GRUPO DE DIARIOS DE AMÉRICA
Cuando el obispo Paulo Roberto gritó "¡Si usted da, Dios le da!", después de decir que la crisis no debería servir de pretexto para negar el diezmo o la ofrenda, Mercedes no lo pensó dos veces. Levantó la mano y tiró, en una bolsa roja, los 500 pesos (unos 50 dólares) que su madre le había prestado. Atraída por un anuncio que había visto en el metro: "¿Está sufriendo y no encuentra una salida?", la mexicana llevó sus esperanzas al templo en el antiguo cine Jalisco, en el barrio popular de Tacubaya, Ciudad de México, donde pidió a Dios "trabajo, renta, salud y paz familiar".
Al aceptar el desafío de regresar en ocho días con otra donación, la mexicana Mercedes estaba casi aumentando el rebaño de la Iglesia Universal del Reino de Dios (Iurd). Mientras en todo el mundo sólo se habla de cortes, retracción de inversiones y reducción del crecimiento, la iglesia fundada hace 30 años en Brasil se aprovecha de la crisis para atraer fieles desesperados y consolidar su imperio evangélico en América Latina. Con excepción del nombre, ya que en la mayoría de los países se autodenomina "¡Pare de sufrir!", la Iurd usa para crecer la misma formula aplicada en Brasil, predicando la prosperidad a cambio de donaciones, rituales de liberación espiritual y un trabajo doctrinario fuertemente apoyado por los medios de comunicación.
Se estima que la Universal, fundada en 1977 con las predicaciones de Macedo en templete en Méier, barrio del suburbio de Río de Janeiro, reúna hoy más de 4.500 templos en Brasil. En el reportaje publicado el año pasado por Folha de Sao Paulo, la periodista Elvira Lobato afirma que la Iurd cuenta con 23 emisoras de televisión y 40 de radio, además de 19 empresas registradas en nombre de 32 miembros de la iglesia, en su mayoría obispos.
La predicación contra el demonio, que es la base teológica de la iglesia, está en la génesis de la Universal. Al inicio, Edir Macedo y Carlos Rodrigues (convertido que más tarde se transformaría en el diputado Bispo Rodrigues) tenían un programa de radio que era antecedido por el programa de una sacerdotisa de candomblé y macumba (líder religiosa afrobrasileña), con quien se peleaban el micrófono. En esa época, ellos ocupaban una ex-funeraria en Abolicao, suburbio de Río de Janeiro. Como la iglesia empezó a ganar adeptos a partir de este momento, la pareja se convenció de que ésta era la fórmula de crecimiento: predicar la idea de que la mala suerte de las personas se explicaba por la presencia del demonio, muchas veces entronizado en rituales de terreros.
Otros dos elementos forman esta especie de triada doctrinal: un fuerte esquema de comunicación y la Teología de la Prosperidad, surgida en los Estados Unidos, un discurso que predica que la pobreza es la obra de Satanás y promete ascensión social a las clases más pobres. Sin embargo, para alcanzar las gracias, el fiel es obligado a contribuir financieramente. El cobro del diezmo es la acción central de la iglesia. Y siempre que es objeto de ataques y críticas por causa de la agresividad en el cobro y del oscurantismo en el destino dado al dinero, se defiende usando el argumento de libertad religiosa, asegurada por la Constitución brasileña. Este argumento aparece, inclusive, en su defensa en los procesos y averiguaciones abiertas para investigar sus métodos de recaudación y su movimiento financiero.
Con uno u otro contratiempo, la Iglesia Universal amplía su rebaño sin encontrar dificultades locales. A pesar de las polémicas en las que se involucró en Brasil, que fue motivo de denuncias sobre blanqueo de dinero, falsedad ideológica, prejuicio religioso, entre otros problemas, una encuesta en ocho países (Argentina, Uruguay, México, Venezuela, Colombia, Costa Rica, Ecuador y Puerto Rico) muestra que las autoridades del continente, hasta ahora, prácticamente no han creado restricciones a la expansión de este imperio de la fe en sus países. En México, desde hace casi cuatro años, la Iurd enfrenta un litigio por no haber registrado en la Secretaria del Gobierno (Segob) a 35 de sus ministros. La multa llegaría a 17 mil dólares, en el caso de perder la apelación judicial.
En San José de Costa Rica la Iurd llegó a adquirir por dos millones de dólares una sinagoga judaica, para transformarla en su sede. Ya en Buenos Aires, la compra de una emisora de radio por 15 millones de dólares aceleró su expansión. En la mayoría de los países, la Iglesia Universal está registrada como organización civil para que los gobiernos locales tengan menos margen de regulación. Además de eso, conseguir status de iglesia probablemente representaría la necesidad de estar en contacto con otros liderazgos religiosos locales.
