Los dos únicos canguros que tiene Villa Dolores (un macho y una hembra) fueron robados en la madrugada de ayer y tras un meteórico operativo policial los dos ya fueron recuperados.

Dos personas fueron detenidas por su presunta vinculación con el robo de los animales. Los dos animales ya fueron recuperados. Uno de ellos fue ubicado en la tarde del viernes cuando se detuvo a los dos sospechosos. Las investigaciones llevadas adelante permitieron en las últimas horas de la noche ubicar al segundo canguro. 

Personal del zoológico debió trasladar a los dos animales a Villa Dolores y permanecen en observación debido al estrés que sufrieron. 

Según informó a El País el director de Artes y Ciencias de la Intendencia (bajo cuya órbita se encuentran los zoológicos municipales), Juan Canessa, el robo ocurrió después de las 5:15 de la madrugada, cuando los serenos del zoo, que se encuentra cerrado hace más de un año, hicieron la última ronda de vigilancia.

"Rompieron el alambrado y se los llevaron. El tráfico de animales es algo habitual, desgraciadamente", indicó Canessa.

El jerarca dijo que ningún grupo de defensores de los animales se adjudicó el hecho, por lo que desde el principio se descartó un atentando como los que ha tenido Villa Dolores y el Parque Lecocq.

"El sistema de alambrado eléctrico fue cortado, por eso desde esta noche (por ayer) se reforzará el sistema de vigilancia", señaló Canessa, quien agregó que "no hay cámaras en la zona, al menos por el conocimiento que tenemos".

Fuentes vinculadas a la investigación consultadas por El País dijeron que testigos vieron previamente a los canguros (wallabies) en la Feria de Larravide. También indicaron que en la mañana de ayer dos jóvenes fueron vistos intentando escalar el muro del zoo a la altura Líber Arce y Rosell y Rius, donde fue cortado el tejido, quienes huyeron al verse descubiertos. "Tal vez iban por algo más o tal vez querían aprovechar a entrar porque el tejido estaba roto", dijeron las fuentes.

El principal zoo montevideano ha sido noticia varias veces por la desaparición de animales. En 2014 fue un ave que tenía un costo de cientos de dólares. Y hace tres años, luego de una incursión de un grupo de activistas, desapareció un tucán.

También se habían robado un año antes un guacamayo, que la Policía pudo recuperar. En ese entonces, los ladrones rompieron el candado de la jaula donde estaba el animal y se lo llevaron. Se trataba del único ejemplar rojo que poseía el zoo y su valor en el mercado negro era de unos US$ 2.500.

Otro caso sonado ocurrió hace pocos años, cuando algunos vecinos denunciaron el robo de cabras para prácticas religiosas, que eran retiradas envueltas en sábanas por encima de los muros.

En marzo de 2014, inspectores de la IMM y del Ministerio de Ganadería realizaron operativos conjuntos de incautación de animales protegidos que se estaban vendiendo en ferias en forma ilegal.

Los procedimientos se realizaron en las ferias de Tristán Narvaja y de la calle Avellaneda esquina Larravide, con participación de inspectores del Servicio Central de Inspección General de la Intendencia y de la División Áreas Protegidas y Fauna del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca.

Solamente en Tristán Narvaja se incautaron unas 20 jaulas con aves autóctonas y regionales de diferentes especies. En total, se retiraron de la venta unos 150 ejemplares de unas 30 diferentes especies de aves, tortugas, víboras, arañas, lagartos e iguanas, cuyo valor en el mercado podría alcanzar los $ 420.000.

Entre las especies incautadas, se encontraban algunas en peligro de extinción, como es el caso del cardenal amarillo, cuyo precio de venta al público en estas ferias oscila entre los $ 7.000 y $ 10.000. Todos los animales incautados fueron trasladados a la reserva de flora y fauna "Dr. Rodolfo Tálice", ubicada en Trinidad, departamento de Flores.

Inmediatamente de conocida la noticia del robo de los canguros, el edil nacionalista Diego Rodríguez Salomón envió un pedido de informes a la Intendencia de Montevideo. En el mismo recuerda que el 20 de julio del año pasado solicitó datos sobre el zoológico de Villa Dolores, intentando saber, entre otras cosas, cuántos animales había en el parque al momento que se dispuso el cierre del mismo. La respuesta que obtuvo en ese momento fue que disponía de 502 ejemplares, de 100 especies.

Con este nuevo pedido de informes, Rodríguez pretende saber "qué medidas preventivas ha tomado la Intendencia para el cuidado de los animales que existían en el zoo a efectos de evitar el hurto o desaparición de los canguros y otras especies".

También pregunta "en qué estado se encuentran las obras de remodelación de Villa Dolores" y "en qué fecha está prevista la reapertura".

Varios animales han desaparecido del zoo municipal en los últimos añosANDRÉS LÓPEZ REILLY