Empresarios le escapan a la mayor carta tributaria y al ausentismo laboral.
En estos días el ministro de Trabajo, Ernesto Murro, reconoció su preocupación porque hay empresas uruguayas que se van a Paraguay, a las que no ha podido disuadir de que lo hagan. Y atribuyó esta situación a que en el país guaraní "el desarrollo de normas laborales, de normas de seguridad social y libertad sindical es muy bajo".
El director nacional de Trabajo, Juan Castillo, también se refirió a esto hace poco durante un foro organizado por la Intendencia de Canelones. "Ahora parece que está de moda Paraguay. Es posible que sean más baratos los costos laborales aunque no sé si existe la misma certeza jurídica", dijo Castillo.
Pero algo hay en el ambiente. En la Cámara de Industrias del Uruguay se comenta lo ocurrido con la empresa de autopartes Yazaki, de capitales japoneses, que tiene una planta en Las Piedras, Canelones, cuya actividad se ha reducido. Parte de la actividad, que involucraba a cientos de trabajadores, se habría trasladado a Paraguay donde los costos laborales equivalen aproximadamente al 25%. La empresa se lamentaba de los frecuentes conflictos laborales y de un ausentismo que rondaba el 25%.
Las cámaras empresariales plantean crecientemente su preocupación por el ausentismo laboral. La pasada semana Hugo Avegno, directivo de la Asociación de Supermercados, calculó que en su sector el ausentismo ronda el 20%. Mauro Riverón, dirigente del sindicato del comercio, admite el problema y reconoce que el pago de partidas por presentismo no lo ha resuelto. "Es cierto el problema del ausentismo. Hay jóvenes que no visualizan la cuestión del empleo como algo a proteger. Ese es un dato de la realidad", sostuvo.
Tierra para invertir.
La inversión uruguaya en Paraguay, que desde hace años es importante en el sector agropecuario y fundamentalmente en la ganadería, ha crecido también en otros rubros.
Paraguay se expandió, tras un bache de 1,2% en 2012, un 14% en 2013, un 4,7% en 2014 y un 3% en 2015.
El embajador paraguayo en Uruguay, Luis Chase, atribuye lo que está ocurriendo en parte a lo que se denominan los "tres 10": 10% de IVA, 10% de Impuesto a la Renta Empresarial y 10% de Impuesto a la Renta Personal. Este último grava solamente a las familias de ingresos muy altos.
La carga tributaria es claramente inferior a la uruguaya (aquí el IVA está en 22%) y a la argentina. Además, Paraguay tiene un régimen de "maquila" que garantiza una carga impositiva todavía menor.
Chase dijo a El País que Paraguay "vive un gran despegue económico" y que hay unos 15.000 uruguayos invirtiendo allí. El diplomático sostiene que "en su país hay un justo equilibrio entre capital y trabajo y existen pocos conflictos laborales", aunque negó que los trabajadores estén desprotegidos.
"No creo que el salario mínimo sea superior aquí que allá", señaló. De hecho, el salario mínimo es superior en Uruguay. Desde el pasado 1° de julio está en $11.150 (unos US$381 al día de hoy). En Paraguay hoy el salario mínimo equivale a US$322. "Se facilita la inversión, se la protege, no se puede incautar", resumió. Como otra ventaja de Paraguay destaca que más del 30% de la población tiene menos de 29 años. "Los inversores se asombran de cómo aprende el trabajador paraguayo, de su empeño y lealtad porque entiende que su suerte tiene que ver con la de la empresa", sostuvo el diplomático.
Chase destaca también que hay inversión uruguaya en el sector de la construcción y que "hemos notado que los uruguayos vienen y van permanentemente y hay muchas parejas mixtas".
En cuanto al agro, hay al menos 2 millones de hectáreas guaraníes propiedad de productores uruguayos.
"En Paraguay hay un afecto especial por el uruguayo. En Asunción tenemos un boulevard Artigas, la Plaza Uruguaya, las calles Luis Alberto de Herrera, Máximo Santos, Eduardo Víctor Haedo. No hay problemas con la documentación, se pueden abrir cuentas en dólares, yenes, euros. Se pueden comprar inmuebles, se va a la escribanía y allí se hace todo", detalló.
El asesor uruguayo de inversores Diego Vallarino, que viaja frecuentemente a Asunción y que tiene frecuentes contactos con el equipo económico del país guaraní, comentó que "Paraguay está de moda" y que en los últimos cuatro o cinco años, una cincuentena de empresas uruguayas se instalaron allí. Esta cifra incluye las más importantes de servicios profesionales (contables, logísticas, servicios genéricos). Destacó que además de en centros comerciales, hay inversión uruguaya en la principal terminal de autobuses de Asunción y también hay presencia de franquicias locales, como La Pasiva. "Hay mucha construcción, mucha liquidez", sostuvo
"Paraguay es el país que más crece en la región. Tiene costos mucho más bajos pero no es solo por eso. Los sueldos son más bajos, pero no es eso lo que define la situación sino todo el clima de negocios que se estabilizó. La ley de promoción de inversiones es similar a la nuestra pero allá la inversión industrial se hace más rentable. La electricidad es muy barata (por sus enormes represas) y eso es una ventaja comparativa si la empresa es intensiva en energía", detalló.
La Bolsa de Valores de Asunción ha visto crecer mucho su operativa en los últimos años.
En otros campos, Paraguay también está tomando ventaja. Universidades alemanas se han instalado en Paraguay y transfieren "know how", y la Unión Industrial Paraguaya es "cuasi alemana". "Los menonitas de origen alemán dominan la industria láctea que es muy fuerte y eso hace que esa industria esté en el radar europeo", señaló Vallarino. "Cuando los inversores uruguayos van a Paraguay vuelven diciendo que hay mucho para hacer allá", resumió.
Inicio de ronda salarial en un contexto de pérdida de empleo.
La preocupación del gobierno por las empresas locales que deciden emigrar, se da a las puertas de la mayor ronda salarial de este período. El viernes el presidente Tabaré Vázquez recibió a directivos de la Cámara de Comercio, a los que explicó qué lo llevó a aceptar un aumento de las pautas salariales como venía pidiendo el Pit-Cnt.
Vázquez les dijo a los empresarios que tomó la decisión de modificar los lineamientos salariales para evitar que una caída en términos reales de las remuneraciones de los trabajadores deprimiese más la demanda interna. Sin embargo, los empresarios le dijeron que los lineamientos ponen en peligro los empleos, en un momento en que no hay indicios de reactivación.
La gremial empresarial le transmitió al presidente que en los primeros seis meses del año se perdieron 10.114 empleos en el sector comercial con respecto a la primera mitad de 2015, el 3,3% de los que existían en el rubro en la primera mitad del año pasado. En el conjunto de la economía se perdieron 17.000 empleos en la primera mitad del año.
SITUACIÓN EN EL MERCOSURJUAN PABLO CORREA