En calidad y productividad, Uruguay es el mejor mercado de nuestro grupo

| La reestructura que llevó a reducir la plantilla y eliminar productos, busca "un mayor equilibrio operativo" para crecer

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LUIS CUSTODIO

El Grupo Gloria de Perú se hizo con el control de Ecolat en mayo pasado y diseñó un año de correcciones a un plan anterior que considera erróneo. Sus representantes aseguran que no se trata de una inversión especulativa y que llegaron a Uruguay a incrementar su producción exportadora y desarrollar un mercado interno más competitivo.

El Ingeniero Mecánico Guillermo Flores, venezolano de nacimiento, es el Gerente General de Ecolat y está en el Grupo Gloria desde este año, aunque tiene 20 años de experiencia en el sector de alimentos en distintos países de la región.

Flores destaca que hacía un buen tiempo que el grupo venía "analizando las buenas condiciones" de Uruguay para el desarrollo de negocios, en especial en el sector lácteo. "Un país que ofrece muchas oportunidades y en el cual el grupo está apostando a recibir leche de esta cuenca, que tiene un crecimiento enorme y es altamente productiva", afirmó.

Para el grupo inversor peruano, Uruguay califica como un lugar que ofrece "condiciones para la inversión muy alentadoras en comparación a los demás países de la región".

Sin especulaciones

El ejecutivo tomó distancia de otros emprendimientos que pasaron por la compañía, haciendo hincapié en que Gloria "no es un grupo especulativo, como grupos anteriores que han estado aquí, que compran una empresa con el objetivo de venderla rápidamente".

"Nosotros apostamos al desarrollo de la empresa -afirmó- somos un grupo conocedor del sector que en el lugar que se instala desarrolla el mercado interno y en cada país donde está, es primera o segunda marca con distribución propia".

Aseguró que en los planes de Gloria está el objetivo de fortalecer la distribución interna, "con mayor eficiencia", apuntalando las marcas del grupo, pero tratándose de un mercado muy chico "las posibilidades de exportar son las que nos permiten fortalecer el mercado interno, al que hay que cuidar y hacer crecer, eso está en la estrategia del grupo".

Potencial exportador

El grupo empresarial tiene presencia en siete países y tradicionalmente, por su tamaño, toman las exportaciones del grupo en Perú como equivalentes a un octavo país. "La planta de leche elaborada que el grupo tiene en Lima es una de las más grandes del mundo en leche evaporada envasada en lata, un producto líder que llega a 80 mercados", dijo.

La leche evaporada envasada en latas es un producto que soporta grandes períodos de almacenamiento debido a los procesos de deshidratación realizados a la leche cruda, a los que se les quita cerca de un 60% del agua existente en la leche. Gloria lo vende en el Caribe y Centroamérica, África, sudeste asiático y algunos mercados europeos, lugares que no se caracterizan por disponer abundantemente del producto en natural. Haití es uno de los principales destinos, precisamente por las condiciones de este producto enlatado. Lo mismo ocurre con algunos mercados al sur del Sahara, en África.

Para tener una producción a ese nivel, que le permita a Gloria exportar en grandes cantidades, "necesariamente debemos buscar la producción de otros países, ya que Perú no se autoabastece del producto". De Uruguay se llevan leche en polvo, al igual que de Bolivia y de Argentina, para cubrir las necesidades de este producto.

El más productivo

Por tamaño y niveles de producción, la planta en Uruguay "está por encima de las que tenemos en Ecuador y Colombia y por debajo de Puerto Rico y Bolivia, donde están las filiales mayores. También Argentina está levemente por encima de la planta de Uruguay", explicó.

En Perú, a partir de la consolidación de varias marcas, el grupo ocupa el primer lugar del mercado local.

Si bien el Grupo Gloria es fuerte en quesos en Perú, "la fortaleza de Uruguay es aún mayor y eso es algo que queremos aprovechar -afirmó- Uruguay es por lejos, en esta industria, en materia de calidad y productividad, el mejor mercado de todos los que integran el grupo".

En comparación con la región, el ingeniero Flores sostiene que Uruguay "está muy bien", dado que industrializa el 70-80% de la leche que produce, "bastante por encima de Perú", remarcó.

