El Vaticano abrirá sus archivos de la época de la dictadura.

El papa Francisco se comprometió ayer ante el presidente Tabaré Vázquez a visitar Uruguay. El compromiso lo asumió en el transcurso de una audiencia en la que el sumo pontífice recibió al mandatario junto a su esposa y a uno de sus hijos.

"El Papa no fijó fecha, pero se comprometió a visitar el país", aseguró Vázquez, quien dialogó con la prensa en compañía del embajador uruguayo en Roma, Francisco José Ottonelli.

Vázquez le informó al Papa sobre la erradicación de la indigencia en Uruguay, así como la reducción de la pobreza en los últimos quince años, para afectar en la actualidad a menos de 10 % de la población.

"Uruguay reparte mejor la riqueza que genera y tiene el producto bruto interno por persona más alto de América Latina", expresó Vázquez quien comentó que Francisco se mostró muy interesado en el Plan Ceibal.

También dialogaron sobre la situación latinoamericana, en especial el proceso de paz firmado entre el gobierno y las guerrilleras Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia tras casi sesenta años de conflicto armado interno, y la situación política y social en Venezuela.

Un tema de interés para ambos fue la juventud y el respeto de los derechos humanos de los migrantes, según complementó Vázquez.

El presidente conversó en total 40 minutos a puerta cerrada con el pontífice argentino y un comunicado emitido por la Santa Sede indicó que "en el desarrollo de las conversaciones se han detenido en la situación política nacional y regional, con especial referencia al desarrollo de las instituciones democráticas y a la situación social y humanitaria del continente".

"Las cordiales conversaciones han puesto de manifiesto las buenas relaciones existentes entre la Santa Sede y Uruguay, así como el interés común por el desarrollo integral de la persona, el respeto de los derechos humanos y la paz social", sostiene el comunicado.

"Escuché que Mujica hablaba por radio de Evangelii gaudium", comentó el Papa al mandatario con tono satisfecho al mencionar al ex presidente José Mujica, conocido por sus posiciones de izquierda, quien al parecer comparte sus reflexiones espirituales.

"Los temas fueron rotando espontáneamente. No teníamos una agenda prefabricada o preparada", contó el mandatario tras confesar que el tiempo que estuvo con el pontífice "se me pasó rapidísimo".

En la conferencia de prensa, Vázquez adelantó que la embajada de Uruguay en el Vaticano comenzará las tareas preparatorias para el análisis de los archivos para ubicar más información que sirva a la investigación de los crímenes contra la humanidad perpetrados por la dictadura y el paradero de los detenidos desaparecidos.

"La idea mía es que lo más rápidamente posible se empiece a trabajar con los archivos del Vaticano. A más tardar a mediados de enero próximo", sostuvo.

Vázquez aseguró que en esta reunión el papa Francisco "se mostró totalmente dispuesto a apoyar la posición de Uruguay", en relación a la desclasificación de los documentos del Vaticano relativos a la dictadura militar en el país para "poder buscar información sobre desaparecidos".

"Me pidió que cuando hablara" con el secretario de Estado vaticano, el cardenal Pietro Parolin, "le planteara el tema para ver cómo, a través de nuestra Embajada aquí en el Vaticano", se podía proceder, señaló Vázquez.

De esta manera, una vez concluidas las conversaciones a puerta cerrada con el Papa, el presidente fue recibido por el secretario de Estado vaticano, a quien le trasladó el mensaje del pontífice.

Vázquez confirmó que Uruguay empieza ahora "con las tareas preparatorias para saber si en esos archivos hay datos que permitan avanzar en la búsqueda de ciudadanos y ciudadanas desaparecidos durante la dictadura militar". (AFP Y EFE)

El presidente uruguayo estuvo acompañado de su esposa, María Auxiliadora Delgado y de su hijo Álvaro, un exseminarista.

Durante el tradicional intercambio de regalos, Francisco le obsequió a Vázquez un medallón de la paz y sus tres encíclicas: Amoris laetitia, Laudato Si y Evangelii gaudium. Por su parte el presidente Vázquez regaló a Francisco una drusa de amatista uruguaya.

ENCUENTRO PROVECHOSO