El presidente de EE.UU. y el primer ministro Netanyahu se reunirán en febrero.

Israel relanzó este domingo la construcción de colonias al aprobar cientos de proyectos de viviendas en Jerusalén Este, horas antes de que Donald Trump invitara al primer ministro Benjamin Netanyahu a Washington en febrero.

En una conversación telefónica, el presidente de Estados Unidos y el primer ministro israelí hablaron sobre Irán, y consideraron que las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos solo pueden "negociarse directamente". Los dos líderes "acordaron seguir consultando de cerca una serie de cuestiones regionales, entre ellas las amenazas que plantea Irán", según un comunicado de la Casa Blanca, mostrando la línea dura con Teherán de la nueva administración de Estados Unidos.

Trump invitó a Netanyahu a Washington en febrero, indicó la oficina del Primer ministro israelí. "Una fecha final será fijada en los días anteriores" a la visita, precisó la oficina de Netanyahu. Trump, por su parte, solo dijo a periodistas en la Casa Blanca que la conversación fue "muy buena".

El ayuntamiento israelí de Jerusalén dio la aprobación definitiva para la construcción de 566 viviendas en tres barrios de colonos del este de la ciudad, de población mayoritariamente árabe. Paralelamente, el ala más dura de la derecha en el poder en Israel lanzó una campaña de presión contra Netanyahu a favor de una anexión de Maalé Adumim, una importante colonia de la Cisjordania ocupada.

Según un proyecto de ley presentado por dos diputados de la mayoría parlamentaria, Israel anexionaría Maalé Adumim así como un sector que uniría esta colonia con Jerusalén. Esta decisión cortaría en dos a Cisjordania y haría prácticamente imposible la creación de un Estado palestino viable. Situada al este de Jerusalén y creada en 1975, Maalé Adumim es la tercera colonia más poblada de Cisjordania.

En Jerusalén Este, a petición de Netanyahu y a la espera de la llegada de Trump a la Casa Blanca, a finales de diciembre se habían congelado los permisos de construcción de viviendas, explicó a la AFP Meir Turjeman, presidente de la comisión de construcción y planificación del ayuntamiento de Jerusalén. Estas viviendas se construirán ahora en los barrios de colonos de Pisgat Zeev, Ramot y Ramat Shlomo, precisó.

"Las reglas del juego han cambiado con la llegada de Donald Trump al poder. Ya no tenemos las manos atadas, como en la época de Barack Obama", afirmó Turjeman. "Estas 566 viviendas solo son el pistoletazo de salida. Tenemos planes para construir 11.000 viviendas a la espera de ser autorizados", en los barrios de colonos de Jerusalén Este, agregó.

La respuesta palestina no se hizo esperar: "la decisión israelí es un desafío al Consejo de Seguridad (de la ONU), sobre todo tras su reciente votación en la que afirma el carácter ilegal de las colonias", se indignó Nabil Abu Rudeina, portavoz de la presidencia palestina.

"Exigimos que el Consejo de Seguridad actúe en conformidad con esta resolución, para detener al gobierno extremista israelí que destruye toda posibilidad de alcanzar una solución con dos Estados", agregó.

El alcalde de Jerusalén, Nir Barkat, precisó además en un comunicado que también se construirán 105 viviendas en los barrios palestinos. "Hemos pasado ocho años difíciles con Barack Obama, que presionaba para que se congelaran las construcciones", añadió el alcalde.

Unos 430.000 colonos israelíes viven actualmente en la Cisjordania ocupada y más de 200.000 en Jerusalén Este, que los palestinos quieren que sea la capital del Estado al que aspiran.

Netanyahu precisó que las relaciones con los palestinos solo es uno de los temas, junto con "la situación en Siria y la amenaza iraní".

Según él, "la primera prioridad del Estado de Israel es levantar la amenaza que supone el mal acuerdo nuclear cerrado con Irán". Netanyahu dirigió una virulenta campaña contra el acuerdo al que llegaron, en julio de 2015, Irán y las grandes potencias (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania, auspiciado por la ONU) para garantizar la naturaleza pacífica del programa nuclear iraní a cambio de un levantamiento progresivo de las sanciones económicas contra Teherán.

Antes de llegar a la Casa Blanca, Trump afirmó que ese texto era "uno de los peores acuerdos".

Netanyahu dijo ayer lunes que la investidura de Trump en Estados Unidos es una "oportunidad formidable" para Israel, pero pidió moderación a sus aliados de derecha.

Tras ocho años de "presiones enormes" ejercidas por la administración Obama a Israel sobre el tema de Irán y las colonias, "estamos frente a una oportunidad favorable para la seguridad y el futuro del Estado de Israel, pero eso exige sentido de la responsabilidad y prudencia de nuestra parte, para no perder esta oportunidad", dijo a los diputados de su partido, el Likud.

Netanyahu, que encabeza el gobierno más derechista de la historia de Israel, está confrontado al forcejeo de sus aliados.

El Tribunal Supremo de Israel resolvió que el gobierno israelí detenga cualquier operación próxima al pueblo palestino de Silwad, en Cisjordania, donde está previsto que se trasladen veinticuatro familias de la colonia judía de Amoná. Según informó ayer en un comunicado la organización israelí de defensa de los derechos humanos, Yesh Din, el Supremo ha emitido una orden que prohíbe a Israel "asumir el control de estas parcelas en parte o en su totalidad". Además, le insta a "abstenerse de realizar cualquier tipo de construcción sobre las parcelas de los peticionarios, incluyendo la instalación de estructuras, trabajos preparatorios o cualquier acción que pueda cambiar el estado actual de las tierras hasta que la Corte administre otra decisión". Los palestinos quieren impedir que veinticuatro de las cuarenta familias de Amoná pasen a vivir en unos terrenos que han sido calificado de "abandonados" por Israel. EFE

Estados Unidos está abierto a llevar a cabo operaciones militares conjuntas con Rusia contra los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) en Siria, afirmó este lunes el portavoz de la Casa Blanca.

Arabia Saudita felicitó a Trump luego de su posesión y deseó "desarrollar y reforzar las relaciones con Estados Unidos en todos sus campos", según el Consejo de ministros saudí, presidido por el rey Salman.

Michael Flynn - Consejero de Seguridad.

Michael Flynn, consejero de Seguridad Nacional, está bajo vigilancia de la contrainteligencia, al probarse que mantuvo comunicaciones con funcionarios de Rusia, reveló el diario Wall Street Journal.

El jefe del equipo negociador de las FARC, Luciano Marín, dijo que espera que Trump mantenga su respaldo al proceso de paz de Colombia. El futuro secretario de Estado, Rex Tillerson, quiere revisarlo.

LOS PRIMEROS PASOS DE TRUMP