"Los hermanos sean unidos, porque esa es la ley primera", decía el poeta argentino José Hernández en una estrofa del Martín Fierro; en Canelones, fue una antigua rivalidad de dos hermanos la que derivó en un drama en el que un hombre de 69 años perdió la vida y su hermano, de 75, terminó indagado por homicidio.

No se conoció el motivo concreto de la discusión, pero la investigación policial determinó que los hermanos mantenían mala relación desde hace varios años.

El personal policial de la Seccional 1ª de Canelones dijo que el homicida estaba ebrio —tal como lo constató la posterior espirometría— en el momento en que agarró un cuchillo y apuñaló varias veces a su hermano.

Los efectivos policiales recibieron una llamada a través del servicio de emergencias 911, denunciando que en una casa de la calle Baltasar Brum esquina Santos Pérez se encontraba una persona herida.

Cuando concurrieron al lugar, ubicado en las proximidades del frigorífico Canelones, encontraron en el patio de la casa al homicida, caído en el piso y con un corte en el brazo. En ese momento, el hombre les indicó a los policías que adentro de la vivienda estaba su hermano muerto.

Los efectivos encontraron al hermano tirado en el suelo con varias puñaladas en el cuerpo. Luego de dar aviso a la emergencia móvil, se constató su fallecimiento.

Los hermanos compartían un asado con otro hermano mayor, de 78, que también reside en la casa y que se escondió cuando comenzó la agresión.

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