"Sabemos que hay muchas empresas haciendo inversiones importantes para aumentar la capacidad de remisión, que buscan mejorar su participación en la exportación, por lo cual la industria estaría acompañando el muy buen crecimiento de la producción lechera", expresó.

Desarrollo local

En el mercado interno, Ecolat comercializa leche en sachet, yogures y postres, quesos y productos industriales para la industria de helados y confiterías, así como el suministro a restaurantes, en lo que denominan foods services.

Entiende que Uruguay muestra "una buena diversidad" en la industria láctea: desde compañías que producen caseína como Schreiber, otras varias y muy buenas que producen quesos, uno de los principales productos de valor agregado de Uruguay; también está Danone que importa los productos desde Argentina pero es un jugador muy importante y ha dinamizado la competencia en materia de postres y yogures obligando a la producción local; hay también proyectos de producción de suero de leche en polvo, hay otros de suero desmineralizado, lácteos para infantes, etcétera. Es un futuro muy alentador el de la industria láctea uruguaya", subrayó.

Flores destacó asimismo el grado de apertura que el sector uruguayo ha mostrado en los últimos años. "Tengo entendido que el sector se caracterizó históricamente por la hegemonía de un solo grupo productor, Conaprole.

En lo personal, pienso que no le hace bien a los mercados que haya un solo gran jugador. Los mercados están mejor con la libre competencia, donde los tamberos deben tener asegurada la colocación de su producción pero también los consumidores tienen que tener asegurado el acceso de todos los productos de calidad y en todos lados. Gracias a esa apertura y la competencia, el mercado uruguayo está creciendo fuerte", indicó.

A partir de la reestructura que Ecolat está llevando adelante, se resolvió discontinuar algunos productos. "Tuvimos que dar de baja algunas líneas de yogures y postres que no eran rentables para nuestra compañía, en una diversificación que hizo la administración pasada pero no tenía ningún sentido", argumentó.

Insistió en que se mantenía dentro del esquema productivo "una cantidad enorme de presentaciones que no tenían sus propias diferencias, y eso nos estaba generando más trabajo para tener menor volumen. Estamos discontinuando esos productos y evaluando cuáles se pueden incorporar en el futuro".

Replanteo comercial

Las críticas hacia la acción de Ecolat al suprimir esas líneas de producción apuntan a considerar que los que se retiraron eran productos de alto valor agregado. Flores reconoce que es así, pero advierte que "no nos salimos de todos, quedan los que son más rentables y de mayor volumen, y estratégicamente desde el punto de vista comercial, con más futuro. En el día de mañana factiblemente estemos fortaleciendo, pero haciendo una segmentación bien hecha y que cada producto nuevo tenga su espacio en el mercado", afirmó.

El ejecutivo de Ecolat rechaza que la compañía esté retirando posiciones en el país. "No estamos saliendo del mercado, es una reestructuración, queremos ser más competitivos".

Asimismo, aseguró que se están replanteando "toda la estructura comercial, hacer más eficientes los procesos de venta, cómo atendemos los clientes, cómo llegamos a ellos, qué servicios les damos, cuáles son los mejores portafolios que podemos armar, etc., aplicando la estrategia del grupo a nivel internacional y para ello debemos tomar medidas que quizá no gusten a todos".

"Por ejemplo, vender mil unidades de yogur de frutilla al mes, no genera rentabilidad sino una pérdida de tiempo a los vendedores. Estamos buscando un mejor equilibrio operativo para sustentar las nuevas inversiones que estamos proyectando", indicó.

Estas acciones del grupo inversor peruano en Ecolat fueron precedidas de un ajuste de personal (se dio un retiro incentivado a 70 de 436 trabajadores en total) que forma parte de la misma reestructura.

Flores explicó que esos desfasajes suceden porque "entramos a una empresa que estaba muy desequilibrada. Por eso el primer año será de reordenamiento operativo. Estamos, además, reestructurando la deuda a través de la banca privada en la plaza local".

Reglas de juego

Salvo en el aspecto laboral, Flores dice que se han encontrado con un contexto muy similar al de otros países de la región. "El marco normativo es claro y bien definido, en lo financiero hay un gran servicio y apertura, en lo político hay reglas de juego constantes en el tiempo".

