El equipo sacude al fútbol inglés gracias a los goles de Vardy, convertido en ícono publicitario.

Nadie lo imaginaba. Ni el más optimista hincha del modesto Leicester Football Club habría pronosticado que el equipo de sus amores estaría a solo dos puntos de la cima de la multimillonaria Premier League, donde se encuentra el poderoso Arsenal.

Mientras los gunners tienen en su plantilla figuras reconocidas como el alemán Mesut Ozil o el chileno Alexis Sánchez, los «zorros» transitaron la primera parte de la campaña en el primer lugar y se mantienen expectantes de retornar a la cima del fútbol inglés gracias a un tal Jamie Vardy, su goleador y estandarte.

Inesperadamente, el delantero se convirtió en uno de los dos máximos anotadores de la Premier, con 15 tantos, no sin antes quebrar un récord: marcar en 11 partidos consecutivos en el campeonato.

Esa hazaña catapultó al «9» a las primeras planas de los medios, a la selección inglesa y ya se habla del interés de un grande como el Manchester City por contar con sus servicios. Nada mal para un jugador con pasado de convicto y que en sus inicios combinaba la práctica del futbol amateur con el trabajo en una fábrica.

Las proezas de la revelación de la temporada no pasaron desapercibidas para algunas marcas.

En plena euforia, las papas fritas Walkers, una de las más populares en Inglaterra y uno de los patrocinadores del Leicester, lanzaron convenientemente una edición especial en la que el jugador engalanaba el packaging.

Beats by Dre, la empresa de auriculares famosa por reclutar a estrellas del deporte como LeBron James o Luis Suárez para promocionar sus productos, también lo convirtió en uno de sus embajadores. Bajo el título «No lo arruines», el aviso navideño de Beats tiene a Vardy hablando sobre los mejores y peores regalos que hizo y recibió en las fiestas. «El mejor obsequio que he hecho es... yo mismo, y se lo estoy ofreciendo a todo el mundo», soltó el ariete al declarar «sin casete» ni modestia.

Además de su estrella, el Leicester está aprovechando el gran momento del equipo desde el punto de vista del marketing. El martes 29, previo a recibir al Manchester City en su estadio cuando igualó sin goles, la marca Singha Beer animó la previa con el reparto gratis de cervezas para 30.000 fanáticos «zorros». La acción es parte del flamante acuerdo entre la cervecera tailandesa y el club, el cual se extenderá hasta 2018 por un valor de 4,6 millones de libras.

El vínculo del Leicester con Tailandia es más profundo que eso. De hecho, el principal sponsor del equipo es King Power, el grupo de free shops aeroportuarios más importante de ese país, con una facturación anual estimada en US$ 1.900 millones.

La alianza comenzó hace cinco años cuando los dueños del grupo tailandés, Vichai Raksriaksorn y su hijo Aiyawatt, desembolsaron US$ 31 millones para quedarse con el club. A esto se sumó que King Power pagaría US$ 1,5 millones extra por aparecer en el pecho de los jugadores.

Otro socio es Puma, que viste al plantel desde 2012 tras pagar US$ 1,6 millones.

Cifras aparte, los hinchas del Leicester están ilusionados con que dentro de medio año puedan gritar campeón, para incredulidad de los millonarios equipos de Manchester, Arsenal y Chelsea.

Para eso confían en que, como advirtió el aviso de Beats, Vardy y compañía «no lo arruinen».

Marketing DeportivoPor Diego Ferreira | [email protected]