El gobierno hará un llamado a cirujanos para ocupar los puestos vacantes en las emergencias de los hospitales y excluirá a los médicos que renunciaron. Se prepara la declaración de emergencia sanitaria que podría incluir la inhabilitación de los profesionales que dimitieron.
El Poder Ejecutivo analizó ayer durante todo el día los pasos a seguir en el conflicto con los cirujanos, y a última hora anunció que se cubrirán los puestos vacantes que están quedando en las emergencias de los hospitales que dependen de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE).
El ministro de Salud Pública, Jorge Venegas, informó que de la convocatoria a realizar "quedarán excluidos los profesionales que se desvincularon por su propia voluntad".
Asimismo, el gobierno evaluará si las renuncias "ameritan la toma de medidas respecto a otros vínculos de estos profesionales con el resto del sistema público de salud", sostuvo Venegas en una conferencia de prensa realizada en la Torre Ejecutiva que se inició con casi dos horas de retraso y en la que no se aceptaron preguntas de los periodistas.
Los cirujanos contratados por la Comisión de Apoyo de ASSE comenzaron el sábado pasado a renunciar a sus cargos en las guardias de los hospitales, en el marco del conflicto iniciado en reclamo del reconocimiento de sus derechos laborales, en especial, el pago de la prima por nocturnidad.
Hasta ayer, eran 24 los médicos que renunciaron, afectando servicios en los hospitales Maciel, Pasteur y Español en Montevideo y los centros de salud de Canelones y San José.
Venegas -que en la conferencia de prensa estuvo acompañado por el secretario de la Presidencia, Alberto Breccia, el prosecretario Diego Cánepa, el ministro de Trabajo, Eduardo Brenta, y la presidenta de ASSE, Beatriz Silva- afirmó que se está elaborando un proyecto de ley "para conferir al Poder Ejecutivo la facultad de declarar la emergencia sanitaria, incluyendo las medidas disciplinarias que de ella deriven".
En tal sentido, el secretario de Estado aseguró que "las medidas pueden incluir la inhabilitación parcial o total del ejercicio profesional".
"Seremos garante de toda la atención en salud de nuestra población, como un derecho fundamental de todos los cuidados y como un derecho humano", dijo Venegas.
Breccia, por su parte, indicó que el gobierno llegó a la conclusión de que más allá del conflicto puntual de los cirujanos, el Estado debe asegurar la atención a la población en futuras situaciones similares.
El funcionario resaltó que "para este gobierno la salud es un derecho humano fundamental y los Estados se encuentran obligados a asegurar la asistencia médica de todos, en especial, garantizando la disponibilidad y accesibilidad de personal médico y profesional a los grupos socialmente desfavorecidos con base en un criterio de equidad".
Agregó que ello implicará transitar "caminos administrativos, legales y políticos" para hacer primar el derecho a la salud de la población, "frente al interés de grupos corporativos que detentan saberes que les han sido conferidos por la sociedad toda y afectan dicho derecho fundamental de la población con medidas desproporcionadas con el fundamento del reclamo que se formula".
"LAMENTABLES". Consultado anoche por El País, el presidente de la Sociedad de Cirugía del Uruguay, Mario Burguer, calificó de "lamentables" los anuncios formulados por el gobierno.
"Nunca se le ocurrió a nadie; ni en las peores dictaduras se hizo algo como lo que ahora está impulsando el gobierno", afirmó.
Por su parte, el asesor legal del gremio de los cirujanos, Alejandro Abal, dijo a El País que el gobierno "puede hacer lo que quiera pero que sea legítimo es otra cosa".
"No es legitimo que no cumplan con lo que prometieron y que el Ministerio (de Trabajo) no sancione a la Comisión de Apoyo de ASSE, como debería hacerlo. Tampoco el Banco de Previsión Social, cuyo presidente (Ernesto Murro) ha sido tan enfático en otra época, y ahora no haga nada ante una grosera violación del derecho de seguridad social", dijo Abal.
Al cierre de esta edición, la Sociedad de Cirugía del Uruguay se encontraba reunida analizando los anuncios realizados por el gobierno.
El viernes pasado, ante el anuncio de que los cirujanos comenzarían a renunciar en masa, el gobierno resolvió declarar esencial "todos" los servicios quirúrgicos de ASSE. Sin embargo, los médicos renunciantes consideran que la medida no los abarca por cuanto ellos no son presupuestados sino que son contratados por la Comisión de Apoyo de ASSE.
"BAJO CONTROL". En el Hospital de Clínicas, adonde han sido derivados la mayoría de los pacientes que no pudieron ser atendidos en los centros asistenciales de ASSE, ayer se vivió una jornada más tranquila que la del lunes y el fin de semana.
"No tuvimos la presión que tuvimos el lunes y el fin de semana", comentó a El País el director del hospital universitario, Víctor Tonto.
El lunes, en el Hospital de Clínicas se hicieron siete cirugías de emergencia, cuando lo habitual es entre dos y cuatro, señaló Tonto.
