Santiago Gómez Pariente
EL RACISMO en el Perú es una puerta entreabierta y aunque hay un discurso institucionalizado que promueve su exterminio, éste se contradice con las actitudes cotidianas del peruano promedio y el imaginario social reflejado en los medios de comunicación. Un acercamiento al tema es lo que plantea el psicoanalista peruano Jorge Bruce en su libro Nos habíamos choleado tanto. Psicoanálisis y racismo. (Fondo Editorial de la Universidad San Martín de Porres, Lima, 2008).
El estudio, además de reabrir un debate históricamente postergado, muestra un panorama riguroso del mosaico cultural y étnico que es la sociedad peruana. Aparecen a lo largo del texto situaciones cotidianas de exclusión, comentarios desatinados de líderes políticos y casos clínicos que el propio autor toma de su experiencia en el diván, que sin duda resultan didácticos para un lector no familiarizado con el psicoanálisis. Estas actitudes están enmarcadas en la intrigante "pasividad" con la que los peruanos parecen reaccionar ante el racismo, lo que para el psicoanalista supone un problema mayor ya que no solo se confirma la existencia de la tara, sino también el grado de inconsciencia que de ella se tiene. Dice: "Los peruanos estamos tan habituados a las codificaciones y decodificaciones racistas que estas suelen pasarnos desapercibidas, en particular cuando no las acompaña una violencia ostensible".
EL doble significado. Desde las primeras páginas del libro, queda sentado el hecho de que la resistencia a la diferencia es algo intrínseco a la constitución del hombre, detalle sobre lo que ya otros estudiosos han teorizado. Es el caso de Fernando Savater, quien en su ensayo "La heterofobia como enfermedad moral" publicado en el número 205 de la revista mexicana Vuelta dice: "Tengamos en claro que la heterofobia no es un sentimiento inhumano sino humanísimo". En ese sentido es interesante el planteo que Bruce hace del verbo "cholear" (la palabra "cholo" hace referencia a los orígenes mestizos del grueso de la sociedad peruana) y su doble significado. Porque cholear en el Perú puede ser un halago -en un contexto de camaradería e intimidad-, así como una grave ofensa resultado de lo que el autor llama una "fractura social". Con esto se aclara el juego del título del libro, basado en la película de Ettore Scola Nos habíamos amado tanto, mas no la supuesta existencia del racismo en el Perú. Cómo explicar, pues, que una persona de ascendencia indígena como el economista Alejandro Toledo haya sido electo presidente.
El libro del psicoanalista peruano, quien además escribe columnas de opinión en varios medios y conduce un programa radial vespertino, está dividido en 4 capítulos y un epílogo. Y recopila anécdotas históricas del problema racial en el Perú desde los comienzos de la República donde el discurso dominante era racista. Se cita, por ejemplo, a Clemente Palma, hijo del tradicionalista Ricardo Palma, quien en su tesis universitaria de 1897 se refería de este modo a la raza indígena: "(…) raza embrutecida por la decrepitud, es por su innata condición inferior, y por los vicios de embriaguez y lujuria, un factor inútil (…). Los elementos inútiles deben desaparecer y desaparecen. A medida que la civilización vaya internándose en la Sierra y las montañas, el elemento indígena puro irá desapareciendo, como sucede en Estados Unidos con los pieles rojas (…). Habría un medio para ayudar a la acción evolutiva de las razas: el medio empleado en Estados Unidos; pero ese medio es cruel, justificable en nombre del progreso, pero censurable en nombre de la filantropía y del respeto a la tradición, algo arraigados en el espíritu peruano: ese medio es la exterminación a cañonazos de esa raza inútil, de ese desecho de raza."
Para el autor las declaraciones de Palma hijo son, además de extremas, resultado de un descontento propio, ya que él mismo tenía el cabello rizado y no encajaba en los cánones de belleza aceptados por la sociedad de entonces. Sus palabras suponen un rechazo a sí mismo, a su insufrible mestizaje.
MECANISMOS DE IDA Y VUELTA. Uno de los puntos que se tocan en Nos habíamos choleado tanto… es el que considera las formas en las que la discriminación actúa. Se habla por ejemplo de una doble dirección, donde los discriminados pasan a ser discriminadores y la aceptación del sentimiento indígena se fortalece excluyendo a los `blancos` por ser descendientes de los colonizadores y cargándoles un historial de saqueo, explotación e injusticia. Aquí el autor echa mano de un discurso puntual en el contexto de pasadas contiendas electorales: se trata del padre del candidato nacionalista Ollanta Humala, Isaac Humala, quien en varias oportunidades advirtió que si su hijo alcanzaba la presidencia los `blancos` serían sometidos a la raza cobriza. Dice Bruce: "La tortilla racista nunca había sido volteada con tanto desparpajo en el Perú".
Además, se amplía información sobre los posibles orígenes del sentimiento racista como la compleja inserción laboral o las altas barreras estéticas y materiales que la elite impone; y los efectos posteriores al acto discriminador como el sentimiento de culpa, el remordimiento y la necesidad de castigo. Pero, si bien Bruce se propone ser divulgador y "escapar del vicio de la literatura psicoanalítica" (para lo que adjunta un glosario de tecnicismos y una `caja de herramientas` con aclaraciones también técnicas), no lo logra. En principio por la complejidad de la aproximación científica que se hace - incontables son las apariciones de `pulsión de muerte`, `punto de capitón`, etc.- y después por la cantidad de citas y estudios de los que se vale para componer su ensayo, muchos de los cuales requieren lecturas especializadas.
MODELOS DE EXPORTACIÓN. Para Bruce es una realidad que el imaginario social peruano esté compuesto mayormente por elementos de exportación. Así, la publicidad utiliza para promocionar sus marcas la estética propia de la llamada `raza blanca` "que domina el paisaje urbano a unos niveles que ni siquiera se alcanzan en Escandinavia, en donde, me consta por haber efectuado algunas incursiones en contextos profesionales en países como Dinamarca o Noruega, lo mestizo tiene un prestigio y un atractivo -eventualmente exótico- que acá se rechaza o se niega, cuando no se denigra." Esto, de cara al negocio, queda justificado en el gremio publicitario peruano por un supuesto "sentimiento aspiracional" que motivaría a los peruanos a consumir para llegar a ser como sus referentes, asunto quizá más cercano a la alienación que al racismo mismo.
Con todo, el ensayo superó las 4 ediciones y lleva vendidos más de 10 mil ejemplares en el Perú, cifra que supuso un récord de ventas para libros de ese tipo y una sorpresa para el cuerpo de psicoanalistas peruanos, sobre todo si se tienen en cuenta la especificidad de la ciencia, la impopularidad del tópico y los bajos índices de lectura del país.
El tema, por inacabable y polémico, ha motivado una saludable discusión en sectores donde antes no la había. Y el mismo éxito del libro ha llamado la atención de los expertos, que han visto en este recibimiento un nuevo interés de la población, considerando incluso dentro del análisis la procedencia escocesa-peruana del psicoanalista.