EI nuevo sistema de certificación electrónica de faena impulsado por el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), destinado a cumplir con exigencias planteadas por la Unión Europea (tanto para Hilton como para cuota 481) y Suiza, está generando problemas operativos que ponen nerviosos a los productores.
En el marco de lo que se considera una gran desinformación, entre otras cosas, sucede que los animales que perdieron la trazabilidad (*02) no están pudiendo ingresar a las plantas de faena cuando tienen por destino los mercados antes mencionados.
"Esos animales están siendo rechazados complicando los embarques, lo que está causando un malestar muy grande, porque todos los productores tenemos algún animal en esa situación", explicó el presidente de la Asociación Rural del Uruguay (ARU), Ricardo Reilly.
A la vez, dijo que de la nueva certificación "surge una serie de trámites que no están muy claros, como el de la firma electrónica o la exigencia de dos lecturas, lo que implica un costo extra para el productor". Para contar con información de primera mano, el próximo lunes, la directiva de la ARU se reunirá con las autoridades del Snig.
Ayer, al ser consultada por El País, la directora del Sistema Nacional de Información Ganadera, doctora María Nela González, aclaró que a la mayoría de los vacunos que aparecen en el sistema observados como *02, se les está pudiendo levantar la observación.
González explicó que el *02 es un animal que perdió la trazabilidad. "Cuando eso pasa es porque alguien hizo algo que está mal, no es el sistema. O no lo registraron en tiempo y forma, como dice la Ley o porque algún evento en su vida no quedó registrado. Ahí la responsabilidad es del productor, del operador o de alguna intermediación que se hizo y no fue bien hecha. No es un problema del sistema", aclaró.
La jerarca del MGAP negó tajantemente que los vacunos con la trazabilidad observada queden fuera de mercado. "No se pueden exportar a la Unión Europea o Suiza, pero Uruguay tiene 135 mercados abiertos; incluso pueden ser destinados al mercado interno".
González aclaró que "no hubo un cambio de normativa, ni de reglamentación. Se cambió un procedimiento que antes se hacía en papel y pasó a ser electrónico. No es nada más que eso. Se tiene que seguir dando cumplimiento a todo lo que existía".
A la vez recordó que como no dieron los tiempos, "había cambio de administración a partir del 1° de marzo y había que hacer una modificación en cuanto a que el MGAP, como agente de retención, tiene que cobrar el certificado, es que hicimos una prórroga por 180 días a partir del 2 de marzo y los productores no pagan ese certificado, queda dentro de los honorarios del veterinario particular".
Además de los animales observados con *02, también hay problemas y rechazos con algunos bovinos que nacieron antes de que se pusieran en práctica la trazabilidad obligatoria (*59). Son vacunos adultos cuyo status se regularizó en 2011. "Los *59 van desapareciendo por una razón biológica, son animales muy adultos, tienen entre 8 o 9 años", reconoció la directora del Snig.
González destacó que las advertencias, sea cual fuera de esos animales (*02), han ido disminuyendo sustancialmente por las capacitaciones.
Directora del Snig se reunirá el lunes con la Aru