“Los derechos sociales hoy reclaman que eso exista”, afirmó Villarreal.

Una serie de facultades de la Universidad de la República (Udelar) unirán fuerzas para estudiar la viabilidad de que Uruguay genere un sistema de renta básica, a instancias del Secretario de Derechos Humanos, Nelson Villarreal.

En la red participan entre otros, el decano de la facultad de Ciencias Económicas, Rodrigo Arim, la investigadora Andrea Vigorito, el politólogo José Busquets y Christian Mirza, interlocutor del gobierno con los refugiados que llegaron procedentes de Guantánamo, entre otros, que tienen matices respecto al punto pero consideran que se debe estudiar.

La renta básica se define como un ingreso pagado por el Estado a cada integrante de una sociedad incluso si no quiere trabajar de forma remunerada.

Villarreal explicó a El País que, en su opinión, "los derechos sociales reclaman que hoy exista un monto que no esté condicionado, para dar sustento a la supervivencia".

"No podemos construir derechos humanos que solo quedan remitidos al presente y al pasado. Hay que abrir la mirada al futuro y en esa perspectiva, todos sabemos que la sustentabilidad de la democracia está en la distribución básica de recursos", opinó.

"¿Porqué no pensar en una sociedad que va al Sistema Nacional de Cuidados y al envejecimiento que exista la posibilidad de un sustento para que la gente tenga estabilidad? Hablamos de renta básica. Si quiero tener renta media voy a tener que tener un empleo", razonó Villarreal.

"Muchos trabajan para consumir. La renta básica tiene que estar ligada a otros incentivos. ¿Porque no hacerlo socialmente, hacer que haya un mínimo que habilite a buscar la innovación como propone Mark Zuckerberg (creador de la red social Facebook)? Hay que ver qué modelo potencia más la integración social", comentó.

Villarreal es escéptico respecto a las transferencias condicionadas como las asignaciones familiares cuyo pago depende de la concurrencia de los niños de las familias que las reciben a la escuela y a controles médicos. "A mí cuando me devuelven el IRPF en agosto no me preguntarán que hago con la plata. Ni al productor cuando se le devuelve la plata se le pregunta que va a hacer con esa plata. Tampoco a los pobres tenemos que preguntarles qué hacen. Las asignaciones tiene un límite, está demostrado que los que no quieren ir (a la escuela y a controles de salud) van a violentarlo siempre y el porcentaje es menor. Una burocracia para perseguir a las personas para que hagan algo…".

ESTUDIARÁN VIABILIDAD