de Documentación e Información del Instituto de Historia de la Arquitectura (IHA) de la Facultad de Arquitectura, y rendir tributo a los creadores intelectuales y materiales del patrimonio arquitectónico moderno. El coordinador es Santiago Medero.

En el catálogo se caracteriza el quehacer de Luis García Pardo con las siguientes palabras: "Su arquitectura diáfana, noble, verdadera en las relaciones forma/estructura y que califica de modo singular el entorno urbano, resulta ejemplar en la arquitectura moderna uruguaya de mediados del siglo XX y alcanza repercusión internacional a través de destacadas publicaciones especializadas".

Luis García Pardo (1910-2006) estudió meteorología y astronomía a fines de los años 20, y en 1930 comenzó a estudiar arquitectura, carrera de la que se recibió en 1941. Luego fue docente en la cátedra de Acondicionamiento Físico de los Edificios y de Acústica Aplicada al Urbanismo y la Arquitectura. En los años 40 realizó viviendas individuales y construcciones para la Iglesia Católica. A fines de esa década recibió la influencia de la arquitectura moderna internacional, y comenzó a realizar una serie de edificios en Pocitos. Durante los años 60 realizó edificios en Punta del Este y desarrolló técnicas de construcción de viviendas económicas. En 1973 se radicó en Brasil, donde permaneció hasta 1983, y entre 1989 y 1991 vivió en Madrid.

En su primera etapa profesional García Pardo construyó una serie de viviendas unifamiliares por encargo, así como su vivienda particular (1944), ubicada en Mariano Uriarte y Divina Comedia en Carrasco. Las características de las construcciones, de tipo "chalet", fueron techos a dos o más aguas, y exteriores que alternaban revoque, ladrillo visto y piedra.

Durante la década de 1950 diseñó varios edificios en Pocitos, que por sus características modernistas, avanzadas para la época, se convertirían en construcciones emblemáticas del desarrollo urbanístico del Montevideo de la época. En 1953 proyectó el Edificio Gilpe, en Avenida Brasil 2568-74, con cerramientos vidriados de piso a techo, una por entonces novedosa carpintería de aluminio, y losa radiante eléctrica. Una interesante variación en la fachada fue la integración de grandes terrazas en cada piso.

Otras de sus principales construcciones en Pocitos estuvieron caracterizadas por esas fachadas continuas de vidrio, similares a las de los edificios diseñados en esa época por su colega Raúl Sichero (creador del Panamericano y del Ciudadela). En 1957 García Pardo proyectó el edificio El Pilar, en la esquina formada por Bulevar España, Avda. Brasil y la Rbla. República del Perú. El estrecho terreno requirió una solución novedosa: la del edificio "colgado", con un único pilar central hueco que concentra las circulaciones. De ménsulas ubicadas en la azotea cuelgan tensores de acero que sostienen las losas de los diferentes pisos. En 1959 García Pardo proyectó, junto a Adolfo Sommer Smith, el edificio Positano, ubicado en Ponce y Charrúa. Aunque en este caso el edificio es un gran volumen prismático, las soluciones técnicas son similares a las de El Pilar.

García Pardo mostraba gran interés por todas las expresiones artísticas, por lo que buscó integrar obras de arte en el entorno de sus edificios. Colaboró con varios artistas, como en el caso del Positano, en el que integraron un mural de Lino Dinetto, una escultura en hierro de Germán Cabrera, y un estudio de jardín del paisajista brasileño Roberto Burle Marx.