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Es una tendencia que crece en el mundo y que en balnearios europeos hace años que se lleva; o más bien, no se lleva. Ir a la playa como Dios nos trajo al mundo es para muchos un placer y hasta un estilo de vida. En Punta del Este, la playa Chihuahua alberga desde hace años a quienes les gusta tomar sol y bañarse en el mar sin siquiera una tanga. Pues bien, ahora, para todos quienes el nudismo es una forma de hacer turismo cuentan con un resort "all inclusive" para parejas heterosexuales que deseen, o no, vestir ropas.

"Es una forma de hotelería que se está desarrollando en todo el mundo y en las cercanías casi no existen opciones, salvo en México. Este es el primer resort nudista de Sudamérica", señala el presidente del Complejo Chihuahua, Alejandro Gamella, quien además sostiene que su emprendimiento está considerado como el segundo mejor del mundo en su rubro.

Los turistas que se han acercado hasta el flamante cuatro estrellas esteño son en su gran mayoría argentinos, chilenos, colombianos, norteamericanos, holandeses, dinamarqueses, brasileños y, apenas con un pequeño cinco por ciento, aparecen los tímidos uruguayos.

El resort cuenta con 36 amplias habitaciones, de 35 metros cuadrados, decoradas en tonos blanco, negro, bordó o gris, y con estilo muy minimalista, aunque no falta el plasma, el escritorio y el frigobar. Algunas dan sobre un canal de agua al que uno se puede zambullir y nadar hasta las piscinas centrales. Otras, tienen terrazas o vista al frente.

Las áreas destinadas a las varias piscinas -dos climatizadas, un jacuzzi y una pileta en la discoteca- cuentan además con quinchos con bares donde se sirven jugos y tragos, snack bar para el after beach, ideal para comer pizzetas, disfrutar de bebidas alcohólicas y hasta bailar al aire libre, voley acuático, cancha de minigolf y de tejo.

Asimismo, además del restaurante principal con cocina internacional buffet, la gastronomía es una de los platos fuertes del restó en otro espacio con barbacoa donde se sirve parrilla dos veces a la semana, snack bar con comidas rápidas mediodía y tarde y el bar de la piscina que se ambienta lindo al caer el sol. "La gente que viene aquí es muy divertida, tanto que muchas veces armamos mesas largas porque quieren conocerse, interactuar. Tan bien la pasan que muchas veces prefieren quedarse el día entero en el hotel, y no salir ni siquiera a la playa", explica Alejandro Gamella. De todas maneras, para quienes quieren mayor privacidad, el espacio es amplio y muy ambientado, con mesas para dos, velas y todo lo adecuado para pasar una excelente velada.

El resort también cuenta con un gran spa, ideal para relajarse con masajes, o para realizar todo tipo de ejercicios con aparatos de última tecnología.

Otro dato importante viene de la mano del "all inclusive". No existe el dinero luego de ingresar en las instalaciones del hotel. Absolutamente todo está incluido, incluso bebidas premium (etiqueta negra). Las habitaciones tienen un costo de U$S 320 por día durante la semana y U$S 430 en fines de semana.

Pero tal ha sido la acogida del nuevo emprendimiento nudista que algunos se acercan únicamente a pasar un rato: U$S 100 dólares el día por pareja para piscinas, y U$S 150 con cena y discoteca. Para eso hay baños especiales, con vestidores, duchas, toallas y lockers para que los turistas se puedan sentir a sus anchas.

A la carta. Con una larga trayectoria en el rubro gastronómico, Alejandro Gamella no dejó detalle al azar en esa área, fundamentalmente teniendo en cuenta que se trata de un resort all inclusive. En el restaurante principal se ha realizado una selección de los mejores platos de los chefs para satisfacer paladares muy exigentes.

"Realmente cada carta está estrictamente estudiada y seleccionada por mi, con platos de primerísima calidad en pastas, carnes, tacos, salsas, canastas crocantes, y unos postres realmente espectaculares guiados por el omelette surprise. Ni que hablar de la mousse de chocolate o dulce de leche", apunta, y asegura que el trago para este verano es un suave daikiri de frutilla.

"He recorrido todos los hoteles de este tipo del mundo, y he sacado lo mejor de cada uno", cuenta Gamella, quien de otros resorts ha sacado ideas como los canales de agua que rodean las habitaciones, el bar en la piscina (similar al reconocido europeo Hedonis).

El complejo se encuentra a una cuadra de la playa de igual nombre, donde se encuentra el Chihuahua Club de playa con servicio de traslado, reposeras y sombrillas, además de bebidas y snacks.

"Todo esto ha sido posible gracias a una legislación que apoya este tipo de turismo y una gran recepción del Ministerio (de Turismo) para realizarlo, dado que esta cartera se ha dado cuenta la gran demanda de huéspedes que están teniendo este tipo de hoteles", asegura el presidente del Complejo, y señala que desde el Gobierno se ha realizado promoción del emprendimiento en ferias en el exterior resaltando su calidad de primer resort de este tipo en Sudamérica.

MOVIDA. La noche adquiere otra temperatura con fiestas temáticas, en una disco que incluye pileta, livings, una gran barra y telas por doquier. La última realizada fue un éxito: la Fiesta Romana. "Nadie podía entrar sino vestía una toga que se le otorgaba. Luego se le daban tijeras para que las cortaran o reformaran como quisieran", dice, entre risas, Gamella.

Y para esa fiesta de toga fueron invitados cuarenta periodistas argentinos que, primero se encontraban algo recelosos, y luego la pasaron bomba.

Para las semanas de enero se preparan parties de lencería, de colegialas traviesas y de ángeles y demonios, entre otras.

MANDAMIENTOS. Primer mito que el responsable del hotel quiere desterrar: el huésped es completamente libre de estar vestido o no: "Es absolutamente opcional". Que nadie espere algo así como un edificio tomado por el "destape" ni imágenes dignas de Tinto Brass.

En segundo lugar, Gamella señala que el personal del resort se encuentra de uniforme o informal, según el área que atienda, y además no puede, de ninguna manera, interactuar con los húespedes salvo para los servicios normales de cualquier resort.

Tercero: El nudismo está permitido en los sectores de apartamentos, piscinas y alrededores, y spa. Tanto en el restaurante como en el hall principal y lobby se determinó que los huéspedes deben estar vestidos.

Cuarto: No están permitidas las relaciones sexuales en las áreas públicas, sólo en habitaciones.

"Y por supuesto, parecerá obvio pero vale recalcarlo, nada de drogas o algo que se le parezca. Asimismo, en este tipo de hoteles la higiene es importantísima y la cuidamos al máximo. Por todos lados están cientos de toallas, batas, para que el huésped se sienta cómodo", agrega el presidente del Complejo Chihuahua.

Este empresario señala que generalmente el turista que se acerca a este tipo de resorts, "tiene un perfil tranquilo, de respeto, son matrimonios o parejas estables, y generalmente se inclinan por un estilo de vida saludable en base a jugos naturales y comidas sanas".

El complejo Chihuahua resort cuenta con otro hotel temático gay friendly, que en estos días está inaugurando discoteca y restaurante aparte. El mismo se denomina Paradise gay hotel all inclusive, y, según asegura Alejandro Gamella, su emprendimiento también responde a un turismo de gran demanda en el mundo cuya oferta no sólo escasea en Punta del Este sino en toda Sudamérica. "Te diría que también es el primer resort de estas características".

Se sabe que los huéspedes homosexuales representan una proporción importante del turismo en el mundo. Más allá de su número, son un público exigente y que gasta mucho dinero en sus vacaciones.