De ese total, un 15% terminó con la muerte del paciente. Los datos de este estudio internacional indican que los hombres tienen más probabilidades de sufrir la enfermedad.
En el mundo hubo 14,9 millones de casos nuevos de cáncer en 2013 y 8,2 millones de muertes a causa de esta enfermedad, según una investigación internacional publicada ayer en la revista JAMA Oncology, de la Asociación Médica de Estados Unidos.
La proporción de las muertes por cáncer sobre el total de fallecimientos aumentó del 12 % en 1990 al 15 % en 2013, mientras que en ese periodo el número de años de vida perdidos debido a esta enfermedad aumentó un 29 %.
El estudio Global Burden of Disease (GBD) analizó 28 tipos de cáncer en 188 países entre 1990 y 2013, aunque los datos disponibles sobre la incidencia de la enfermedad son escasos y dispersos en muchos países.
Según esta investigación, los hombres tienen más probabilidades de padecer cáncer entre el nacimiento y los 79 años, con uno de cada tres hombres con la enfermedad y una de cada cinco mujeres.
Los cánceres de tráquea, bronquios y pulmón fueron los más mortíferos tanto entre los hombres como entre las mujeres, con 1,6 millones de fallecimientos.
El cáncer de mama fue la principal causa de la pérdida de años de vida entre las mujeres, con 13,1 millones de muertes, mientras que entre los hombres lo fue el cáncer de pulmón, que junto al de tráquea y bronquios causó 1,6 millones de fallecimientos.
En 2013, hubo 1,6 millones de nuevos casos de cánceres de colon y recto en el mundo y 771.000 muertes.
Ese año se registraron 1,4 millones de nuevos casos de cáncer de próstata y 293.000 muertes, así como 984.000 casos de cáncer de estómago con 841.000 muertes.
De cáncer cervical hubo 485.000 nuevos casos y 236.000 muertes, mientras que de linfoma no hodgkiniano hubo 465.000 nuevos casos y 226.000 muertes.
Ese año se registraron 442.000 nuevos casos de cáncer de esófago y 440.000 muertes, mientras que hubo 414.000 nuevos casos de leucemia y 265.000 muertes.
"Las observaciones globales de la incidencia del cáncer en la población y las tendencias en el tiempo ayudan a subrayar los aspectos de la epidemiología del cáncer que pueden guiar los programas de intervención y la investigación en esta enfermedad", sostiene el estudio.
"Las estrategias de control del cáncer tienen que priorizarse en base a las necesidades locales y los datos disponibles sobre la incidencia del cáncer. Así, se publicarán datos anuales sobre la incidencia de la enfermedad", concluyó la investigación.
SALUDEFE