Ni siquiera las diferencias culturales ni la barrera del idioma enfrentada por el "portuñol" de los pastores brasileños, representan obstáculos a la Iurd. "El diezmo es la palabra clave para abrir las puertas de Dios", predica el obispo Paulo Roberto del altar del templo junto a un desempleado, a un enfermo de cáncer, a una madre soltera, a un endeudado, a un negociante fracasado, a un divorciado, entre otros desesperados. Si quieren parar de sufrir, precisan seguir al obispo. "Si usted da, Dios le da", repite Paulo Roberto, al pedir donaciones que van de 20 pesos a mil pesos.
Como en Brasil, el cobro del diezmo es el objetivo central de la iglesia. Irma Saavedra, ex-seguidora de la Iurd en Venezuela, frecuentó por algunos meses un templo en la ciudad de Maracay. "Los pastores le dicen que cuanto más grande es su contribución a Jesús, más recibirá", dice. Saavedra aclara que tienen el cuidado de decirle que el diezmo no es obligatorio, pero si no lo da, no debe esperar grandes favores. "Y es cuando la gente deja todo lo que tiene", resume.
En el templo central de Costa Rica, los cultos son interrumpidos para la exhibición de un video que muestra la historia de un empresario argentino que había perdido sus bienes. Después de hacer un sacrificio y entregar a la Iglesia el dinero ahorrado para su matrimonio, comenzó a prosperar hasta hacerse un magnate. "¿Cuándo vamos a ver un testimonio como éste en esta iglesia?", pregunta el pastor. "Me encantaría que ustedes prosperaran así, como lo hizo este hombre". El pastor les pide que todos vuelvan a sus asientos y depositen sus ofrendas, lo que cada uno pueda, en dos bolsas de paño.
Después, el pastor pregunta quiénes están dispuestos a hacer el sacrificio, y solamente dos o tres levantan las manos. El pastor sonríe y les dice "no hay problema, cada uno sabe cuando puede hacer el sacrificio al Señor. ¿Saben lo que decimos cuando no podemos hacer el sacrificio? ¡Que tenemos a Judas agarrado al bolsillo! ¿Quién tiene a Judas agarrado al bolsillo?", les pregunta con una sonrisa, bromeando, y varias personas le responden levantando las manos.
Aparte del interés por el dialogo ecuménico, la Iurd repite en América Latina otros modelos ya usados en Brasil, como la ocupación de los antiguos cines y teatros, con predilección en barrios pobres y populares, la venta de supuestos objetos milagrosos y el alquiler de horarios de emisoras de radio y televisión en la madrugada. Otra práctica que se repite fuera de Brasil es la organización temática de los cultos semanales. El martes, por ejemplo, empezó a ser el día de liberación (cuando los religiosos "limpian" las personas de los espíritus malos). El lunes, es el día dedicado a la prosperidad. El miércoles y domingo son los días del Espíritu Santo. El viernes, la liberación y el jueves, la familia. El sábado, las actividades se entregan a los obreros y a los pastores auxiliares, ya que es el día de descanso del pastor titular. Aunque los temas sean distintos, una práctica se repite todos los días: los intensos pedidos al pago de los diezmos.
Fue en el comienzo de la década de 1990 que la Universal atravesó las fronteras brasileñas pera instalarse inicialmente en Uruguay y en Argentina. El desarrollo en dirección al Uruguay, por ejemplo, empezó en Livramento y en otras zonas fronterizas. Para los frentes colonizadores, la cúpula de la iglesia optaba por enviar jóvenes pastores brasileños, dispuestos a trabajar duro e iniciar nuevas iglesias en una situación que seguramente no es fácil y que les exige dedicación e involucramiento sin espíritu crítico.
Desde el comienzo, los obispos, los pastores y los obreros promueven cultos sincréticos, en los cuales mezclan elementos de varias religiones y hacen sesiones de exorcismo, liberación y cura. En los cultos, ellos predican la idea de que la mala suerte de las personas se explica por la presencia del demonio. Como salida para esos males, la iglesia les ofrece a los fieles la Teología de la Prosperidad, surgida en los Estados Unidos, un discurso que predica que la pobreza es obra de Satanás y promete ascensión social.
En noviembre, en una sesión de liberación ocurrida en el Centro de Ayuda Espiritual de Sabana Grande, unidad de la Iurd en Venezuela, el pastor intentaba libertar del demonio a una mujer que por presunción fue traicionada por su marido. La ceremonia obedece siempre el mismo guión. El pastor empieza hablando en voz baja: "Libérese, mujer, del sufrimiento, porque encontró marcas de lápiz labial en la camisa de su marido" La voz se hace más fuerte y enfática hasta que la mujer grita y el pastor la agarra por el pelo: "¿Espíritu maligno, quien eres tú?, dijo él, mientras la mujer se niega a contestarle y se contorsiona. Por fin, le contesta: "Maria Lionza".
Descubierto el problema, el pastor le ordena a la mujer que ponga las manos hacia atrás, para luego pedirle que expulse todo el mal que había sembrado en la víctima. La multitud permanece estupefacta. La mujer, llevada al altar, hace muecas. Sus gestos indican la extracción de algo que no se puede ver. "¿Ya ha expulsado todo?", le pregunta el pastor. Con la voz ronca, la mujer le contesta que sí. Aparentemente el demonio se había marchado y la creyente se dirigió tranquila a la confitería contigua. Si ya no había demonios, había tiempo para un café.
