Kidbox soluciona un problema mundial: cómo controlar Internet para los niños. Por eso, esta aplicación creada en Uruguay es un éxito mundial. Con descargas en 30 países, captó la atención de Samsung y ahora prepara una versión en inglés.
"Parece mentira, desde Uruguay a Estados Unidos. Y uno piensa, ¿no era al revés?", se pregunta Martín Larre, co-creador de Kidbox. Inmediatamente se responde: "Sí, era al revés, pero ya no es así. La respuesta es se puede, solo hay que animarse y abrir la cabeza. El mercado ya no es Uruguay, ni siquiera los países de habla hispana. Es el mundo".
Habla con propiedad. Kidbox, la aplicación que Larre y Alan Kind crearon recorrió un camino que la posicionó, en febrero de este año, como una de las 10 mejores del mundo, según el Congreso Mundial de Móviles, que tuvo lugar en Barcelona. Pero antes, hubo una idea.
LA IDEA. Martín Larre y Alan Kind sintieron el dolor de cabeza de sus amigos: cada vez que sus hijos querían entrar en Internet era un problema. Entonces, ¿cómo permitirle a los niños navegar y, al mismo, tiempo controlar lo que ven, lo que dicen y con quién están?
"Mi cuñado se sentaba al lado de su hijo y lo dejaba jugar mientras trabajaba. Pero tenía que mirar el monitor permanentemente. Yo pensé que esa experiencia podía ser muy mejorable", cuenta Larre.
La idea entonces fue crear un ambiente seguro en Internet donde niños de entre dos y ocho años, pudieran acceder a los contenidos que les gustaran sin correr los riesgos de toparse con contenidos no aptos para ellos.
"La idea era generar seguridad, pero no solo eso. Porque algunos padres no saben qué contenidos son mejores para su hijo", explica el uruguayo. "Entonces, además del ambiente seguro apuntamos a ofrecer contenidos especialmente seleccionados según el perfil de cada niño".
Pero hay más. "Kidbox dio un paso más allá para hacer algo que no se hacía. Aplicamos inteligencia artificial", apunta Kind. "Aprendemos sobre los intereses del niño para seguir recomendando contenidos de acuerdo a su perfil, a sus gustos y a los de otros niños similares. Así, lejos de darles una herramienta que los restrinja dejamos que disfruten la experiencia".
UNA PLATAFORMA. La idea creció. Hoy Kidbox no solo selecciona y ofrece contenidos por perfiles sino que es una plataforma de funcionalidades que hacen que el niño pueda tener una verdadera experiencia de Internet y que los padres puedan educarlo en ello.
"Quisimos poner a la aplicación en el centro de la familia", afirma Larre. Por eso, desarrollaron un ecualizador que permite a los padres perfilar los contenidos que ofrece Kidbox. Así, pueden seleccionar temas más lúdicos, educativos o volcados hacia ciertas áreas como arte o Matemática. Además, envían reportes digeridos sobre lo que el niño consume más al navegar.
Por último, la aplicación tiene dos funciones que anticipan la comunicación en Internet: el video mail y el photoshare. El primero permite al niño sin habilidades de lectoescritura grabar videos y enviarlos por mail a las personas que el padre haya habilitado, como parientes y amigos.
Esas personas reciben el video en su correo y pueden responderlo. El fotoshare funciona como una suerte de Facebook para que los niños aprendan a compartir fotos.
UN ÉXITO. El año pasado, Kidbox compitió en el concurso AppCircus de Buenos Aires y fue seleccionada entre las 20 mejores aplicaciones del 2012, lo que le posibilitó participar del Congreso Mundial de Móviles que tuvo lugar en Barcelona. Una vez allí, seleccionaron a las 10 mejores y Kidbox fue ubicada entre ellas.
El desarrollo tuvo una excelente recepción mundial. Hoy tiene una versión en castellano y otra en portugués. Ya tiene descargas en 30 países. Además, la empresa prepara una versión en inglés enfocada al mercado de Estados Unidos.
Por si fuera poco, Samsung, líder en el mercado de smartphones , analiza la posibilidad de incorporarla preinstalada en sus celulares.
"Vimos que podíamos generar interés en todos lados; el problema es global y la solución es bien recibida. Llamaron de Noruega y de Arabia Saudita. Son cosas que te abren la cabeza", cuenta Kind.
Kidbox se puede descargar de su web (www.kidbox.net). Hay una versión gratuita y otra premium que incluye todas las funciones, (a US$ 3.99 por mes o US$ 29.99 por año). Para quienes quieren probarla, durante el primer mes de descarga gratuita pueden disfrutar de todos los beneficios.
INTERNET PARA NIÑOS
La primera experiencia para niños en Internet
Kidbox ofrece contenidos especializados, seguridad para navegar y funcionalidades de comunicación para niños entre dos y ocho años. También brinda la posibilidad a los padres de controlar lo que sus hijos consumen y cómo lo hacen.
Un avance en las redes sociales y el mail
La función videomail permite a los niños sin habilidades de lectoescritura grabar videos y enviarlos por mail a una lista de contactos definidos por sus padres. El photoshare, por otro lado, les permite compartir fotos como en Facebook.
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