En julio de 2012 José Mujica era presidente pro tempore del Mercosur. En ese momento acuñó la frase "lo político por encima de lo jurídico", durante una cumbre en Mendoza, Argentina, para justificar el ingreso de la Venezuela de Hugo Chávez al bloque regional.

Esto pese a las reservas de Paraguay, que igual no tuvo ni voz ni voto en el asunto porque fue suspendido por sus socios debido a la destitución del presidente Fernando Lugo por parte del Senado guaraní.

Esa frase marcó el resto de la gestión internacional del gobierno de Mujica y lo tuvo fuertemente enfrentado con la oposición. Ayer, el gobierno que encabeza desde el domingo 1° el presidente Tabaré Vázquez mandó una señal clara de que las cosas en política internacional van a cambiar. En su discurso de asunción, ante representantes de todos los partidos políticos, el nuevo canciller Rodolfo Nin Novoa anunció que no se "caerá en la tentación" de "privilegiar la política al derecho". No fue necesario explicarle a nadie a qué se refería Nin Novoa. Atento, en primera fila, lo escuchaba su antecesor, Luis Almagro, que durante los últimos cinco años siguió a pie juntillas la línea de Mujica.

Los partidos de la oposición coincidieron con el cambio que implementará el gobierno de Vázquez y con la valoración del nuevo canciller, que en su discurso se apoyó dos veces en la gestión internacional de Luis Alberto de Herrera, que definió como parte de "la mejor historia" del Uruguay.

Nin Novoa "enterró la doctrina de que lo político puede estar sobre lo jurídico", dijo a El País el diputado y exvicanciller colorado Ope Pasquet, que destacó la "señal de que este gobierno se ajustará siempre al derecho internacional".

El senador blanco Jorge Larrañaga (Alianza Nacional) asistió a la asunción del canciller, la única imposición de un ministro de Vázquez en la que estuvo presente. "Fui porque quise dar una señal de que más allá de las diferencias debe estar el diálogo", explicó Larrañaga a El País.

Nin Novoa tiene un pasado en el Partido Nacional, incluyendo diez años como intendente de Cerro Largo, hasta que se alió al Frente Amplio y fue por tres veces compañero de fórmula de Vázquez.

Larrañaga compartió el discurso de Nin Novoa. "Cuando el canciller dice que lo jurídico está por encima de lo político, está dentro del concepto de república que nosotros hemos postulado", comentó el senador blanco a El País.

El acto de asunción de Nin Novoa tuvo una amplitud pluripartidaria como no se recuerda en la Cancillería. Estaban las máximas autoridades de los cuatro partidos políticos con representación en el Senado: Mónica Xavier (Frente Amplio), Luis Alberto Heber (Partido Nacional), Germán Cardoso (Partido Colorado) y Pablo Mieres (Partido Independiente). Además de los cancilleres de los últimos 30 años: Enrique Iglesias, Didier Opertti, Sergio Abreu, Álvaro Ramos, Gonzalo Fernández y Almagro, hoy senador. Reinaldo Gargano y Luis Barrios Tassano fallecieron.

Asimismo asistieron los exsubsecretarios Ope Pasquet, Jaime Mezzera y Roberto Conde. Belela Herrera no asistió por un compromiso familiar.

El discurso de Nin Novoa fue seguido atentamente por algunos de los principales jerarcas de la nueva administración Vázquez, como el prosecretario de Presidencia, Juan Andrés Roballo, varios ministros y el encargado de la comunicación oficial, José Luis Veiga, entre otros.

Nin Novoa se preocupó por la asistencia de los exministros y subsecretarios. Así, llamó por teléfono uno a uno invitándolos personalmente a la ceremonia.

Con el concepto de volver a poner lo jurídico y el derecho por encima de lo político, el canciller subrayó que se descartarán "las visiones ideológicas" a la hora de comerciar, en lo que se vio también como una referencia directa a Venezuela, de estrecha relación política con el gobierno de Mujica. Venezuela fue el país que más visitó el expresidente durante sus cinco años de gestión.

Nin Novoa dijo que se debe actuar "con respeto a la libre determinación de los pueblos, por la solución pacífica de controversias, con integración comercial pero también productiva fundada en las necesidades de nuestros pueblos hermanos y no en visiones presuntamente ideológicas. Todo con la región, nada contra la región, pero con la exigencia del sinceramiento que obliga el actual contexto regional e internacional", afirmó.

