El presidente Tabaré Vázquez le anunció ayer a los partidos de oposición que la próxima semana convocará a organizaciones sociales que han trabajado en el tema del consumo de alcohol a fin de acordar una ley de consenso para combatir esta adicción.

Para Vázquez el consumo de alcohol es un "tema prioritario", según trasmitió a la oposición ayer en la Torre Ejecutiva.

El presidente sacó el tema cuando el diputado blanco Jorge Gandini le planteó que el Partido Nacional estaba a disposición para hacer algunos cambios en la ley de regulación del consumo de marihuana. Vázquez dijo que la ley de la marihuana no tendrá cambios, pero sí anunció su idea de combatir el alcoholismo. "A propósito del tema de las drogas, vamos a trabajar mucho con el alcohol", dijo Vázquez, según participantes en la reunión.

"Probablemente la semana que viene formaremos un grupo de trabajo con distintos actores de la sociedad civil, que han estado trabajando en el tema, para luego sacar una ley de consenso", explicó el mandatario.

De todos modos, el presidente dijo que no va a perseguir el consumo. "No vamos a perseguir el consumo, no vamos a perseguir a la gente, no es eso, pero sí hay que tomar medidas y regularlo. Por eso el grupo de trabajo", subrayó Vázquez.

Además, adelantó que va a convocar a la senadora nacionalista Verónica Alonso porque tiene "ideas al respecto".

Acerca de la ley de la marihuana, Vázquez explicó a los legisladores de la oposición que "se está poniendo en marcha" y que será "evaluada" por el gobierno. "Veremos, y en función de eso actuaremos", sintetizó.

A su vez, ante los periodistas, el vicepresidente Raúl Sendic afirmó que el gobierno "no revisará" la ley de marihuana.

Vázquez les aclaró tanto a los frenteamplistas como a los legisladores de la oposición que el gobierno no tiene intenciones de enviar al Parlamento leyes de urgente consideración. "Tenemos apuro por algunos proyectos pero el Parlamento se tomará el tiempo que necesite, salvo una situación extrema", precisó el presidente.

El arsenal contra las bebidas alcohólicas está en fase de preparación pero ya se sabe que incluirá medida para restringir el acceso a la sustancia, limitaciones publicitarias, nuevas exigencias para los vendedores que incluyen licencias especiales y pagadas, fuertes sanciones para quienes expendan a menores de edad y aumento de impuestos, aunque se reconoce que este último aspecto, si bien es ineludible, es el más delicado y difícil de aplicar.

Combatir la ingesta problemática de alcohol desde el Estado reviste características más complejas que la regulación del tabaco o, incluso, del cannabis. Vázquez quiso abordar el tema durante su primer mandato pero no avanzó.

En el gobierno de José Mujica también se intentó. Incluso se envió un proyecto de ley pero la dinámica parlamentaria, que ya había concentrado muchas energías en la regulación de la venta de marihuana, lo dejó por el camino.

"Esta vez, la diferencia es que el presidente Vázquez ha colocado este tema como una prioridad de gestión en su agenda política de salud y lo empujará personalmente. Vamos por un urgente consenso nacional para abatir el consumo nocivo de alcohol", explicó a El País esta semana el flamante secretario de la Junta Nacional de Drogas (JND), Milton Romani.

Serán la Junta y el Ministerio de Salud Pública los encargados de diseñar una estrategia. Se explicó que lo que se prepara es comparable con lo que en su momento se hizo con el tabaquismo por la importancia que se le adjudica y la energía con la que se trabajará, aunque Romani aclaró que las medidas no pueden calcarse.

Un 10% de los uruguayos hace un uso riesgoso del consumo de alcohol, un 7% tiene un consumo abusivo y un 5% sufre graves problemas de dependencia, explicó Romani.

Según una encuesta que divulgó en diciembre la Junta Nacional de Drogas sobre el consumo entre estudiantes, bajó el de alcohol y subió el de marihuana. Casi la mitad de los estudiantes consume alcohol antes de los 15 años, uno de cada 6 lo hace con cigarrillos y uno de cada 12 con marihuana. Respecto a las edades promedio de inicio de consumo, entre quienes lo hacen, el sondeo reveló que es 12,8 años para el alcohol, 13,7 para el cigarrillo y 14,7 para la marihuana.

El exsecretario de la Junta Nacional de Drogas, Julio Calzada, destacó entonces "el descenso en el uso de alcohol en adolescentes y particularmente los usos problemáticos". Esto se deriva de que "los adolescentes que se incorporan al consumo son menos".

En paralelo, Calzada dijo que se produjo "cierto aumento" en el consumo de marihuana entre adolescentes, pero descartó que esto se deba, en principio, a la aprobación de la ley en 2013. "Entendemos que no es por un impacto primario de la ley sino por dar continuidad a la línea de crecimiento de consumo que ya venimos teniendo", afirmó.

El exsecretario de la Junta de Drogas sostuvo que el universo de análisis —que abarcó 11.000 jóvenes entre 17 y 19 años— se mantiene a lo largo de los años dado que el objetivo de las autoridades es "evaluar si efectivamente hay o no un impacto en la forma de consumo de marihuana producto de la ley que se aprobó en 2013".

Gobierno no prevé cambios en la ley de la marihuana