El servicio quirúrgico ha visto su trabajo duplicado desde el fin de semana, cuando se hicieron 14 operaciones entre sábado y domingo. Los funcionarios del Hospital de Clínicas advirtieron que "la mayoría de los servicios están saturados".
"Nosotros tratados de mitigar una situación compleja, pero la solución al problema no le corresponde a la Facultad de Medicina ni a la Universidad de la República, aunque esperamos que la salida se alcance cuanto antes", dijo el director del Hospital de Clínicas.
En el servicio de emergencia quirúrgica del Hospital Pasteur "está todo bajo control" ya que a pesar de la renuncia de los cirujanos se elaboró una planificación de trabajo que regirá hasta el fin de semana, dijo a El País el director del centro asistencial, Ricardo Ayestarán.
"La emergencia está funcionando sin problemas. Los dos cirujanos que por día no vienen los cubrimos con el jefe del servicio y el coordinador", indicó Ayestarán, quien resaltó que no hubo necesidad de derivar pacientes ni postergar intervenciones programadas.
En el Hospital Maciel, mientras tanto, las operaciones se realizaron en forma normal el lunes ya que había dos cirujanos presupuestados de guardia, dijo el director de la emergencia, Gustavo Bogliaccini.
Ayer fue necesario derivar pacientes, pero mañana el servicio será normal ya que la guardia será cumplida por cirujanos presupuestados que están trabajando normalmente, según explicó Bogliaccini ayer a El País. En el Hospital Maciel no se suspendieron operaciones coordinadas.
Por su parte, el Hospital Español tuvo ayer una jornada "tranquila", aunque los pacientes quirúrgicos de emergencia deben ser trasladados necesariamente ya que desde el sábado no se presentan a trabajar los cirujanos de guardia, dijo su director, Federico Eguren.
Si bien los cirujanos han ido anunciado su decisión de renunciar a los cargos, las dimisiones se efectivizan en la medida que les corresponden cubrir las guardias de emergencia.
Diputado del MPP: suspender devolución Fonasa
El diputado Álvaro Vega (MPP) lanzó en una reunión de bancada del Frente Amplio una alerta sobre un posible "quiebre financiero del sistema de salud", si se prosigue con las devoluciones a trabajadores por aportes realizados al Fonasa.
Según explicó Vega a El País, el Estado destinará US$ 50 millones para realizar las devoluciones y financiará otros $ 2.500 por cada jubilado que ingrese al Fonasa. Estas cifras sumadas al déficit actual de ASSE -equivalente a US$ 50 millones- "hará aumentar el déficit del sistema" a tal punto de hacerlo "peligrar a largo plazo", alertó el legislador.
Para solucionar la situación, Vega planteó eliminar las devoluciones que se aprobaron por ley durante la administración de Daniel Olesker al frente de Salud Pública. "Creo que es un profundo error lo que hizo Olesker en relación a las devoluciones. Su decisión aumenta el déficit del sistema y lo hace peligrar a largo plazo. Si los sistemas de salud no funcionan o son muy deficitarios a veces quiebran; y si quiebran los que se quedan sin asistencia son los que menos tienen", opinó Vega.
Según el legislador, los más beneficiados con las devoluciones "son los que más ganan y los que no tienen hijos", lo cual consideró "injusto".
Por su parte, el diputado Esteban Pérez (MPP) planteará a la bancada del Frente un proyecto de ley para obligar a los cirujanos que egresen de la Facultad de Medicina a trabajar cinco años en Salud Pública.
El legislador explicó que la idea es que durante ese período "no se les habilite el título para trabajar fuera de la gestión pública". La propuesta busca que los médicos "le retribuyan al pueblo lo que costeó el Estado en su educación", argumento Pérez.
En tanto, el diputado Aníbal Pereyra (MPP) cuestionó a los cirujanos y señaló que la medida que adoptaron de renunciar a las guardias "dejó de ser una reivindicación en el marco de un conflicto" y pasó a ser "un chantaje".
Las cifras
24
Es el total de cirujanos que hasta ayer renunciaron a sus cargos en las guardias de emergencia de los hospitales públicos.
14
Son las operaciones que se hicieron el fin de semana en la emergencia del Clínicas; es el doble de las habituales.
SINDICALISTAS Y ASSE VAN TRAS FONDOS DE LA RENDICIÓN
Técnicos del sindicato de Salud Pública (FFSP) y de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) están buscando fondos dentro de la Rendición de Cuentas para incrementar a partir del 1 de enero de 2013 los salarios más bajos del organismo.
El dirigente de la FFSP Martín Pereira señaló a El País que el sindicato es optimista y aguarda que se concrete un acuerdo a la brevedad. El viernes pasado, tras una dura confrontación que incluyó la ocupación de varios hospitales, el gobierno y el sindicato acordaron tomarse siete días para encontrar dentro del proyecto de Rendición de Cuentas los fondos necesarios para cubrir las demandas de la FFSP. El gobierno se comprometió a redistribuir los fondos que tenía asignados para otras reparticiones de Salud Pública. En caso que no surja un acuerdo las movilizaciones volverán a los hospitales.