Uno de los escenarios genera un “pequeño espacio fiscal”.

Si la economía uruguaya se comporta de acuerdo a las proyecciones que ha trazado el Ministerio de Economía (MEF) habrá "nuevos incrementos del ratio deuda neta/Producto Interno Bruto" (PIB) y por ende un "deterioro de los niveles de sostenibilidad de la deuda". Esta es una de las conclusiones del informe "2017-2019: ¿Es sostenible la deuda pública", elaborado por el Centro de Investigaciones Económicas (Cinve).

Citando al Fondo Monetario Internacional (FMI), el trabajo define sostenible como "aquella situación en la cual se espera que el deudor continúe con el servicio de la deuda sin que sean necesarias correcciones futuras excesivamente grandes tanto en los ingresos como en los gastos". Con ello, Cinve realizó un ejercicio para evaluar "si la deuda es sostenible en términos de solvencia, es decir, si es posible afrontar los servicios de deuda sin reducir el stock de la misma". Para ello, evaluó si el resultado primario estimado para los años venideros permitiría que el ratio deuda neta sobre PIB se mantenga estable.

Cinve delineó tres escenarios posibles en su estudio: uno en que la economía sigue las proyecciones del MEF; otro que incorpora "las variables macro-económicas proyectadas por Cinve (… ) para estimar los ingresos, egresos y tasa de interés promedio de la deuda del Gobierno Central y así calcular la deuda neta que derivaría de es-te contexto"; y un tercero que se diferenciaría del segundo en que no tiene en cuenta el aumento de ingresos fiscales propuesto para 2018.

El ajuste de esta Rendición de Cuentas —suba a los impuestos a los juegos de azar y de la tasa consular— generaría un incremento fiscal total de 0,2% del PIB de 2018 y 2019, "teniendo un impacto pequeño sobre el ratio deuda neta/PIB", dijo Cinve.

Según el informe, el escenario del gobierno "implicaría pequeños incrementos del peso de la deuda en el producto para 2018 y 2019, respecto del menor nivel alcanzado en 2017".

En cambio, el escenario estimado por Cinve "deriva en el mantenimiento del nivel alcanzado en 2017 deuda neta/PIB en el año 2018 y un posterior descenso en 2019". Esto, agrega, generaría una "mejora de la sostenibilidad de la deuda", así como la "generación de un pequeño espacio fiscal".

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