Forma parte de estrategia regional; se buscará renegociar cuotas y aranceles.
La firma de mega-acuerdos comerciales internacionales hace que otros, rubricados anteriormente, pierdan su efecto positivo. Es por ello que Uruguay avanzó en la firma de un acuerdo de última generación con Chile y ahora busca profundizar el relacionamiento comercial con México.
El Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP) se firmó el 4 de febrero en Nueva Zelanda por los 12 países miembros (Estados Unidos, Canadá, Japón, Australia, Nueva Zelanda, Malasia, Singapur, Brunei, Vietnam, México, Chile y Perú). Este acuerdo representa al 40% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial e implica un mercado de 800 millones de habitantes.
Pero la firma de ese y otros acuerdos ha hecho que beneficios a los que podía acceder Uruguay no lo diferencien de otros países e, incluso, lo coloque en peores condiciones.
Ante eso, la Cancillería uruguaya tiene delineada una estrategia de acercamiento hacia algunos mercados regionales, para no seguir perdiendo beneficios. Uno de esos países es México, que el año pasado fue el noveno comprador de mercadería uruguaya.
Las exportaciones hacia ese mercado fueron por US$ 226,7 millones, aunque con una caída de 6,3% frente a 2014 cuando las colocaciones llegaron hasta US$ 241,8 millones, según estadísticas de la Unión de Exportadores (UEU). Uruguay tiene firmado con México un Tratado de Libre Comercio (TLC).
El canciller Rodolfo Nin Novoa explicó en la semana pasada que a pesar de tener vigente un TLC, el acuerdo contiene la particularidad de no tener aranceles cero de ingreso para algunos productos. Y sin el acuerdo, por las políticas proteccionistas que aplica el gobierno mexicano, el costo de ingresar en ese mercado se elevaría hasta un 75% u 80%.
Es por eso que la intención del gobierno uruguayo es negociar con autoridades mexicanas una rebaja de los aranceles por el ingreso de mercadería y a la vez un incremento de las cuotas de acceso, según dijeron a El País fuentes oficiales.
Las fuentes añadieron que la iniciativa incluye a productos locales que enfrentan complicaciones por precios, acceso a otros mercados o competencia de otros países que buscan reducir la cuota uruguaya. La estrategia de profundización comercial con México viene siendo trabajada por el Ministerio de Ganadería.
El resultado fue la concreción de un encuentro entre autoridades de ambos países que se producirá en México el lunes próximo. La delegación local estará encabezada por Nin Novoa.
En la visita el jerarca prevé reunirse con autoridades del Ministerio de Finanzas y de Agricultura.
La autoridades uruguayas entienden que con la firma de mega-acuerdos, los hoy vigentes que tiene Uruguay "están quedando viejos", dijeron las fuentes.
Esa percepción fue compartida por Nin Novoa. "Al ingresar México al TPP, nuestro acuerdo quedó caduco", dijo el canciller días atrás a Radio Uruguay.
En primera instancia se trabajará en mejorar las condiciones para las exportaciones de la leche en polvo y los quesos. En el gobierno están seguros que existe "potencialidad" para mejorar los acuerdos, dijeron las fuentes.
La leche en polvo y los quesos son los dos principales productos que Uruguay exporta a México. En ambos casos el ingreso dentro de la cuota es sin arancel, y cuando se cumple se paga un recargo de 20%.
La cuota anual para ingreso de leche en polvo es de 6.000 toneladas. En el otro caso, la cuota por año de queso blando (tipo Dambo) es de 5.000 toneladas y de 2.000 toneladas para quesos duros.
Otros de los productos exportables de Uruguay a México son la madera y las carnes ovinas y vacunas.
El diálogo con las autoridades mexicanas se ubica dentro de una estrategia de renegociación de convenios con Chile, Perú y Colombia, a quien se le comenzará a vender arroz, pese a que el principal competidor es Estados Unidos.
En el caso de Chile, la semana pasada se comenzó la negociación de un acuerdo comercial bilateral "de última generación".
El nuevo convenio buscará profundizar el ya existente. Actualmente Uruguay y Chile tienen el Acuerdo de Complementación Económica (ACE) Nº 35, en vigencia desde 1996, al que se le incorporará una serie de "nuevos capítulos propios de un acuerdo de cuarta generación", según la información oficial.
"Entre ellos se encuentran el intercambio de bienes, reglas de origen, comercio de servicios, medidas sanitarias y fitosanitarias, obstáculos técnicos al comercio, facilitación del comercio, comercio electrónico, propiedad intelectual, cooperación, medio ambiente, derechos laborales y género, entre otros temas de la agenda económico-comercial", se explicó en un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores la semana pasada.
"Este nuevo tratado también se vinculará con aquellos ya suscritos entre ambos países en materia de compras públicas, de promoción de inversiones, y para evitar la doble imposición tributaria", añadió Cancillería.
Impulsar el diálogo con la UE
El gobierno quiere aprovechar su presidencia pro témpore del Mercosur para lograr avances concretos en la agenda de negociación del bloque.
Además de la profundización de los acuerdos bilaterales que negocia Uruguay con países de la región, la otra punta de lanza en inserción externa es impulsar el intercambio de ofertas de bienes entre el Mercosur y la Unión Europea (UE) para avanzar en la negociación entre los dos bloques.
Es por eso que en el gobierno se analiza la posibilidad de concretar una visita del presidente Tabaré Vázquez a Bruselas para dar un impulso adicional a ese diálogo con la UE. Las negociaciones para alcanzar un acuerdo entre ambos bloques llevan ya más de una década.
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