Luego advirtió que "no podemos quedar afuera de los grandes flujos comerciales. Si las prácticas proteccionistas las hemos rechazado cuando las practican los países poderosos, resultan aun más inadmisibles cuando las sufrimos de países hermanados por la historia", en alusión a las políticas comerciales de Argentina y Brasil.

"A nuestro juicio, los procesos de integración en América Latina no han alcanzado el desarrollo esperado y exigen sinceramientos impostergables", dijo Nin Novoa.

El "Mercosur que se sincere. Que deje atrás la retórica vacía, que apueste a las concreciones y no a los discursos que luego no se cumplen", insistió en medio de aplausos.

Uno de los anuncios del canciller Rodolfo Nin Novoa que más complació a la oposición fue la creación de "un espacio de diálogo y consulta para intercambiar opiniones" sobre los temas de la política exterior. "La política exterior debe ser de Estado, donde quepan todas las opiniones y donde se puedan volcar los matices", afirmó Nin Novoa.

El diputado y exvicecanciller colorado Ope Pasquet apoyó la iniciativa del nuevo ministro. "Esto muestra un buen comienzo, voluntad de diálogo y la intención de escuchar opiniones diferentes para construir una política exterior de Estado", dijo Pasquet. Para el legislador, Nin Novoa ratificó la voluntad integracionista pero destacó su referencia a que debe haber un sinceramiento entre los países.

El senador nacionalista Jorge Larrañaga aseguró que "la política exterior no debe quedar en manos de un solo partido, por más que tenga mayorías parlamentarias".

La primera fila del acto de asunción del nuevo canciller fue reservada para los excancilleres Enrique Iglesias, Sergio Abreu, Didier Opertti, Álvaro Ramos, Gonzalo Fernández y Luis Almagro, que finalizó su gestión de cinco años el domingo 1° y que hoy asumirá una banca en el Senado. Nin Novoa llamó a cada uno para asegurarse su presencia.

Muchos representantes políticos tanto de la oposición como del gobierno del Frente Amplio se dieron cita en el Palacio Santos. Uno de ellos fue el senador nacionalista Jorge Larrañaga quien fue saludado por Danilo Astori, desde mañana ministro de Economía. Ambos sostuvieron un animado diálogo antes de la ceremonia.

El funcionamiento del Mercosur le preocupa bastante al nuevo gobierno, según lo reflejó el canciller Rodolfo Nin Novoa. A un punto tal que sugirió que Uruguay tiene intenciones de negociar por fuera con "una agenda activa que rompa el encierro" en la región.

"Los procesos de integración en América Latina no han alcanzado el desarrollo esperado y se necesitan sinceramientos impostergables para poder estar a la altura de los desafíos del contexto internacional actual", recalcó Nin Novoa.

Luego afirmó que "queremos un Mercosur que se sincere, que deje atrás la retórica vacía, que apueste a las concreciones y no a los discursos que no se cumplen, queremos un Mercosur que se plantee objetivos y acuerdos viables, si es necesario que ajuste sus objetivos a las necesidades actuales, con una agenda externa activa que rompa con el encierro".

Hablando sobre la región, Nin Novoa sostuvo que "juntos podemos disfrutar mejor una inserción internacional competitiva, pero si no podemos o queremos hacerlo juntos, hagámoslo sí los que queremos hacerlo".

Afirmó que personalidades de todos los partidos constituyen "nuestra mejor historia", mencionando la tradición nacional en política exterior llevada a cabo por Luis Alberto de Herrera, Baltasar Brum, Carlos Quijano, Alberto Methol Ferré y Vivian Trías.

Luego subrayó que Uruguay "es internacional o no es. Y hace mucho tiempo que no existe un espacio para un Uruguay de fronteras abiertas y enfrentado al mundo".

En términos de definición de estrategias para la política exterior sostuvo que el gobierno no duda que el país "debe jugar bien en todas las canchas, la región será su primer eje de acción en la vieja lógica de los círculos concéntricos, que figuras como Herrera o Methol Ferré nos han legado y que tanta vigencia mantienen".

Uno de los mayores énfasis de Nin Novoa fue su intención de profesionalizar la gestión en Cancillería, algo que tanto blancos como colorados apoyaron.

Para el diputado Ope Pasquet (Vamos Uruguay) eso "marca un punto de inflexión, un viraje desde la excesiva politización de los últimos tiempos a un respeto a la Cancillería".

Nin Novoa reclamó que el Mercosur se sincere y deje los discursos vacíosDANIEL ISGLEAS