A 14 meses de las internas, el único que promete a esta altura una disputa atractiva es el Partido Nacional. Por estas horas sus cuatro precandidatos están tejiendo alianzas y definiendo estrategias buscando un mejor posicionamiento.
El domingo 1° de junio de 2014 se realizarán las elecciones internas en los partidos políticos. Esta vez se adelantaron, para que no coincidan con el Mundial de Fútbol de Brasil 2014. Las elecciones son obligatorias para los partidos, pero el voto es voluntario.
En esta ocasión todo pinta que se repetirá un escenario igual al de las últimas dos internas, cuando la única disputa real se dio en el Partido Nacional: en 2004 Jorge Larrañaga le ganó a Luis Alberto Lacalle y en 2009 Lacalle le ganó a Larrañaga. En el Frente Amplio, en 2004 Danilo Astori no fue rival para Tabaré Vázquez y en 2009 tampoco lo fue para José Mujica. En el Partido Colorado, en 2004 Guillermo Stirling fue candidato de consenso y en 2009 nadie le hizo sombra a Pedro Bordaberry.
Para las internas de 2014, los blancos presentan cuatro precandidatos: Larrañaga, Luis Lacalle Pou, Sergio Abreu y Jorge Saravia. En el Frente Amplio están todos esperando la definición de Vázquez: si acepta la postulación será el candidato de la izquierda; en caso contrario se abre una gran interrogante. Y en el Partido Colorado el dominio de Bordaberry es tal que nada parece impedir que vuelva a ser el candidato.
ESTRATEGIAS. Así las cosas, los sectores blancos están elaborando sus estrategias y concretando alianzas. Las encuestas de intención de voto por ahora están marcando una clara ventaja de Larrañaga. El líder de Alianza Nacional se presentará como un "candidato maduro, estabilizado, potente y la única alternativa" al Frente Amplio, dijo a El País el diputado Pablo Iturralde. "A esta altura todo hace pensar que si gana el Frente Amplio no va a tener las mayorías parlamentarias. Y que eso, muy positivamente para el país, va a implicar la necesidad de negociar entre los partidos políticos. Larrañaga ofrece, co-mo principal candidato del Partido Nacional, ser un hombre de diálogo", agregó.
Larrañaga incorporó recientemente a sus filas a la diputada Verónica Alonso y tiene muy avanzadas las negociaciones con el senador Francisco Gallinal (Correntada Wilsonista, exsocio de Lacalle en Unidad Nacional) y con el diputado Pablo Abdala (Corriente de Acción Renovadora). Además cuenta con el apoyo de ocho de los 12 intendentes del Partido Nacional, y en Montevideo tiene la columna de la lista 250 del diputado Jorge Gandini, hasta ahora el único que lanzó con fuerza su candidatura a la Intendencia de Montevideo para las municipales de mayo de 2015.
Iturralde destacó que Alianza Nacional "no reconoce enemigos dentro del sistema político uruguayo", y dijo qué aportan los demás precandidatos blancos: Saravia permitiría "el regreso" de dirigentes y votantes que se habían ido del partido; Abreu ofrece "solidez" por su experiencia como ministro y senador; y Lacalle Pou "dinamismo" por su juventud.
"Creemos que tenemos una fuerza importante. Pero más que eso, tenemos mucho diálogo con todos los sectores políticos. El diálogo de Larrañaga tanto con la izquierda como con el Partido Colorado nadie lo puede desconocer", subrayó Iturralde. Si bien no se juega por cuál de los rivales de Larrañaga le dará mayor pelea en la interna, Iturralde reconoce que en el Partido Nacional hay hoy dos grandes corrientes: la herrerista y la wilsonista. "Da la impresión de que el Herrerismo es la otra gran fuerza", dijo.
Lacalle Pou, precandidato por Unidad Nacional (Herrerismo, Aire Fresco y Más País) está armando un movimiento "paraguas" y ya hizo acuerdos con otros sectores. El sábado 4 de mayo el congreso de Unidad Nacional lo proclamará como candidato. (Ver entrevista en página A8).
Sergio Abreu, que sabe que tiene menos estructura que Alianza Nacional y Unidad Nacional, se apoyará en 40 agrupaciones en todo el país que han adherido a su candidatura. Su estrategia pasa por desterrar el concepto de polarización en la interna, buscando evitar que la disputa se concentre entre Larrañaga y Lacalle Pou.
Como diferenciador, Abreu destaca que es el único de los precandidatos del Partido Nacional que ha tenido experiencia de gobierno: canciller entre 1993 y 1995 durante el gobierno de Lacalle y ministro de Industria entre 2000 y 2002 en el gobierno de Jorge Batlle.
Abreu maneja encuestas que indican que es el candidato blanco "menos resistido" dentro y fuera del Partido Nacional. El senador de Dignidad Nacional dijo a El País que tiene la lista al Senado "abierta".
El cuarto precandidato blanco es Saravia, electo senador en octubre de 2009 por el Frente Amplio en la lista del Espacio 609 que domina el MPP, se incorporó a la coalición de izquierda para las elecciones de 2004 y regresó al Partido Nacional hace dos años, en marzo de 2011.
El próximo sábado 16 su agrupación Concertación Republicana realizará en Montevideo un Cabildo Representativo que ratificará su candidatura para la interna.