Respecto de la normativa laboral puntualizó que "debemos entender la importancia de los gremios aquí, al igual que en Argentina. Eso es una diferencia con otros países", admitió. "De todos modos, el marco laboral no es un tema que preocupe para nuestro negocio".

"Es una plaza que nos resultó muy amigable, que se presta para trabajar mucho; se le da un buen manejo al país en un contexto global donde hay crisis y eso da certezas, aunque nos preocupa cómo puede sobrellevar una eventual crisis en Argentina, debido a los muchos puntos de contacto entre los dos países", expresó.

Afirma que Uruguay "es notorio que se ha vuelto más atractivo y las empresas miran hacia acá". Dice que "Uruguay lo ha venido haciendo bien en los últimos años" y por eso las compañías lo toman en cuenta, "por su seriedad, su nivel de cumplimiento, elementos que atraen a las empresas".

A la hora de repasar los temas pendientes, indicó que "lo que le falta a Uruguay es promocionarse más, alcanzar acuerdos comerciales con otras partes del mundo, elaborar una marca-país más fuerte. Realmente, a nosotros nos cuesta acceder a otros mercados lejanos con nuestros productos elaborados en Uruguay, directamente porque no los conocen. Creo que ahí es donde hay que trabajar mucho y aprovechar las oportunidades que pueden presentarse", concluyó.

El poder de Gloria

El Grupo Gloria es un conglomerado industrial de capitales peruanos con negocios presentes en el país de origen, como también en Bolivia, Colombia, Ecuador, Argentina, Puerto Rico y recientemente Uruguay. Sus actividades se desarrollan en cinco áreas: el sector alimentos, con fuerte presencia en lácteos donde es la primera compañía del país; agroindustrias (preferentemente la cadena azucarera); papeles y cartones (empaques); la industria cementera con presencia en Perú y Bolivia y la línea denominada "nuevos negocios", donde participa en emprendimientos vinculados con transporte y logística y la industria del plástico, entre otros.

La historia reciente

colat es la firma representante de la marca Parmalat en Uruguay, propietaria de una planta en Nueva Helvecia a la que remiten unos 270 tamberos y en donde se produce para el mercado interno y otros 25 países en cuatro continentes.

El grupo Gloria adquirió Ecolat en marzo de este año de manos del Grupo Maldonado, de origen venezolano, que a su vez había ingresado en la firma a finales de 2006, asociándose con Leadgate.

El grupo Leadgate, encabezado por Matías Campiani, había formado Ecolat en 2005, cuando compró las instalaciones de Parmalat, tras el descalabro de la firma italiana a nivel mundial.

Parmalat, a su vez, irrumpió en Uruguay en 1993, en pleno proceso de expansión de la que fuera la tercera empresa láctea del mundo, comprando la local Lactería. Desde ese momento, existen en la plaza local productos con la marca Parmalat elaborados en el país.

Los cambios en el comercio minorista

Guillermo Flores, con experiencia en el desarrollo de la industria y el comercio de alimentos en varios países de la región, dice que "falta mucho por desarrollar" el mercado del retail (venta minorista) en Uruguay, "es uno de los que viene más retrasado en la región, pero eso lo que hace es que hoy existan muchas oportunidades. Hay una infraestructura muy buena, pero se vendrán cambios en el comercio en Uruguay", anticipa.

Asegura que las tendencias internacionales que iban hacia grandes tiendas de enormes superficies, donde el consumidor obtenía de todo pero debía trasladarse grandes distancias, ya no son la meta. "Ese modelo llegó al techo en algunos países, y está pasándose, por ejemplo en Chile y Argentina, a tiendas menores, en algunos casos segmentadas por líneas de producción, más cerca de la gente".

"En Ecuador también se está dando eso, desarrollando lo que le llaman el ´canal moderno´ donde las cadenas están abriendo menores superficies a nivel más local", explicó.

En el rubro farmacias, afirma que se está viviendo "un proceso distinto, se está concentrando en cadenas de productos farmacéuticos que luego se transforman en cadenas de conveniencia, que venden alimentos y otras categorías". En ese rubro, "Uruguay todavía está bastante lejos", subraya.

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