El especialista mexicano Bernardo Barranco explica que esa iglesia neo-Pentecostal se encuentra en un meteórico crecimiento porque manipula emociones como la risa, el llanto y la alabanza en una sociedad rígida, en crisis económica y de valores y con una Iglesia católica predominante que no satisface a las necesidades espirituales de la sociedad. Sin embargo, destaca: "No se sabe la línea divisoria en la cual comienza la empresa o la religión. Manipulan un negocio de lucros intercambiados, porque la gente no es tonta y tampoco se deja engañar. Ellos van porque reciben a cambio lo que el estado o la iglesia predominantemente no les da: esperanza de vida".
LOCATARIOS EN BRASIL. Peleas religiosas, escándalos, denuncias, detenciones marcan los 30 años de la Iglesia Universal en Brasil. Los medios de comunicación, el catolicismo y las religiones afrobrasileñas son vistos por ella como sus principales oponentes. Desde el año pasado, la Universal ha promovido represalias contra los medios de comunicación y periodistas que cruzan su camino. Siempre usando los mismos argumentos para alegar un eventual daño moral causado por los reportajes, fieles de varios lugares del país, en una acción claramente organizada, movieron procesos individuales contra la periodista Elvira Lobato de Folha de Sao Paulo, después de un reportaje sobre el imperio de comunicación montado por la iglesia.
La misma maniobra intentó intimidar a la Red Globo de Televisión, después que la emisora exhibió un reportaje en el programa "Linha Direta" mostrando la participación de tres pastores de la Universal en el asesinato de un joven en Bahia en 2001. De las 96 acciones movidas por fieles con el argumento del daño moral, 87 tuvieron sentencias favorables a Globo.
En el reportaje de Elvira Lobato, la periodista informó, por ejemplo, que la Iurd tiene su propia empresa de taxi aéreo, la Alliance Jet, en Sorocaba (Sao Paulo). Según información de la empresa, ellos facturarían 500 mil reales mensuales, tienen tres aviones, uno de ellos adquirido por US$ 28 millones en 2007. También informó que la Unimetro, empresa de la Iurd, estaría asociada a la Cableinvest, registrada en el paraíso fiscal de Jersey, en el Canal de la Mancha. El eslabón aparecía en los registros de la empresa en la Junta Comercial de Sao Paulo. "Una hipótesis es que los diezmos de los fieles sean enviados a paraísos fiscales", escribió la periodista.
La cantidad de empresas asociadas a los obispos, otro dato relevante del reportaje reforzó las denuncias publicadas por los medios de comunicación desde la década de 1990, de que la Iurd utilizó a terceros para la adquisición de las emisoras de radio y de televisión, en flagrante ilegalidad. La persistencia del problema muestra que el poder político representado por la combinación "medios de comunicación-fe" hizo que varios gobiernos fingieran que no veían el "modelo de negocio" que garantizó la expansión de este imperio.
Ya en el campo teológico, la pelea con la Iglesia Católica costó a la Universal uno de sus peores momentos en 1995, cuando uno de los obispos, Sérgio von Helde, a pretexto de criticar el feriado nacional en homenaje a Nossa Senhora Aparecida, patrona de Brasil, atacó y pateó durante un programa de televisión (transmitido por la Record, que pertenece a la Universal) la imagen de la Santa. El ataque, de gran repercusión nacional, obligó al obispo Macedo, líder y fundador, disculparse y destituir a von Helde, transferido para una de las unidades de la Iurd en el exterior. Otro momento crítico fue la prisión de Macedo por práctica de charlatanismo; estuvo 11 meses preso.
En las actividades regulares de la Iglesia, obispos, pastores y obreros promueven cultos sincréticos, en los cuales mezclan elementos de religiones variadas y hacen sesiones de exorcismo, liberación y curación. Ataques a la Umbanda y al Candomblé son frecuentes y agresivos. Eso provocó una acción, patrocinada por el Superior Órgano de Umbanda del Estado de Sao Paulo, ganada en el 2005 en las Cortes de Justicia Federal contra las redes Record y Mulher, ambas de la Iglesia Universal, por causa de los programas que enfocaron "de manera negativa y discriminatoria las religiones afrobrasileñas". La Iurd recorrió la decisión y la causa, ahora, espera la manifestación del Tribunal Superior de Justicia.
Investigación regional
En esta investigación de Grupo de Diarios América participaron Jorge Rouillon con la colaboración de Christian Libonatti (La Nación, Argentina); Chico Otávio y Ascanio Seleme (O Globo, Brasil); Adriana Garzón y José Mojica (El Tiempo, Colombia); Mauricio Herrera (La Nación, Costa Rica); Ana Minga (El Comercio, Ecuador); Natalia Gómez (El Universal, México) Carmen Millán
(El Nuevo Día, Puerto Rico); Josefina Blanco (El Nacional, Venezuela) y Paula Barquet (El País, Uruguay)